domingo, 16 de diciembre de 2007

muerte, tragedia, picadas, ausentes, borrachos, drogados, argentina de la muerte accidentes de tránsito evitables


RED NACIONAL DE FAMILIARES VÍCTIMAS DE TRANSITO

LES DESEA UN BUEN COMIENZO DE 2008 -

De tu "conducta " depende las felices fiestas y vacaciones.


SARA CARMAN MAMÁ Y ABUELA DE CELIA Y VANINA
CRISTINA GUARINOS MAMÁ DE ANDRÉS GUARINOS
1561863624
TERESA MAMÁ DE PAOLO MELLANO 1549604117
ZULMA TARDITTI MAMÁ DE HERNAN FERREIRA PINTO
1559513887
YOLANDA y GODoY padres de EDGARDO GODOY

ANTONIO VIEGA PAPÁ DE JOAQUIN

OYILA MAMÁ DE TRIPICHIO DAMIÁN

EDUARDO Y ESTHER BLASCO AVT LA MATANZA PADRES DE OSCAR

RICARDO Y FANY VALLE PADRES DE TATIANA

FavitPam (Familiares de Victimas de Transito La Pampa)
Silvia Gonzalez, mama de Sacha 0295415497271
Rosa Tomaselli mamá de Jonathan tomaselli - La Pampa
Silvia Feretti mamá de Marcos Andrés- La Pampa
Natalia Garay mamá de sergio Garay - La Pampa

FaviatMen (Familiares de Victimas de Transito Mendoza)
Eva Pedron, mama de Maximiliano y Cyntia


Silvia y Juan Carlos Uro, padres de Juan de JUJUY


FaviatCa (Familiares de Victimas de Transito Catamarca)
Dr. Julio Cesar Reynoso, padre de Julio Cesar
tel: (03833) 428663 - 15513886

P.A.V.I.C.E.I. Salta (Padres Victimas de Conductores Ebrios e Irresponsables)
Raul Padovani, padre de Veronica


RENACER CAPITAL Santiago del Estero
Graciela Gramajo, mama de Alvaro Martin
tel: (0385) 154134288
Familiares de la Rioja
Familiares de Tucumán

FaviatSe (Familiares de Victimas de Transito de Santiago del Estero)
Miriam Arce
Tel: (0385) 156884822

Carlos Emilio Latrónico - Familiares victimas de Entre RioS

SUSANA RECAREY - MAMÁ DE JUAN MANUEL MENDIVE- RENACER ESTEBAN ECHEVERRÍA

IRMA- MAMÁ DE PATRICIA RENACER- ESTEBAN ECHEVERRÍA

BEATRIZ MAIDANA MAMÁ DE GABRIEL BARRAL RENACER- ESTEBAN ECHEVERRÍA

OLGA CASAFUZ MAMÁ DE RAQUEL R.I.VI.I ROSARIO STA FÉ

Chiapas, zapatismo, Subcomandante Marcos, Cuba, México


Cuba es un calendario de esperanza, dijo subcomandante Marcos México, 15 dic (PL) El subcomandante Marcos, jefe del mexicano Ejército Zapatista de Liberación Nacional, dijo hoy que Cuba es un calendario de esperanza. Al intervenir en el coloquio internacional Planeta Tierra que se desarrolla en el estado de Chiapas con la asistencia de intelectuales, historiadores y analistas de varios países, calificó a la isla de referente vital para los pueblos en lucha. La resistencia del pueblo cubano no sólo requiere de conocimiento y análisis, sino también de apoyo, puntualizó. Recordó que, como gesto de solidaridad, las comunidades zapatistas enviaron a Cuba "un poco de maíz no transgénico y otro poco más de gasolina" y condenó las agresiones del gobierno de Estados Unidos contra la Revolución cubana. El evento reune en la ciudad de San Cristóbal de las Casas a unos 300 participantes, entre ellos los intelectuales Pablo González Casanova y John Berger y el historiador estadounidense Inmanuel Wallerstein. También asisten el escritor Héctor Aguilar, el argentino Atilio Borón, el cantante uruguayo Daniel Viglieti y Carlos Aguirre, director de la revista Contrahistorias.

difunden: el 1er. Museo Histórico Suramericano "Ernesto Che Guevara", la Escuela de Solidaridad con Cuba Chaubloqueo" y el Centro de Registro de Donantes Voluntarios de Células MadreIrene Perpiñal y Eladio González - directores calle Rojas 129 local (Caballito) Capital -AAC1405-Buenos Aires-República Argentina telefax: 4-903-3285 email: museocheguevara@fibertel.com.arhttp://museocheguevaraargentina.blogspot.com/colectivos 1 - 2 - 25 - 26 - 32 - 42 - 53 - 55 - 85 - 86 - 103 - 180doná sangre, doná órganos, doná células madre, sé solidario, SÉ VOS.¡Salven a los argentinos! "las ballenas"

Niemeyer Oscar, arquitecto Brasil, Fidel Castro abogado Cuba, Brasilia, fundador Partido Comunista de Brasil



Cuba en el edificio moral de Niemeyer
Rosa Miriam Elizalde
http://www.cubadebate.cu/2007-12-15
Oscar Niemeyer ha dicho cómo le gustaría aparecer en las enciclopedias y libros de arquitectura: un registro corto, acaso tres o cuatro líneas. Nada más. Sin embargo, hace mucho que los textos más diversos en todos los idiomas registran océanos de palabras sobre este brasileño genial que a los cien años se aferra con lucidez y frescura a ese soplo que él ha llamado "la vida". Hoy Niemeyer cumple el primer centenario de su existencia. Bastaría con Brasilia, un lugar que fue ciudad primero en su cabeza, para probar que este hombre vivirá muchísimo más de lo que un ser humano pueda permitirse en este universo. Sin embargo, se suele olvidar que tal vez lo más excepcional en Niemeyer es que, junto con ciudades y edificios eternos, él ha levando el monumento de su conciencia política fraguada en una obsesión: la necesidad de cambiar al mundo.


"Parece mentira, pero ya no quedan más que dos comunistas: Oscar Niemeyer y yo". Niemeyer le atribuye esta frase a Fidel y suele decir en las entrevistas que estas palabras son las que más lo enorgullecen, más que los cientos de premios que ha recibido.

Entiende que cada uno de nosotros es, por encima de todo, hijo de sus obras, de lo que va haciendo para los demás durante el tiempo en que por aquí anda.


Del espacio físico prefiere las curvas y de ellas ha escrito con la hermosura que expresan las líneas de la Catedral de Brasilia, pura poesía: "No es el ángulo recto el que me atrae, ni la línea recta, dura, inflexible, creada por el hombre.


Lo que me atrae es la curva libre y sensual, la curva que encuentro en las montañas de mi país, en el curso sinuoso de sus ríos, en las olas del mar, en el cuerpo de la mujer preferida. De curvas está hecho todo el universo, el universo curvo de Eisntein.


"El escritor uruguayo Eduardo Galeano llamó la atención acerca de esta fascinación del artista: "Niemeyer odia por igual al capitalismo y al ángulo recto. Contra el capitalismo, no es mucho lo que puede hacer. Pero contra el ángulo recto, opresor del espacio, triunfa su arquitectura libre y sensual y leve como las nubes".Niemeyer, por supuesto, es consciente de que solo no puede contra el capitalismo, pero eso no lo inhibe defender lo que piensa, tanto o más que a su propia arquitectura.


"No me callaré nunca —ha dicho este hombre que fundó con Luis Carlos Prestes el Partido Comunista de Brasil. No esconderé nunca mis convicciones comunistas. Y quien me contacta como arquitecto conoce mis concepciones ideológicas. Durante mis conferencias, siempre he subrayado que la arquitectura no es lo esencial. Comparen la arquitectura con la vida, el ser humano, la lucha política, la contribución que hacemos todos a la sociedad para nuestros hermanos desheredados.

¿Qué representa la arquitectura con relación a la lucha por un mundo mejor, sin clases?".Quien busca al arquitecto sabe, además, que es un amigo incondicional de Cuba y de Fidel, a quien ha llamado "su personaje preferido, porque abrió las puertas al hombre nuevo".

Niemeyer fue el primer presidente de la Asociación de Amistad con la Isla en su país y formó parte en 1960 del Instituto Brasil-Cuba, relación a la que rara vez se alude y que quizás podría dar hoy una nota singular en el concierto de los medios que reseñarán los cien años del artista.Esta amistad con Cuba y con Fidel se ha mantenido inalterable por décadas, con disímiles testimonios y cartas, como la que se publica este 15 de diciembre.


Podrían añadirse, por ejemplo, los mensajes cruzados entre los dos amigos a inicios de 2006, cuando Niemeyer le regaló al Comandante en Jefe una maqueta de lo que se convertiría en una escultura que pesa 11,1 toneladas y representa un cubano con nuestra bandera enfrentando a un monstruo, para que se exhibiera en una plaza de la Isla.

En una carta fechada el 1 de febrero de ese año, Fidel le agradeció el regalo y le comentó:Tengo la convicción de que en la Universidad de Ciencias Informáticas, lugar donde estudiarán como mínimo 10 000 jóvenes, y que hoy se ha convertido en un sitio donde se recibe sistemáticamente a importantes personalidades, artistas, intelectuales y entrañables amigos que arriban a nuestro país, tu proyecto será un reflejo de las ideas que compartimos y por las que hemos luchado siempre.

El 16 de diciembre de ese año, Fidel vuelve a escribirle al amigo: Aprovecho la visita de los compañeros que están al frente de la ejecución de tu obra para felicitarte por tus recién cumplidos 99 años. Lo hago también en nombre de nuestro pueblo que agradece tu solidaridad permanente con Cuba.


Mantendremos siempre el espíritu que simboliza tu escultura, en la que el más humilde de los hombres alza su bandera contra el Imperio más poderoso que ha existido jamás, síntesis exacta de nuestra voluntad de luchar por las ideas más justas y la supervivencia de la especie humana. La plaza de la UCI que llevará su escultura, diseñada también por él, está en fase de terminación, de modo que la noticia en este centenario es feliz para Niemeyer y para nosotros: Cuba no es solo la Isla entrañable del edificio moral del artista, sino parte de la geografía de su obra. Y qué obra

Martínez de Hoz Jose Alfredo, Videla Jorge Rafael genocida, reportaje de Cristina Castello, Argentina Nunca Más, desapariciones, torturas, mundial 78



Argentina: Martínez de Hoz, el rostro del espanto
Por Cristina Castello

José Alfredo Martínez de Hoz, primer ministro de la dictadura genocida en Argentina (1976-1983), es una máscara petrificada de horror.
Su política, indispensable para la «Doctrina de Seguridad Nacional», dentro del marco de la «Doctrina de Seguridad Continental», fue indispensable para implantar el terror.
Según la Agencia Dyn, acaba de reivindicar al monstruo Jorge Rafael Videla y hasta se permitió decir que «el Che Guevara era un asesino».
Martínez de Hoz: «Raza de los que funden los huesos del pueblo con la mentira y el engaño», escribió William Yeats.
Fui la única periodista a quien concedió una entrevista hace veinticuatro años. Se arrepintió siempre de haberme aceptado. Después de ese artículo y otros como al verdugo Monseñor José Antonio Plaza y torturadores varios, tuve un accidente de tránsito gravísimo. Todo el periodismo -pues entonces algo quedaba de «periodismo», pensó que había sido un atentado. Acá, un viaje al ayer, que no es recuerdo sino vivencia: aquella entrevista, muy autocensurada pues nadie se animaba a publicarla.

José Alfredo Martínez de Hoz

«Videla es un patriota»

(Nótese que esta entrevista tiene fecha 29 de diciembre de 1983. Si no, no podrá leerse correctamente)

Según el ex-ministro de economía, Jorge Rafael Videla -quien mató tantas vidas- es un ejemplo a seguir. Y sus expresiones no son caprichosas.
Su política en materia de economía, fue el andamiaje que necesitaban los dictadores para el terror. Los monstruos capaces de torturas, represión y muerte desde el terrorismo de Estado y con la suma de Poder.
Hoy la mayoría hace responsable a Martínez de Hoz del caos económico del país. Hoy, recién hoy… la “ciudadanía” argentina es muy lenta para reaccionar.
A contrapelo de la dignidad de la vida, Martínez de Hoz asegura que mejoró la dignidad del hombre y de los desposeídos.
Nuestro diálogo en su departamento fue gélido.
Con Martínez de Hoz frente a frente aunque no mira a los ojos, afuera es diciembre, verano en estas tierras de Buenos Aires.
Y adentro, en su departamento del Edificio Kavanagh, el invierno es impiadoso.

Cuando me acompañó hasta el ascensor, le pregunté:

- Doctor, qué sentía usted cuando sabía que ponían muy fuerte la radio, para que no se escucharan los gritos de los pobrecitos torturados.
(El ministro de economía del genocidio en Argentina bajó la cabeza).
- Doctor, pusieron ratas en las vaginas de muchas mujeres y las “cosieron”; nuestros mares y ríos albergan cadáveres de niños y adultos y…
(Martínez de Hoz bajó más la cabeza).
- Doctor: ¿Qué es respeto a la sacralidad de la vida?
- Tiene el ascensor, señorita....

Abrió la puerta y respiró aliviado con mi partida.

«Los militares tomaron el poder para salvar al país»

- ¿Cuál es su balance del proceso?
-Mire, las Fuerzas Armadas intervinieron en marzo del ’76, para restablecer un sistema jurídico-político-democrático: para combatir el terrorismo y para lograr un orden económico. El balance más importante que puede hacerse entonces, es a partir de analizar si el país cambió o no.

-Cambió. La muerte se llevó adultos, ancianos, niños y bebés por nacer....
- (Ignora mi pregunta) Creo que el 30 de octubre del 83 –con la elección que hubo (Alfonsín-Luder) - no hubiera sido posible sin el 24 de marzo del ’76. A fines del ’75 y comienzos del ’76 era evidente el caos en lo político, en lo económico y en lo social, y el alto grado de terrorismo que había. Ante ese estado de cosas, los militares fueron requeridos insistentemente por muchos civiles...incluso por algunos que hoy se proclaman muy democráticos.

-¿Cómo quiénes?
-No creo oportuno decirlo en este momento, sólo quise señalar que se presionó a los militares para que pusieran fin al caos. Recuerde usted que incluso el gran jefe del partido radical, el doctor Balbín dijo que él no tenía soluciones... yo creo que las Fuerzas Armadas no tomaron el poder, sino que lo recogieron.

- Es verdad, el pueblo –sin lucidez- pedía el golpe de Estado. Y lo pedían los mismos peronistas y políticos en general...
- Sí, nosotros fuimos apoyados por ellos.

-Usted dijo una vez que Massera, Agosti y Videla lo citaron a un departamento del primero de ellos, en Avenida Libertador; que entonces le pidieron un programa económico por si derrocaban al gobierno de la señora de Perón y...
-Sí, ya para entonces las Fuerzas Armadas sabían que era inevitable que tomaran o recogieran el poder.

-...Y agregó que aquella reunión fue a las 02. 31, de un viernes. ¿De qué mes y año...cuándo empezó a gestarse el golpe?
-Era marzo del ’76, sobre las vísperas del 24. Fíjese... yo después les he preguntado por qué no dejaron que siguiera el caos para dar –después- una solución más sólida. La respuesta fue que el alto grado de terrorismo que había era un motivo real de preocupación social.

-¿Por qué no apoyaron al gobierno constitucional, en lugar de tomar el Poder?
-Bueno... ya estaban haciendo eso, pero paralelamente había una gran descomposición en la estructura político-social. Entonces, una vez agotada la instancia política, los militares asumieron el poder, para salvar el país... No olvide que las Fuerzas Armadas fueron consideradas tradicionalmente, en la Argentina, como guardianes del orden en última instancia.

-¿Y cuál es su balance de la política económica de estos casi ocho años de muerte y destrucción?
- (Gélido, no acusa recibo) Entre el ’76 y el ’80 la parte económica se desarrolló de una forma congruente y hay muchas cifras que así lo demuestran. Pero después del ’81 hubo tres presidentes y cuatro ministros de economía que sucedieron al gobierno. Todos ellos, salvo uno, declararon que sus propósitos eran seguir una política económica totalmente diferente de la nuestra.


La Argentina de Martínez de Hoz y
la Argentina de los argentinos


-¿Desde el punto de vista de la economía hubo procesos dentro del proceso?
-Sí, porque faltó la continuidad necesaria para que el ciclo se completara.

- Dios nos libre...
- Quiero decir que con el cambio de autoridades se hizo lo contrario de cuanto se había prometido y así se generó un proceso de desconfianza en el pueblo; después, a partir de ‘81, se desataron situaciones graves de recesión, de baja de salarios reales...

- Pero su política económica destruyó el aparato productivo del país...
- Ese es un slogan que se ha hecho. A través de una encuesta que encargó hace poco la Unión Industrial Argentina, surge muy claro que en el período ’76-’80 la inversión industrial aumentó un 19 por ciento con respecto al quinquenio anterior, y que declinó fuertemente a partir del ’81.

- Parecería que durante su gestión hubo dos países: uno, el suyo, floreciente a partir de cifras. Y otro, el real: el del desempleo, del hambre, del miedo, de la imposibilidad de soñar.

- Yo coincido con usted en que hay que ver si las cifras coinciden con la realidad. Pero también hay que ver si esta coincide con la proclamación vocinglera que de ella se hace.

-No hablo de proclamaciones sino de realidades.
-Mire, en los años ’80 habíamos llegado al nivel más alto que alcanzó la Argentina en los tiempos modernos en materia de salario real y...

-¿En el salario real de quién...en el suyo?
- En el de toda la población. Recuerde usted lo que podía comprar con su sueldo en el año ’80... Porque el salario fue aumentando su capacidad adquisitiva en términos reales de moneda constante y alcanzó en el ’79 y en el ’80 su máximo nivel. Por otra parte, entre el ’79 y el ’80 la tasa de desocupación fue del 2 por ciento, es decir plena ocupación. Por todos lados había carteles que decían: “Se piden tal cosa...”, y no se requería trabajo, sino trabajadores.

- Doctor: lo que usted dice es un atropello a la vida humana.
-No. Yo sé que después aumentó la desocupación pero no en aquel momento. Creo que hay que tomar las cosas en su aspecto global y...

-Doctor, ninguna propuesta económica es válida si no se toma como punto de partida al hombre y su dignidad personal.
-Sí, para eso estuvimos nosotros. Y atendimos y mejoramos la dignidad del hombre.

- Pero si la economía debería ser una ciencia social y la suya fue elitista....
-¡Todo lo contrario! Nosotros ofrecimos un mayor número de trabajo mejor remunerado, realizamos nuestra política en un clima de libertad y...

-¿De libertad?
-Sí, en un clima de libertad y de competencia. Establecimos reglas objetivas de juego, para que la gente progresara de acuerdo al esfuerzo propio; favorecimos el interés general de la sociedad y apuntamos al mejoramiento de la calidad de vida de los pobres. Durante nuestra gestión, propiciamos un equipamiento en la medicina particular, en los hospitales y sanatorios del país, e incorporamos desde elementos simples hasta los aparatos más sofisticados para tomografías computadas. ¿Eso es ser elitista?

-¿Recuerda cuando decían que usted era Robin Hood... pero al revés?
- Sí... eso se dijo al principio, cuando todavía no eran evidentes los alcances del plan; cuando se veía que controlábamos la espiral salarial, mientras liberábamos los precios. No obstante, después se demostró la eficacia de esa política.

- ¿La eficacia para matar personas, sueños, vidas?
Eso corre por su cuenta.

- Doctor: durante la dictadura sólo se criticaba su política, para dar la imagen de una libertad de prensa que no existía. Pero usted estuvo de acuerdo....
- En materia de economía siempre hubo libertad de prensa. Por otra parte, creo que durante el proceso se elevó el nivel de vida y de pensamiento en la Argentina. Hasta entonces habíamos vivido aislados del resto del mundo, pero entre el ’76 y el ’80 la gente pudo viajar y conocer otros países.

- No sé a qué llama usted “nivel de vida” mientras se asesinaban personas. Además, ¿quienes viajaron y con qué costo para el país?

- Viajó la gente modesta, gente que después me paró en la calle para decirme que gracias a mí y a mi política había podido hacerlo. Yo quiero un país abierto y tengo una mentalidad abierta a la civilización y la cultura.

»El general Videla tiene gran moral»

- ¿Por qué se somete a esta entrevista?
- Porque creo que es importante cambiar opiniones y dar explicaciones sobre circunstancias. Que no todos conocen.

- ¿Si alguien tiene la conciencia en paz tiene que dar explicaciones, sin negativa alguna?
- Claro...

- No es el caso de Jorge Rafael Videla, quien no recibe al periodismo a pesar de tantas muertes en su haber...
-¡No! ¡No! La actitud de Videla en este momento es de una gran discreción y tendría que ser alabada.

- ¡Claro¡ Organizó acá un mundial de fútbol, sospechado de “vendido”. En arreglo con el Norte tuvimos hasta una Mis Universo argentina. Y decía “somos derechos y humanos”. Pero sembraba la muerte...
-No, no, permítame que discrepe con usted. Yo he leído muchos comentarios –no sólo del aspecto económico- referidos al gobierno de Videla y todos fueron respetados.

- Su opinión sobre el enjuiciamiento a los miembros de las tres primeras juntas militares del proceso.....
- Yo le anticipé que de ese tema no quiero hablar. Y no hablaré.

- Defina a Videla por favor.
- El General Videla es un gran patriota, tiene una gran altura moral, es íntegro en sus procederes y posee un gran equilibrio.

- ¿”Patriota” un hombre durante cuyo gobierno desaparecieron 30.000 personas, hubo torturas y detenidos (en condiciones infrahumanas) sin proceso ni causa?
- Mire, ya le dije que no quiero entrar en estos temas porque serán debatidos en otros ámbitos. Sólo agregaré que no seamos desmemoriados y recordemos cómo empezó esta situación en la Argentina. Todo nació cuando se quitaron los instrumentos legales para la represión de las actividades ilícitas, como el terrorismo: luego, en el ’73, los terroristas fueron amnistiados y volvieron a sus andanzas. Así fue que durante mucho tiempo los pobladores, desde los más modestos hasta los más encumbrados, sufrieron los embates de la subversión, con muertos, heridos y desaparecidos.

- Detesto toda violencia. Pero el terrorismo de Estado a nada puede compararse. Por favor, deme una sola razón que justifique un genocidio. Claro, si hablamos entre seres humanos...
- Mire... yo tuve a un subsecretario de trabajo muerto: Miguel Padilla; y recuerde también los casos de los doctores Klein y Alemann, quienes se salvaron por milagro y la muerte del padre del doctor Soldati, y...

-Insisto en la pregunta anterior.
- Le quiero decir –y no deseo seguir hablando del tema- que hay veces en que un país empieza a sentir un embate muy fuerte y difícil de controlar, y que es entonces cuando la autoridad de gobierno –en defensa del orden social establecido- protege la vida y los derechos humanos. Fue lo que pasó: se protegió la vida de los veintiocho millones de argentinos, contra una minoría que los puso en jaque.

- ¿Usted justifica que un hombre mate a otro?
- Bueno... cuando los ciudadanos de un país son atacados por el terrorismo, hay algo que se llama defensa propia.

-¿Usted dice “desaparecer” personas con el argumento de la “defensa propia”?
- Yo no quiero entrar en detalles.

- ¿Detalles?
- Sí, no puede estar en un plano de igualdad el terrorismo que mata gente inocente y el gobierno que lo reprimió en defensa del orden y de la vida de la población. Después, puede haber una larga discusión sobre la forma de la represión... pero yo ahí no quiero entrar.

- ¿Por qué?
- Porque no me corresponde.

- Pido su mirada como ciudadano....
- Yo le dije que mi entrevista de hoy era para otras cosas y así lo convinimos. Además, este tema va a ser resuelto en la jurisdicción que corresponde, de acuerdo lo ha dispuesto este gobierno.

- A ver, cuénteme de los derechos humanos...
- Ya le dije cuál es mi opinión... ¿quiénes comenzaron a atacar los derechos humanos y la vida?

-Doctor... ya le dije, cuando la represión se ejerce desde el Estado, sin apelar a la justicia, con la suma del poder y...
- Bueno... hay que ver si fueron inocentes. Claro... pueden haberse producido excesos...

- No se puede hablar de “excesos” cuando está en juego...¡la vida¡
- Pero... usted está tratando de arrastrarme a esta situación y yo le he dicho de entrada que no quiero hablar de esto.

- Recuerdo la imagen de Videla por televisión, cuando comulgaba
- Y me parece muy bien, pero no quiero entrar en esta discusión, a la cual usted me quiere arrastrar. Perdóneme, pero esto se termina.

«La libertad, el amor
y el lugar en el cielo para Videla»

- ¿Votó, doctor?
- Sí.

- ¿Por quién?
- El voto es secreto, ¿no le contaron?

- Había dicho que votaría por el partido con el cual se sintiera representado...¿lo encontró?
- Ciertamente en la última elección no lo había. Pero creo que la gente votó por algo nuevo... y la única cara y el único estilo nuevos fueron los del doctor Alfonsín. Por eso le decía que los años del proceso no pasaron en vano.

- Ciertamente: hay madres que no recuperarán a sus hijos, niños que crecen con los asesinos de sus padres y...
- Bueno, pero es que también hay errores de los argentinos. Y tres fundamentales. Uno es el excesivo dogmatismo ajeno a la realidad, que hace que los dogmas sean inaplicables. Como el suyo...

- Si defender la vida, la vida de todos, es ser dogmático, Cristo lo fue...
- Esa es su opinión. Lo segundo –quería decirle- es el facilismo; y el tercer punto es administrar la cosa pública con sentido de corto plazo. Yo espero que con esta elección se logre coherencia.

- Hoy se habla de “Unidad nacional” ¿cree en ella?
- Yo creo que de la discusión fecunda nacen las buenas ideas... pero acá las discrepancias suelen transformarse en denuestos. En este país se lanzan insultos a los que no sostienen las mismas ideas y –para descalificar al adversario- se lo llama “vendepatria” o “antinacional”.

- Y ustedes llamaban subversivo a todo quien no pensara como ustedes....
- Pero lo que yo quiero decir que hay gente que cree tener el monopolio del patriotismo, de la verdad y de la ética y eso es soberbia. Acá hay que partir de que cada uno de los argentinos merece respeto.

- ¿ Y cómo “respetaron” ustedes las vidas en campos de concentración?
- No quiero volver a ese tema.

- Doctor... ¿Qué es la libertad?
- Es la característica básica que Dios le ha dado al hombre. Sin libertad no hay vida, es el valor máximo que hay que defender.

- Curiosas palabras en su boca, ¿esa libertad hubo entre el ’76 y el ’83?
- Mucha más: los programas en lo político, en lo económico y en lo social estaban basados en la libertad.

- Mire, este parece un diálogo entre alguien que habla en sánscrito y otro en japonés ¿Qué opina del ministro actual de economía, Bernardo Grinspun?
- Le deseo el mejor de los éxitos.

- ¿Qué piensa de los políticos que...?
- No quiero hacer juicios sobre ninguna persona.

- Está bien, ¿qué es el amor?
- Es un sentimiento primigenio que hace que una persona tenga como más importante que su propia persona a la del prójimo.

- ¿Usted amó a su prójimo... el pueblo?
- Amo al pueblo.

- ¿Y que siente cuando ese pueblo lo abuchea y detesta?
- Mire, la gente en la calle me manifiesta su solidaridad y simpatía y me recuerda cuanto mejor estábamos en aquella época. Además todos tenemos que aprender, porque los militares no actuaron nunca solos.

- Es en lo único en que coincido con usted, ¿cómo vive hoy?
- Trabajo en cosas familiares y en consultas de problemas legales o económicos. Pero...disculpe pero es hora de terminar esto.

- ¿Cuando usted muera irá al cielo o al infierno?
-El único que puede garantizar eso es Dios, pero uno hace lo posible por cumplir con Él y con la sociedad.

- ¿Y Videla qué lugar tendrá en el “más allá”?
- Si yo estuviera en el lugar de Dios, conociendo a Videla como lo conozco, no dudaría en darle el cielo.

- Muchos se mudarían al cielo de enfrente...
- Usted está equivocada con Videla.

- No, doctor. Hay personas que apuestan a la vida y otras que apuesta a la muerte. Yo apuesto a la vida.
- Yo también.... ¿qué le hace dudarlo?

Publicada en la revista “La Semana”
Buenos Aires – Argentina el 29-12-83
Cristina Castello
www.cristinacastello.com