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Prof. Dr. Hugo Moreno Peralta
Casilla 8129, Viña del Mar 2, Chile.
GENOCIDIO DEL PUEBLO MAPUCHE
CELEBRACION DEL BICENTENARIO DE "LA INDEPENDENCIA DE LA NACION CHILENSIS-PINOCHETISTA/CONCERTACIONISTA".
La fundación Cesal eV, Berlín, Alemania, ha denunciado nuevamente ante el Consejo de los Derechos Humanos de Naciones Unidas, el Gobierno Alemán, Organización Mundial contra la Tortura en Ginebra, y la opinión pública internacional el genocidio del Pueblo Mapuche y la amenazas de muerte, para un distinguido jurista, director de la Asociación Americana de Juristas, rama Valparaíso-Aconcagua, Chile, pidiendo apoyen el nombramiento de dos comisiones investigadoras sobre estas denuncias. Los espíritus de Lautaro, de Guacolda, del Presidente Allende de Gabriela Mistral, de Pablo Neruda, de Violeta Parra, etc. no descansaran en paz mientras la plutocracia Pinochetista y sus epigonos concertacionistas –a través de su maldita ley anti-terrorista, complementada con "la mano dura" de la dictadura de marras-, sigan asesinado a los hijos del Pueblo Mapuche. En la lucha colectiva por la tierra que nos vio nacer, por su soberanía, por la identidad, por la cultura, por la dignidad, por nuestra raíz etnologica, en resumen por la verdadera independencia política y económica y el progreso integral de nuestro país -sin odiosas marginaciones-, como nos señalara el querido presidente Dr. Salvador Allende Gossens, "cada ciudadano, cada intelectual tiene su función especifica". Los escritores, los poetas, los filósofos, los profesores, carecemos de instrumentos, para cambiar las estructuras económicas, la hegenomia tecnócrata y la militarización del poder impuestas por el odioso capitalismo salvaje globalizado/Globalización del capital que impone el imperialismo yanqui, pero nuestra contribución puede ser útil, en dos campos:
a) El político, por lealtad activa hacia los intereses de nuestro Pueblo y de nuestra raíz etnológica, hoy la lealtad activa, incondicional y sumisa de los administradores concertacionistas es hacia el capitalismo foráneo y el 10% de la burguesía parasita, los ricos. La critica inteligente contra el brutal e inhumano orden de explotación y semicoloniaje impuesto por el imperialismo y acatado a raja tabla por la plutocracia chilena y sus epigonos concertacionistas, el esclarecimiento de la verdad de los sucedido a partir del golpe de Estado de 11 de Septiembre de 1973, con el magnicidio del Presidente Constitucional Dr. Salvador Allende Gossens, los miles de asesinados y desaparecidos, los torturados y el saqueo de los bienes del Estado por parte de la dictadura militar de marras y el ejercicio de la libertad plena en general y de expresión en particular –juicio y condena, para Agustín Dunny Edwards, sus aliados y sus epigonos y fin del oprovioso/deshonroso, reinado del oráculo mercurial-, sin reuhir a riesgos personales, sin pragmatismos ni conciliaciones de los individuos oportunistas que sólo buscan echar agua para sus molinos usando el nombre del pueblo.
b) El cultural, aportando nuevas visiones en la relación de la persona y el mundo a la literatura universal, defendiendo el legado cultural de sus creadores manuales e intelectuales que pertenece a un pueblo y no a una mengua de mangantes satisfechos que han hecho de la educación y la cultura un negocio. Lucha por una educación, a todo los niveles financiada y bajo el control del Estado. Cuidar nuestra lengua y la de la raíz etnologica como instrumentos supremos de comunicación directa y de afirmación de identidad frente a la dominación extranjera. Parafraseando al Prof. Hegel: "no se tiene un país grande/ desarrollado ni un gran país cuando su destino se define en otras partes".
La brutal represión, la tortura y asesinato de los hijos del heroico y digno Pueblo Mapuche, tiene un solo objetivo, para la plutocracia chilensis, hacerlo desaparecer, y así, los empresarios forestales/los nuevos terratenientes se quitarían de encima "esta desagradable molestia", que les impide llevar a cabo jugosos negociados con empresas multinacionales extranjeras y nacionales en el marco de la destrucción del entorno ecológico: Tala indiscriminada de selvas vírgenes, la flora y la fauna, contaminación de ríos y lagos, etc.
La nueva etapa del genocidio denunciado fue planeado por el oráculo mercurial de Agustín Dunny Edwards y su Paz Ciudadana, junto con el fascista Ricardo Mega Claro, y el inefable Juan Agustín Figueroa Yavar. Los tres son destacados asesores en asuntos económicos y culturales de los diferentes regimenes concertacionistas.
La oligarquía/burguesía chilensis siempre se ha identificado con el colonialista europeo, ella ha aclarado siempre que nada la une y todo la separa, "de los indios araucanos". A través de la historia han tratado de transformar en peones del campo, sin tierra, a los hijos del Pueblo Mapuche. En 1882, inventó "la pacificación de la Araucanía", en el marco de ella se asesinó a los hijos del Pueblo Mapuche y se les robó sus tierras, para entregársela a bajos precios a los colonos extranjeros. Como estos no eran agricultores se diseminaron por el territorio y los burgueses chilenos, peritos/ avezados en el pillaje, timo, peculado y depredación se apropiaron de las tierras abandonadas por los colonos extranjeros y dieron vida a una casta de terratenientes oligarcas. Como los ricos siempre quieren tener más los hijos y los nietos de estos oligarcas, siguieron sus fechorías contra los Mapuches, corriendo las alambradas, incendiando las chozas y asesinando a los hijos del Pueblo de Lautaro, con el beneplácito de los regimenes y jueces reaccionarios de aquel entonces.
El modelo de sociedad Pinochetista, la plutocracia y sus epígonos que administra la Concertación tiene como base la mentira generalizada. Es hipócrita –la hipocresía es un homenaje que le rinde el vicio a la virtud-, porque se prepara, para celebrar con boato, fastuosidad y derroche el bicentenario insólito e inverosímil de la Independencia de su país del imperio español, del cual, sus antepasados jamás pensaron separarse, con un broche racista: el ansiado genocidio del Pueblo Mapuche. Todo esto es una locura: La ocupación y el despojo de su tierra al Pueblo de Lautaro, sus legítimos dueños. Las torturas, desapariciones, asesinatos, encarcelamientos a los hijos del Pueblo Mapuche, dura ya siglos. Basta ya, de declaraciones, de lamentos, de comisiones ad hoc, para que siga la matanza de indígenas Mapuches. No hay un ser humano que pueda tolerar la forma inhumana con que el régimen de la Concertación y el Poder Judicial, a través del aparato represivo policial aplican "la mano dura", heredada de la dictadura de marras a los Mapuches.
La clase política desvergonzada e inmoral se ha dado una ley antiterrorista, para combatir a raja tabla a los dueños de la tierra, el Pueblo Mapuche. Este heroico Pueblo, jamás permitió que su tierra fuera invadida y sometida por extranjeros. Después de más de 300 años de lucha derrotó finalmente al colonialista español, hasta que llegó la cacareada república oligárquica con la libertad, la democracia y la justicia en la medida de lo posible. La historia denuncia con claridad meridiana que la burguesía chilensis, no ha cesado un día en la entrega de las riquezas básicas y de la soberanía nacional al capital extranjero: ¿Quiénes, son entonces los verdaderos patriotas defensores Chile de Lautaro, O'higgins, Manuel Rodríguez, Gabriela Mistral, Presidente Allende, Pablo Neruda, etc.?.
La jerarquía de la Iglesia Católica, como en tiempo de la dictadura terrorista de marras se lamenta por los asesinatos de los hijos del Pueblo Mapuche, los intelectuales neutrales y apolíticos –políticos, escritores, periodistas, poetas, filósofos, etc.-, que les ha dado lo mismo servir sumisamente al dictador de marras y más tarde a los regimenes de la Concertación por algunos dólares más, emiten declaraciones aclaratorias que lo oscurecen todo. Terminemos ya con tanta mentira y cobardía: El Pueblo Mapuche, son las víctimas y el Estado –supuestamente de Derecho "en el contexto de la Constitución Pinochetista y sus amarres"-, los victimarios. El modelo de sociedad impuesto por la dictadura de marras al Pueblo Chileno tiene como base acentúo la mentira generalizada. Es corrupta y en ella reina la impunidad. Sus dueños, la plutocracia y sus administradores concertacionistas no se atreven a mirar a los ojos a la verdad, de sus propios actos. Es una sociedad como consecuencia moralmente enferma que desesperadamente espera encontrar su curación en el genocidio del Pueblo Mapuche. Al igual que ayer la oligarquía y sus regimenes reaccionarios –con su pacificación de los indios Araucanos, así les moteja a la raíz etnologica del Pueblo Chileno, el Pueblo Mapuche-, hoy la plutocracia Pinochetista y sus administradores los regimenes Concertacionistas tampoco entienden, porque no tienen la capacidad, la inteligencia, que la lucha del noble, consecuente y querido Pueblo Mapuche por sus tierras y sus tradiciones pasa por algo sagrado para ellos, su lucha, porque es la única manera de vivir dignamente.
Junto con exigir –los derechos se exigen-, al Consejo de los Derechos Humanos de Naciones Unidas, y a la Organización Mundial contra la Tortura el nombramiento de sendas comisiones investigadoras, para que, en la tierra de los Mapuches se investiguen nuestras denuncias contra los hijos del Pueblo de Lautaro, se adjunta la entrevista al poeta Mapuche Jaime Huenun, que realizó el destacado periodista Mexicano Mario Casasus, defensor de los Pueblos indígenas y su cultura de la Patria Continente del Libertador Simón Bolívar, Latinoamérica.
Prof. Dr. Hugo Moreno Peralta
Director
Cesal eV Berlín-Alemania
