miércoles, 12 de diciembre de 2007

Facon Grande, fusilamientos a peones rurales, dictadura, Osvaldo Topcic, Pinto Cramer, Río Gallegos, Argentina, alemanes


Realidades argentinas Triunfaron definitivamente. Acabo de volver a visitar todos los lugares que recorrí en la Patagonia para investigar las trágicas huelgas rurales del 21-22. Hice el mismo camino de aquel entonces. Puedo decir que los vencidos de ayer han triunfado definitivamente. Los humildes héroes tienen el recuerdo permanente de la población. Sus nombres están inscriptos en colegios, monumentos, calles, cañadones. Ya no podrá venir nadie a alejarlos del recuerdo popular. En Jaramillo me esperaba una partida de gauchos con sus vestimentas típicas.Hubo música, bailes populares. La intendenta del lugar, Ana María Urricelqui, habló de lo que había significado para la historia de esas extensiones patagónicas la figura del gaucho Facón Grande, fusilado por el Ejército Argentino por pedir por las peonadas. Un lienzo de este gaucho cubría una pared del salón de actos municipal, pintado por un artista local. Hoy es el héroe más popular de toda la provincia. Su monumento está a la entrada de Jaramillo. Más al sur, en San Julián, se recuerda al héroe venido de Buenos Aires para acompañar a los trabajadores del campo: Albino Argüelles, fusilado por el capitán Anaya, que devino general golpista años después. En la estancia San José, con el historiador y médico patagónico Suárez Samper, repusimos la cruz que algún gaucho había puesto en la tumba masiva de los peones de la columna Argüelles, masacrados por el teniente coronel Varela. La cruz tenía grabadas a punta de cortaplumas las bellas palabras de duelo: "A los caídos por la livertá". Sí, así, con v corta y sin d final y con acento. Se ve que el gaucho tal vez tenía poca escuela gramatical pero sí una profunda cultura de hombre libre: la máxima palabra era para él la Libertad, que no es otra cosa que la Dignidad. Por eso los habían asesinado, por ser dignos y no someterse a los dictados de la explotación del sistema. En la estancia La Anita de los Braun Menéndez está y estará para siempre, marcado con un monolito, el lugar que guarda los restos de los 610 peones fusilados por el Ejército Argentino en aquel espantoso 10 de diciembre de 1921, cuando el bellísimo Calafate se cubrió de sangre humilde por la codicia de los propietarios y la crueldad militar. El silencio nos habló allí del duelo eterno. Por pedir un paquete de velas por mes, cuatro tiros. Pero nada es gratuito: el monumento será un eterno dedo acusador a los explotadores y a sus defensores oficiales. Sí, el monumento está allí, frente a la propia estancia. Pero no está en paz. Las manos sucias de siempre tratan de destruirlo. Su estado es lamentable: las placas de las adhesiones robadas o rotas, y lo que debiera ser un jardín en su frente es nada más que tierra seca y yuyales aunque unas flores silvestres resisten para demostrar que siempre estarán allí dando sus colores por los caídos. Ya dijimos una vez en estas páginas que los responsables de los monumentos deberían reponer todo lo que se rompe o destruye. En la soledad, los aviesos aprovechan a destruir lo material porque jamás podrán ya esconder los crímenes oficiales masivos. En El Calafate, fue el encuentro ahora con Isabel Soto, la hija de Antonio Soto, el gallego anarquista padre de las huelgas del sur santacruceño. Ella vino de Punta Arenas para recordar a su padre. Aquel que dijo en la última asamblea: "Yo no soy carne para tirar a los perros" y prefirió internarse en la cordillera antes de entregarse a las tropas del capitán Viñas Ibarra, quien lo hubiera fusilado. Estamos en el museo de Calafate y comprendemos las lágrimas de Isabel al recordar a su padre cuando de pronto llega un conjunto de turistas alemanes. Recorren la Patagonia en motocicletas y cuando se enteran de las huelgas me someten a un interrogatorio que no tiene fin. Quieren saber todo. Acerca de los huelguistas alemanes Schulz y Otto y también de Kurt Gustav Wilkens, el vengador, el que a va dejar muerto en Palermo al teniente coronel Varela, fusilador de peones rurales. Wilckens decidió hacer justicia por su propia mano de acuerdo al principio de matar al tirano. "Cuando no hay justicia, la justicia debe realizarla el pueblo",fue su consigna. Y Varela va a caer en la calle Fitz Roy, en una bella mañana del verano porteño de 1923. Todo quieren saber los turistas alemanes. Cuando quedan satisfechos, montan de nuevo sus motos, arrancan y saludan con la mano. En Piedra Buena, el antiguo Paso Ibáñez, el intendente nos va a mostrar dónde tuvo lugar el combate entre el Ejército y los huelguistas. Allí va a surgir la figura de otro gallego, Outerello, que estuvo al frente de las peonadas hasta el fin, hasta que cayó ante los máusers de Varela. En Piedra Buena me prepararon una alegre sorpresa: poder manejar el camión de 1917que utilizamos en la filmación de La Patagonia rebelde. Fue un gusto peligroso manejar esa mole que gruñía como un elefante, por las calles de la bella ciudad. Volví así a manejar por primera vez desde 1979, el día aquel que por escuchar los increíbles relatos de quien me acompañaba, el querido Osvaldo Soriano, me distraje, y atropellé el auto de un turco y resolví no manejar más. Pero ahora no podía decir que no a ese regalo peligroso. Arriba de ese mamotreto de hierro motorizado me sentí como Schumi en la Patagonia. De allí fuimos a Río Gallegos, donde nos esperaban historiadores, bibliotecarios, archiveros con los tesoros documentados sobre los cuales casi cuarenta años atrás había reconstruido la tragedia. Tuve la dolorosa comprobación de que el juez de la dictadura, Pinto Cramer, había regalado las carpetas descubiertas por mí en el archivo del juzgado federal al señor Osvaldo Topcic. Los hombres de la dictadura no sólo se consideraban dueños de la vida y de la muerte de todos sino también dueños de los papeles de la historia. Lo entrevisté al señor Topcic, quien reconoció haber recibido del representante de los golpistas del '76 esos valiosos papeles. Ojalá los devuelva muy pronto adonde pertenecen, al archivo donde se guardan los testimonios de todos los santacruceños. La sociedad no sólo tendría que juzgar a los asesinos y torturadores de la desaparición de personas sino también a sus cómplices civiles que manejaron la sociedad a sus gustos e intereses. Y vino entonces la entrevista sorpresiva: la nieta del vasco Zurutuza. Ese trabajador rural libertario había acompañado a Antonio Soto en toda la huelga y también decidió no ser "carne para tirar a los perros" y atravesó junto a él la cordillera para salvar su vida y continuar sus luchas. La nieta vino a verme con una colección de fotos de su abuelo y llenó el ambiente de tibieza y recuerdos sobre la vida de su abuelo. Ella se sentía muy orgullosa de que su abuelo hubiera luchado por la dignidad de los peones rurales. Le brillaban los ojos de alegría al poder relatar que su abuelo había sido "uno de los huelguistas del '21". Sí, de allí a estancia Bella Vista, en la antigua Cañadón León, ciudad cambiada de nombre por la del militar Gobernador Gregores. Las tierras de Facón Grande. Por eso hemos propuesto que se vuelva al nombre de antes cambiándole solamente la palabra León por Font. Cañadón Font sería el nombre de esa tierra para recordar al gaucho que murió por defender a sus pares gauchos. Antes de llegar a Bella Vista, un cartel señala "Cañadón de los muertos". Allí, a unos centenares de metros, está la tumba masiva de los fusilados del '21. Una cruz y dos grandes ruedas de carro los recuerdan. De allí a la estancia, donde todavía está el galpón en el cual los militares encerraron a cientos de huelguistas en las condiciones más inhumanas para luego llevarlos al cañadón a fusilarlos. Luego, llegada al colegio José Font, sí tal cual, el mejor premio a Facón Grande. Darle su nombre a un instituto de enseñanza. Un símbolo de la solidaridad y el coraje civil ante la injusticia. Nombre votado por los docentes, los padres de los alumnos y los alumnos. Nada más democrático y más digno. Allí se hace un acto para público, docentes y alumnos. Hablamos sobre "La Noche del Chancho", el estudio de la docente Hurí Portela sobre las tropelías cometidas por el comandante de Gendarmería Callejas durante la dictadura de Videla. El trato que propinó a los estudiantes de la escuela Agrotécnica de esa ciudad. Se está rodando un film sobre esos hechos. Sí, la gente quiere dejar constancia, testimonio, se nota mucho dolor y rabia. La Gendarmería no pidió jamás disculpas por esos hechos aberrantes. Lo mismo que el Ejército. Varela estaba enterrado en el Panteón militar de la Chacarita. Su tumba tenía una sola placa que lo dice todo: "La Comunidad británica de Santa Cruz al teniente coronel Valera que supo cumplir con su deber". Últimamente han pasado sus restos a una sección que se titula "Muertos por la Patria". La pregunta que surge es: ¿por la patria de quién? ¿De los latifundistas? Realidades argentinas. Por Osvaldo Bayer

Fernando Cardozo ATE, discurso ante Delegación Cubana que viajó a la asunción de Cristina Fernández presidenta de la Argentina


Sr. Vicepresidente del Consejo de Ministros de la Hermana republica de Cuba compañero José Ramón Fernandez, cros. de la comitiva oficial de Cuba, Cro. Embajador Aramis Fuentes Hernandez, misión diplomática de cuba en Argentina, representantes de las casas de amistad, partidos políticos y del movimiento obrero.

En nombre del Movimiento Argentino de Solidaridad con Cuba quiero expresarles nuestra bienvenida a la República Argentina, patria natal del Comandante Ernesto “Che” Guevara.

Nuestro Movimiento, integrado por organizaciones políticas, sindicales, sociales, casas de la amistad y comisiones de solidaridad reafirma su compromiso inquebrantable con el gobierno y pueblo revolucionarios de Cuba, ejemplos de dignidad, solidaridad, justicia social, derechos humanos, democracia, honor y valentía, que enfrentan cotidianamente las distintas agresiones del imperio.

En el ocaso del imperialismo yanqui, sus acciones se tornan más agresivas. Ante el rechazo de los pueblos de la globalización neoliberal y el fracasado y perverso modelo capitalista que intentan imponer en nuestro continente, no escatiman en acudir a todos los métodos nefastos de desestabilización y muerte que han ido pergeñando durante la triste vigencia de su imperio.

Ante ello, la revolución cubana no solo lo enfrenta con valor sino que pone a disposición de nuestros pueblos de América toda su obra humanista: los médicos internacionalistas, la escuela latinoamericana de ciencias médicas, el método de alfabetización “Yo si puedo” y la operación milagro; mostrando que pensar en un mundo mejor es posible y que existe otra forma de la globalización, otra forma de integración que es el ALBA.

Aqui me tomo una licencia...para decir que en el día de hoy 46 personas de los barrios mas pobres de la provincia de Bs. As. han sido beneficiarios de la misión "Operación Milagro" este es la realidad! eso es Cuba! aquí se ve en la realidad lo que significa el ALBA! Gracias compañeros de Cuba.

El año próximo, celebraremos en Argentina, más precisamente en la ciudad de Rosario, el 80 aniversario del natalicio del Comandante Ernesto “Che” Guevara. En ese marco y bajo la presidencia honoraria de los cinco patriotas cubanos, se desarrollará el Octavo encuentro nacional de solidaridad con Cuba que contará con la presencia de más de 400 delegados de todo el país e invitados internacionales, En ese contexto también se realizará un encuentro mundial de centrales sindicales, movimientos sociales, catedras del Che, de juventud, el homenaje al 90 aniversario de la reforma universitaria y la inauguración del primer monumento al CHE, obra colectiva del escultor Andres Zerneri que culminará con un Mega festival el 15 de Junio del 2008.

Este homenaje al comandante no pretende ser un recuerdo laudatorio que eluda el compromiso con el presente. Esos homenajes solo quedan reservados para aquellos a quienes se considera definitivamente muertos. El Che, como dijo Eduardo Galeano, “tiene la peligrosa costumbre de seguir naciendo” y por estos tiempos que corren, se lo ve nacer con frecuencia en distintos rincones de nuestra Latinoamérica.

En Cuba nace todos los años con el juramento “seremos como el Che” de los pequeños pioneros. Ese semillero de ética socialista que alimenta a esa querida Revolución construida a 90 millas del imperio. Nace cada vez que el comandante Fidel Castro lo presenta ante su pueblo como modelo de conducta y vuelve a nacer en el ejemplo cotidiano de cada uno de los revolucionarios, enfrentados al brutal bloqueo o recluidos —como rehenes— en las cárceles del gendarme internacional, como los cinco héroes cubanos. ¡A quienes también rendimos hoy nuestro homenaje más profundo! y Exigimos su inmediata libertad.

Un día de primavera de 1967, las agencias de noticias nos dijeron que el comandante había muerto en Bolivia; pero la historia —esa historia de las luchas de nuestras mujeres y de nuestros hombres contra la opresión— nos reveló la verdad: ese 8 de octubre, en realidad, se constituyó en el día del alumbramiento definitivo del Comandante Guevara.

Hoy su figura transita todas las latitudes del planeta y —por estos días— recorre con más fuerza que nunca cada palmo de Bolivia. Está en el corazón y en la mente de los hermanos bolivianos, de ese pueblo que ha empezado a “domar su destino”, como le gustaba decir al Che; de ese pueblo que ha llevado al gobierno al presidente Evo Morales, como resultado de sus combates en defensa de su patrimonio y de su identidad.

También en Venezuela el nació muchas veces, pero ese 27 de febrero de 1989 —en medio del Caracazo— el Che nace de un modo absoluto y desde ese día, junto al Libertador Simón Bolívar, guía las luchas de nuestros hermanos venezolanos. Esos hombres y mujeres que, en 2002, defendieron con valentía al gobierno constitucional del presidente Hugo Chávez. Ese pueblo que está dispuesto a defender y profundizar la Revolución Bolivariana, a la que consideramos patrimonio de toda nuestra América latina.

“El capitalismo —decía el Comandante Guevara, en su trabajo ‘El socialismo y el hombre en Cuba’— recurre a la fuerza, pero, además educa a la gente en el sistema. La propaganda directa se realiza por los encargados de explicar la ineluctabilidad de un régimen de clase, ya sea de origen divino o por imposición de la naturaleza como ente mecánico. Esto aplaca a las masas que se ven oprimidas por un mal contra el cual no es posible la lucha”, concluye el Che.

Estas premonitorias palabras pueden aplicarse —con exactitud— al proceso padecido por la mayor parte de los habitantes del planeta durante el auge de las ideas neoliberales. Esta nueva etapa de acumulación capitalista, tuvo su máxima expresión en Latinoamérica durante la década de los noventa, con la expropiación de los bienes de la sociedad y la soberania de nuestros pueblos expresados con el eufemismo de las “privatizaciones”; con el brutal retroceso de las conquistas sociales, maquillado con la expresión “flexibilización laboral”; o con los derechos a la salud, a la educación, a la seguridad social, degradados a la condición mercantil de meros servicios.

Pero esta brutal regresión en la calidad de vida de la mayoría de la población, para ser más efectiva, estuvo —y está— acompañada de una tenaz labor ideológica del imperio y de sus socios locales, destinada como dijo el Che a penetrar la conciencia de las masas.

Es allí donde se hace imprescindible aplicar uno de los aspectos más importantes de las enseñanzas del Che, la necesaria confrontación de ideas. Una lucha que no termina, ni aún cuando se haya alcanzado una sociedad más justa. Mientras existan en el mundo potencias imperialistas que defiendan con la violencia y con las ideas sus sociedades injustas, tendrá vigencia la tarea de desarticular la hipocresía del dominador.

El Che también nace con frecuencia en la Argentina. Su figura presidió las luchas de diciembre de 2001, cuando las calles se inundaron de manifestantes decididos a terminar con una política neoliberal de entrega y miseria, pergeñada con sangre por la última dictadura que dejo como saldo 30.000 compañeros detenidos desaparecidos y continuada en el marco de una democracia formal por los sucesivos gobiernos constitucionales. El Che comenzó a caminar con los trabajadores con los piqueteros; se reúne en las asambleas barriales; recupera juntos a los trabajadores las empresas abandonadas por sus patrones; defiende las tierras de los campesinos y de los pueblos originarios amenazados por los terratenientes y las transnacionales, . El Che, con su claro pensamiento, no deja de advertirnos sobre los peligros de negociar con el imperialismo desde el sitio de la dependencia. El Che estuvo en la Cumbre de los Pueblos de Mar del Plata, bloqueando el Area de Libre Comercio de las Américas. El Che está —y estará— junto a los hermanos peruanos, colombianos, Costarisences ... marchando contra los Tratados de Libre Comercio, otro instrumento de dominación.

El Che nos sigue enseñando con su ejemplo y con sus reflexiones. Nos invita a luchar para “salir del reino de la necesidad y entrar al de la libertad”, y lo hace advirtiéndonos “el camino es largo y lleno de dificultades. A veces, por extraviar la ruta, hay que retroceder; otras, por caminar demasiado aprisa, nos separamos de las masas; en ocasiones, por hacerlo lentamente, sentimos el aliento cercano de los que nos pisan los talones. En nuestra ambición de revolucionarios, tratamos de caminar tan aprisa como sea posible, abriendo caminos, pero sabemos que tenemos que nutrirnos de la masa y que ésta —nos señala el Che— sólo podrá avanzar más rápido si la alentamos con nuestro ejemplo”.

Este homenaje trascenderá, si queda como saldo la necesidad de unir a todas aquellas voluntades dispuestas a enfrentar al enemigo principal, ese que está masacrando a los pueblos iraquí y afgano. Que está amenazando a Cuba, a Venezuela y a Bolivia, por haber tenido la valentía de erguirse ante el imperio. Que amenaza arrogante al mundo entero.

El mejor homenaje y bienvenida que podamos brindarles es unirnos para enfrentarlo. ¡Hasta la victoria siempre!

Gracias compañeros

Holguín, Cuba, Toto, Joaquín Fernández Moreno, Eladio González, Chaubloqueo, Museo Che Guevara, Rodolfo Livingston, arquitecto


DIARIO DE LA PROVINCIA DE HOLGUÍN

30 de Enero de 1993

por Joaquín Fernández Moreno
fotos Dionisio Tamayo Pupo

LAS CARTAS DE TOTO

Lo imagino desde sus increíbles 50 años, allá en Espinosa 1457 en la capital federal de la República Argentina, donde tiene un comercio que se llama Bagatela para vender, alquilar ó permutar de todo, desde disfraces hasta victrolas a cuerda. El es El Toto.

Eladio González vino a Cuba como turista, con su familia, a mirar, a ver, sin percatarse de que de momento su nombre y su decisión de donar sangre para salvar la vida al joven combatiente Rolando Pérez Quintosa lo convertiría, de la noche a la mañana, en uno de nuestros hermanos más queridos.
El también argentino y empedernido amigo de Cuba, el arquitecto Rodolfo Livingston en su reciente libro “Cuba Existe, es Socialista y No está en coma”, relata ese momento vivido por el admirable Toto: “Al enterarse de la situación por la que atravesaba Rolando, peleando por su vida en el Hospital Naval, tuvo un impulso: decidió donar sangre; trepó a uno de los taxis estacionados en la puerta del hotel. Cuando el taxista se enteró del motivo del viaje se negó a cobrarle, y al llegar al hospital, le dijo “Yo me voy a quedar aquí todo el tiempo que usted precise”.

“El Toto fue atendido por la jefa de Hemoterapia, quien le preguntó por su grupo sanguíneo. “RH negativo”, respondió orgulloso. Entonces fue cuando la doctora abrió dos heladeras de sangre repletas de RH negativo y se negó amablemente a aceptar la donación. Pero él se quedó dando vueltas por el hospital como un león encerrado, quería dar su sangre, se la habían rechazado. Escribió, entonces, una nota en un papel y pidió que se la entregaran al padre de Rolando. Un periodista recogió esa pequeña carta y poco después fue publicada en el periódico “Trabajadores”.

Al día siguiente de su frustrada donación de sangre, El Toto viajó a Buenos Aires y a los 25 días, que es lo que demoran las cartas desde Cuba a la Argentina, empezó a recibir cartas, cartas y más cartas; ya va por la 214 y las contesta todas. No contento con eso, hace listas de sus corresponsales y las reparte a sus amigos para que, a su vez les escriban a los cubanos.

En medio de una conferencia, en la Casa de Amistad Argentina – Cuba, en el mes de agosto del año pasado, Livingston no resistió la tentación de decir quién era El Toto: “A estas alturas, debo decirlo, es un agente, lo voy a denunciar públicamente, es un agente de la multiplicación de los afectos, es un peligroso agente multiplicador de la solidaridad”.

AVALANCHA DE CARTAS

Los dolorosos hechos acaecidos el 9 de enero de 1992, en la Base Náutica de Tarará, son la génesis de esta correspondencia multiplicada, donde nuestros compatriotas, por centenares apenas si dejan tiempo a Eladio González y su amorosa Irene para atender toda la que llega a la República Argentina.
Gracias a ese puente de amistad, muchas frases de agradecimiento se dirigen al compatriota del Guerrillero Heroico: “Amigo usted dispone de una segunda patria. Ya ve, cuantos hogares tiene usted en Cuba… Cuando usted vuelva a Cuba, visite mi hogar…. Escríbame en cuanto lea estas líneas…. Te queremos como a uno de los nuestros….. Confía en que no moriremos….Para hombres como usted tenemos las puertas abiertas… Rolandito (hijo de Pérez Quintosa: N/R) algún día va a saber de ti…. Si algún día pudiera verlo lo abrazaría como un hermano mío…”

En el intercambio epistolar entre Eladio y los cubanos. El Toto se pregunta, en marzo del 92: ¿Por qué las letras son diferentes? ¿Por qué el cambio de edades y sexos?

¿Por qué están ustedes en todos los sitios de Cuba?.... Desde Santiago de Cuba, Bayamo, Holguín, Las Tunas, Camagüey, Ciego de Avila, Sancti Spiritus, Santa Clara, Cienfuegos, Matanzas, Pinar del Río y La Habana, me dicen hermano…”

En nuestra segunda visita a Cuba, mi mujer Irene y mis dos hijos menores. Demián Rafael (14) y Manuel Emiliano (12) fueron testigos y partícipes de cómo son ustedes, como reciben al extranjero, como abren las puertas de sus hogares y de sus corazones, como comparten su pan (a pesar del período especial), su cerveza y sus mojitos.


Fue hablar con cientos de cubanos en esas calles, entrar en muchas casas; ir al Palacio de los Matrimonios (por curioso) y colarme a la ceremonia y oír emocionado, dar el SI a ella (de Alamar) y a él (de Guanabacoa) e incrédulo, verme arrastrado a la fiesta en La Habana vieja y allí recibir mi cake y bailar con la novia…”

“Ultimo día, Hospital Naval, un taxista que no olvido, hematología, corredor, puerta, sala, padre, gigantesco don Manuel Pérez, mi carta.…”.

“Regreso, mi mujer, me premia con besos, yo la premio contándole lo que ví y sentí. Beso el suelo de mi segunda patria antes de ascender al avión. Mi patria me recibe. Pasada la noche y por teléfono, me despierta la Cuba que despedí ayer.
De la radio cubana preguntan ¿por qué?.

“lo hice por un ser humano, por un mártir, por un compañero combatiente, por todo el amor que me dio Cuba hasta ese día, por el tremendo respeto que tengo por esa Revolución de lozanos y palpitantes 34 años…( ) Por Maceo, por Martí, por Fidel , por Guillén, por Cuba, por mi mujer, mis cinco hijos, mis dos nietos, mis padres, por el pueblo argentino, por mi desaparecido amigo Héctor Rivera (asesinado por la dictadura de 1976), por todos los jineteros que rechacé en La Habana y a los que les expliqué en su momento que aunque me beneficiara 20 a 1, yo no cambiaba en mercado negro. Por ese hombre que vive en vuestros hogares y vuestros corazones, Ernesto Guevara de la Serna (argentino como yo)”.

En la carta 95 dirigida al holguinero Gustavo Torres Sierra, del reparto Pueblo Nuevo, escribe: “Ustedes, Gustavo, son para mí y muchos argentinos la última luz en esta noche que vive el mundo. Admiramos lo que hacen. Yo pude comprobar personalmente quienes son. Te envío un pequeño, pero muy querido regalo, es una postal legítima de la familia de Ernesto Guevara”.

Tres meses más tarde, Eladio se dirige nuevamente a los cubanos, para confesar que: “María (argentina) llevó las primeras 91 cartas a Cuba, primero pasó por Miami (burlamos el bloqueo desde el mismo Estados Unidos) y luego a Nassau (Bahamas) para llegar a Cuba la bella. Pasamos días de ansiedad, hasta que comenzaron a llegar vuestras respuestas. ¡Cuánta alegría y emoción, cuántas lágrimas..!

“Ayer marché por las calles de mi Buenos Aires, con otros padres, madres y cientos de alumnos, en protesta por la privatización de la educación. Nuestras Aerolíneas Argentinas fueron malvendidas.


NOS CORTARON LAS ALAS, mi estómago se anuda cuando veo en TV a los jubilados llorando, gritando y manifestando…. Ahora se burlan de ellos y les dan 140 pesos mensuales, un remedio simple en una farmacia cuesta 12 pesos, así que nos avergonzamos como argentinos , se está maltratando a la vejez y se le quita el estudio a la juventud”.

“Desde Holguín recibí un casete de Radio Angulo, con el programa radial de Martín Arranz, en el que cuentan mi experiencia, y menciona nombres y domicilios de los que me escribieron, fue hermoso oir las voces de los holguineros que me escribieron. “La noche de mi partida, en el aeropuerto, escribí esto:
PARTIDA

Boyeros te alegra,
Cuando al José Martí llegas
Más, si del glorioso suelo cubano despegas
Una nostalgia de izquierdas, tu alma sujeta
Y la exprime , hasta que por tus ojos viertes
Salada lluvia que fertiliza, la serena tierra de Maceo.

ME ABRAZO CON TODOS Y CADA UNO DE USTEDES INTERMINABLEMENTE. ¡¡ LOS QUIERO MUCHO !!
Eladio González - Toto

Tras la carta que dirigiera a Gustavo Torres, reza un manuscrito de Irene: “Soy Irene, mujer de Toto. Te mando, hermano mío, un beso tan grande que abarque todo el “lagarto verde”; los amamos y lucharemos junto a ustedes siempre. ¡ Gracias por existir!
Como reciprocidad indirecta, la carta número 83, perteneciente al matancero Alejandro González, resume la admiración que El Toto despierta de un punto a otro de “Cuba, la linda”:

Gracias, amigo argentino
Por tu sangre generosa,
Que diste a Pérez Quintosa
En un gesto muy genuino.
De lo alto del Turquino
Y nuestro verdoso llano,
Te envía el pueblo cubano
El saludo más sincero
Con una rosa de enero
Y un fuerte apretón de mano.
Alejandro González (Matanzas)

Capítulo del libro de Livingston dedicado a Eladio
LAS CARTAS DEL TOTO


Nos esperan tiempos difíciles, amar es urgente. Miguel Abuelo

Yo no tendría savia en las raíces, las ramas y el árbol de mi vida para vivir, me motiva lo que me rodea. Lo que oyen mis oídos, analizan mis pensamientos y siente mi corazón. Esa es mi tierra, mi agua y mi sol. El lunes 17 a la misma hora que enterraban a Pérez Quintosa, enterraban a mi padre. Ese viejo fue ejemplo de dedicación y sacrificio por la Revolución, pues a pesar de que le había dado una trombosis en 1982, continuó como presidente del C.D.R.(comité defensa de la revolución) hasta el mismo día de su muerte. Nos pidió que su última voluntad era que le pusiéramos la bandera cubana sobre su cadáver y sus medallas de reconocimiento. Yo vivo orgulloso de mi viejo, pues su llama eterna de sabiduría, vive siempre en mí.
Jorge González Rodríguez - Regla – La Habana carta 78-135

Explicación de la apariencia de éste artículo periodístico:

Es una página completa (derecha) papel blanco, letras negras y título en letras blancas sobre fondo rojo, recuadro con linea gruesa roja. Incluye 4 fotografías.
Fotos: grupo y foto familiar que nos tomamos en Cienfuegos. Irene,
Demián, Manuel y Toto sobre una embarcación en movimiento, atrás el mar caribe.
Foto 2: sección aumentada de el busto de Toto
Foto 3: sobre una mesa entremezcladas 4 listados de cubanos y argentinos corresponsales.
Foto 4: (texto) Postal genuina perteneciente a la familia Guevara. (esta postal se la envié como obsequio a Gustavo Torres)

En la parte posterior de esta página hay un artículo de Reynaldo López PENTAGRAMA (sobre arte).
Otro de OYE AMIGA columna de Marlene González.
Otro de CLUB DE LA CANCION con una letra de Guadalupe Oyarzabal Tamargo mexicana subdirectora de turismo que visitó Holguín y dejó ese mensaje agradecido sobre una versión de La Lupe.
Otro: humor gráfico un chiste de Albeu, donde se ve una pareja y un burro con parrilla para acompañante de bicicleta.
Otro: el clásico crucigrama

Che Guevara, Roque Dalton su poesía,


El Ché Jesucristo fue hecho prisionero

después de concluir su sermón en la montaña

(con fondo de tableteo de ametralladoras)

por rangers bolivianos y judíos comandados

por jefes yankees-romanos.


Lo condenaron los escribas y fariseos

revisionistas cuyo portavoz fue Caifás Monje

mientras Poncio Barrientos trataba de lavarse las manos

hablando en inglés militar

sobre las espaldas del pueblo

que mascaba hojas de coca

sin siquiera tener la alternativa de un Barrabás

(Judas Iscariote fue de los que desertaron de la guerrilla

y enseñaron el camino a los rangers)


Después le colocaron a Cristo Guevara

una corona de espinas y una túnica de loco

y le colgaron un rótulo del pescuezo en son de burla

INRI: Instigador Natural de la Rebelión de los Infelices


Luego lo hicieron cargar su cruz encima de su asma

y lo crucificaron con ráfagas de M-2

y le cortaron la cabeza y las manos

y quemaron todo lo demás para que la ceniza

desapareciera con el viento


En vista de lo cual no le ha quedado al Ché

otro caminoque el de resucitar

y quedarse a la izquierda de los hombres

exigiéndoles que apresuren el paso

por los siglos de los siglosAmén.


Roque Dalton

tortura, secuestro, desaparición, asesinato,ESMA, Héctor Febres repartidor de bebés argentinos, Bu



MIÉRCOLES 12 de diciembre de 2007
"Febres murió impune"

A tres días de conocerse la sentencia al ex prefecto Héctor Antonio Febres, éste fue encontrado muerto en la sede de Prefectura donde estaba detenido. La jueza interviniente en la causa la caratuló como muerte dudosa.


Las querellas y la misma familia de Febres pidieron un peritaje. "Febres tenía conocimiento del reparto de los bebés que habían nacido dentro de la Escuela de Mecánica de la Armada.


Ese fue un secreto que se llevó con él", remarcó Carlos Lordkipanidse, integrante de la Asociación de Ex Detenidos Desaparecidos (AEDD).
Por ANRed - Sur

Otro represor más que cosecha impunidad. Otro represor más que no dice todo lo que sabe acerca del exterminio sistemático que se llevo a cabo durante la última dictadura.


Esa fue la sensación que embargó todo al conocerse la noticia de que el ex prefecto Héctor Antonio Febres había muerto en la celda de la base de Prefectura del Tigre, donde era custodiado por sus camaradas. En cuatro días se conocería su sentencia en el juicio que se estaba llevando por sólo cuatro crímenes cometidos en la Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA). También, ese día diría sus últimas palabras. Pero no lo hizo. De nuevo, el muro de silencio.
En una conferencia de prensa convocada en el hotel Bauen, los integrantes del colectivo Justicia YA!señalaron su desconfianza frente a la versión oficial de la muerte del represor, la misma sospecha que parece corroer a la jueza Sandra Arroyo Salgado, quien caratuló el caso como muerte dudosa. "En el momento en que nosotros nos estábamos presentando en el Juzgado de San Isidro para pedir el médico forense, se estaba presentando también la familia de Febres. Y esto nos resulta algo sospechoso: que la propia familia esté pidiendo un perito para ver la razón por la cual este genocida se murió", remarcó la ex detenida-desaparecida Andrea Bello. Tal como comentaron integrantes de justicia YA! a ANRed la autopsia se realizará mañana, en la que participará un perito en representación de las organizaciones de Derechos Humanos.
Por su parte, Carlos Lordkipanidse, querellante en la causa contra Febres sostuvo: "Si yo interpreto la muerte de Febres como un mensaje, tengo que interpretarla como un mensaje mafioso.


La noche anterior Febres se puso en contacto con su familia y dijo que gozaba de buena salud. Y, de golpe, al día siguiente aparece muerto. Hay registros gráficos que permiten demostrar tal situación. Nada indicaba que Febres fuera a sufrir un ataque que no le permitiera asistir el día de la sentencia".
Las dudas sobre el fallecimiento del represor se mezclan con las certezas de que las condiciones de detención distan de ser las que la querella exigió al comienzo del juicio.


"Porque, a pesar de que en la Argentina se habla que van a ir presos todos los represores, solamente hay unos 200 imputados en las causas que están detenidos. Y los pocos que no están en su domicilio, están en esas condiciones de absoluto privilegio.


Febres bajaba libremente a desayunar hasta las 10.30 de la mañana, como si estuviera en un hotel.


Cuando llegó al juicio oral, lo hizo libremente, sin esposas, con dos prefectos más con los que se paseaba por la sala hasta que se decidía sentarse. Llamaba por teléfono a la noche a su familia", enumeró las irregularidades la abogada Myriam Bregman.
Como ha quedado probado en las audiencias del juicio que se llevaron adelante desde mediados de octubre en los tribunales de Comodoro Py, Febres manejaba gran cantidad de información.


Sobrevivientes de la ESMA lo han señalado como el responsable del sótano, donde estaban las salas de torturas, y de las embarazadas. "Febres tenía conocimiento del reparto de los bebés que habían nacido dentro de la Escuela de Mecánica de la Armada.


Ese fue un secreto que se llevó con él", remarcó Lordkipanidse. O sea, el represor conocía las identidades de los menores apropiados y quiénes son sus apropiadores.

Además, por el descargo que había hecho al inicio del juicio, se esperaba que Febres diera más precisiones sobre el accionar de la maquinaria represiva de la ESMA.


"Este viernes Febres tenía acceso a poder declarar esto ante el Tribunal. Se supone que en algún momento iba a decir su verdad", agregó Lordkipanidse.
Lo que Febres calló contribuye a crear más impunidad. Este es otro caso al que la Justicia llega tarde, aún por días.


Pero frente a esa impunidad que parece no tener límites, se erige una resistencia más fuerte aún.


Como sostuvo Andrea Bello: "Ningún mensaje va a hacer que nosotros nos determine a abandonar esta lucha. Hace 30 años que estamos en ella y vamos a seguir reclamando por verdad, por justicia por todos nuestros compañeros desaparecidos".
El juicio
Febres estaba siendo enjuiciado sólo por cuatro casos de tormentos cometidos dentro de la ESMA. Sólo cuatro habían sido los casos que habían sido elevados a juicio, una suma demasiado pequeña para un campo de concentración por el que pasaron más de cinco mil detenidos-desaparecidos.
Por este juicio, desfilaron más de cincuenta testigos que volvieron a relatar una vez más su cautiverio en el centro clandestino de detención. Los sobrevivientes volvieron a ser víctimas. Pero todo lo que narraron no servirá para nada.


"Ahora se demuestra que todo el esfuerzo de estos meses en este juicio oral, con la muerte de Febres todas las declaraciones de los testigos se tiran a la basura y hay que empezar nuevamente de cero.


Porque todo lo que se hizo no va a ser utilizado para el resto de las causas", se indignó Bregman.

"Si todos los denunciados en la causa ESMA hubieran ido al mismo juicio que tendría que haber sido éste, el hecho de que hubiera fallecido uno-como ha ocurrido en otras causas, no habría detenido el curso de la justicia", apuntó Lordkipanidse.


Además, agregó: "A cuatro años de la anulación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, no tenemos a ningún marino, ningún integrante del Ejército ni ninguno de la Fuerza Aérea condenado". Bregman sentenció: "Cuando decíamos al inicio de este juicio que era más impunidad, ahora se demuestra".
¿Quién era Febres?
El prefecto Héctor Febres actuó desde principios de 1977 hasta diciembre de 1981 como enlace de la Prefectura Naval Argentina con la Armada, dejando en evidencia los lazos más que "fraternales" que unían a estas fuerzas.


Fue parte del elenco represivo permanente de la Escuela de Mecánica. O, como lo definió el sobreviviente Carlos García, un "torturador estable".
En declaraciones ante la Justicia los sobrevivientes de ese campo de concentración, Rosario Quiroga y Enrique Fukman precisaron, también, que Febres se desempeñó dentro del área de inteligencia del grupo de tareas.
"Febres tenía dos apodos. Por un lado, le decían "Gordo Daniel". Por otro, el "Gordo Selva" porque era todos los animales juntos", relató Carlos Lordkipanidse (AEDD).


Los represores que funcionaron en la Escuela de Mecánica usaban nombres de guerra de animales. Alfredo Astíz era el "Cuervo"; Jorge Acosta era el "Tigre"; Rubén Chamorro era el "Delfín" y Febres era "Selva". Lordkipanidse reconoció:


"Era una descripción perfecta porque era una bestia desatada".
Asimismo el querellante agregó: "Febres era el responsable del sector 4, donde estaban todos los cuartos de interrogatorios". Aunque la participación del prefecto en el plan criminal no concluía en eso.


También, era el encargado de la "Sardá de Chamorro", la maternidad clandestina que funcionaba en la ESMA y adonde eran trasladadas detenidas de otros campos de concentración a dar a luz.


Como declaró hace tiempo Sara solarz de Osatinsky, el "Gordo Selva" era quien retiraba a los chicos de la ESMA, a quienes les traía ajuares de lujo.


Por ende, no queda duda de que Febres - tal como lo sostuvo la ex detenida- sabía dónde están los hijos robados a los desaparecidos.

Aún así, Febres llegó a juicio y no lo hizo por su responsabilidad en la sustracción de menores.


Estaba siendo enjuiciado por cuatro casos de tormentos contra Carlos Gregorio Lordkipanidse, Alfredo Margari, Carlos García y Josefa Prada de Oliveri.

Febres no sólo fue elevado a juicio en condiciones muy beneficiosas para él sino que también sigue gozando de privilegios.


Como informó la abogada Myriam Bregman: "Está detenido en la Prefectura. O sea, está detenido con sus compañeros de armas".


Pero en el día de los Derechos Humanos, "Febres murió impune", tal como señaló Carlos Lordkipanidse.

Estreno en La Habana, documental Estela Bravo, niños secuestrados, dictadura argentina, Coral premio cine


Estela Bravo estrenará en Cuba su documental ¿ Quién soy yo ?


La Habana, 6 dic (PL) La documentalista estadounidense Estela Bravo presentará hoy en el festival de cine habanero un documental sobre la búsqueda de los niños secuestrados durante la dictadura militar argentina de 1976 a 1983.


La obra se titula ¿Quién soy yo? y es una continuidad de Missing children (Niños desaparecidos de Argentina), que rodó en 1984.


Bravo explicó a Prensa Latina que el filme muestra a cuatro de los 500 niños entregados a amigos de militares que torturaron y asesinaron a sus padres, encontrados por las abuelas de la Plaza de Mayo.


Son procesos traumáticos, difíciles de asimilar, ser criado por aquellos que mataron a sus familiares, dijo. La documentalista afirmó que este fue uno de sus proyectos más complejos por las historias de sus protagonistas.


La última de las 88 personas encontradas hasta la fecha se llama Belén, de 29 años, quien creció con una familia adoptiva, y aparece en el filme.


¿Quién soy yo? es uno de los 27 documentales que concursan por un Coral en la muestra-certamen, que concluirá el próximo día 14.

difunden: el 1er. Museo Histórico Suramericano "Ernesto Che Guevara", la Escuela de Solidaridad con Cuba "Chaubloqueo" y el Centro de Registro de Donantes Voluntarios de Células MadreIrene Perpiñal y Eladio González - directores calle Rojas 129 local (Caballito) Capital -AAC1405-Buenos Aires-República Argentina telefax: 4-903-3285 email: museocheguevara@fibertel.com.arhttp://museocheguevaraargentina.blogspot.com/colectivos 1 - 2 - 25 - 26 - 32 - 42 - 53 - 55 - 85 - 86 - 103 - 180doná sangre, doná órganos, doná células madre, sé solidario, SÉ VOS.¡Salven a los argentinos! "las ballenas"