Julio Antonio Mella (Pedagogía Revolucionaria)
Fundador de la Universidad Popular "José Martí"
(3 de noviembre 1923)
Por Adys Cupull y Froilán González
“…fue como Martí, un caso sorprendente de superación de lo nuestro,…”1 Así afirmó el doctor Juan Marinello quien lo conoció, fue compañero y defensor de sus ideales. Estuvo junto a su lado durante la trascendente huelga de hambre que realizó en 1925 y al frente de la Comisión que exhumó sus restos, trasladó las cenizas de México a Cuba, y las custodió, durante más de dos décadas.
A través de encuentros directos con los revolucionarios que lo conocieron en México, y otros que no compartían sus ideas pero lo admiraban por sus virtudes, entrevistas a familiares allegados, a estudiosos de su vida, y haber buscado en los documentos de diferentes archivos públicos y privados, de Cuba, México, Italia, Moscú, apreciamos las acciones y elementos que nos llevan al convencimiento de la opinión expresada por el doctor Alfonso Bernal del Riesgo, su amigo y compañero de luchas, la cual reafirmamos, y coincidimos en que no se debe escribir la Historia de La Pedagogía Revolucionaria Cubana sin el aporte que hizo Julio Antonio Mella en su corto tiempo de vida, en el que nos dejó el legado de su magisterio martiano, teórico y práctico, donde observamos ideas pedagógicas y sobre la educación relacionadas con el pensamiento de José Martí, que Mella comenzó a llevar a la práctica, ajustadas a su tiempo, a la realidad social de Cuba, y que el gobierno sometido a los intereses de Estados Unidos le impidió culminar, con su asesinato.
No hay separación en el magisterio revolucionario y el educador social. Coincide con Martí, cuando afirma que se es educador en el aula y fuera de ella. El Apóstol dice:. “Edúquese en el hábito de la investigación, en el roce de los hombres y en el ejercicio constante de la palabra, a los ciudadanos de una república que vendrá a tierra cuando falten a sus hijos esas virtudes”. . 2
Mella publicó en 1924, un artículo donde señala las diferencias entre maestro y profesor, y anotó que el educador es el faro luminoso que señala la ruta a la juventud en el aula, y fuera de ella. Es aquel que no se olvida nunca. Es aquel que nos enseñó junto con la Ciencia en la Universidad, la verdad en la vida. 3). Se extiende en las cualidades que debe tener el maestro, y que remitimos al capítulo sobre el tema tratado en la Biografía.
La Pedagogía Revolucionaria de Julio Antonio Mella.
Entre sus maestros, se encuentran eminentes y fervorosos martianos, entre ellos admiraba a Enrique José Varona, Eusebio Hernández, Evelio Rodríguez Lendián y Carlos Baliño. Admiró commo educador a quien fue en su tiempo, un maestro de la clase obrera: Alfredo López.
A través de los documentos del Directorio de la Federación, se analiza que el accionar de Julio Antonio Mella como educador, ocurre desde antes de la fundación de la Universidad Popular José Martí, y antes de la Fundación del Instituto Politécnico Ariel.
En 1923, antes del Primer Congreso, en el mismo artículo La Función Social de la Universidad se anunció la creación en el Alto Centro de una Comisión de Instrucción Pública que organizaría escuelas nocturnas de la enseñanza elemental para adultos, clases de las Ciencias Sociales y de todas las materias que comprende la Segunda Enseñanza. Y por último, series de conferencias dadas por los elementos más autorizados del país sobre todas las ramas del saber humano.
Fundador de los grupos Renovación y Ariel
¿Qué fueron los grupos Renovación y Ariel cuyos objetivos eran profundizar en el estudio de la teoría del Marxismo y los ideales martianos? En la fundación de estos grupos se encuentra la creación de un nuevo método con incentivo didáctico para los estudios políticos. Solamente el nombre motiva ir al estudio para saber quién o qué era Ariel, y que es lo nuevo que debemos conocer.
En 1923, como respuesta a la clausura de la Universidad, la FEU proclamó La Universidad Libre, en la que Mella fue nombrado Rector Interino, función que desempeñó durante dos días.
La FEU con Mella al frente ha respondió con una fundación revolucionaria y pedagógica, porque tenía estructurada las aulas, los temas, los profesores, una forma emergente para no declarar cerrada la Universidad.
Al leer las bases de la Convocatoria, los acuerdos tomados, y la Declaración de los Derechos y Deberes del Primer Congreso Nacional de Estudiantes se destacan los elementos expuestos sobre Educación. Ahí se encuantran los fundamentos teóricos de la Pedagogía Revolucionaria de Mella.
Ellos enmarcan a la juventud universitaria cubana de los años de 1920, dentro de la avanzada del pensamiento renovador revolucionario, internacionalista, unificador, y defensor de la Independencia de los pueblos y la Justicia Social, fue un Congreso martiano, donde se incorporó en los acuerdos y propuestas la presencia en el mundo de las ideas progresistas que trajo el triunfo de la Revolución de Octubre en Rusia.
El Deber número 1. de la Declaración de Derechos y Deberes, dice: El Estudiante tiene el deber de divulgar sus conocimientos entre la Sociedad, principalmente entre el proletariado manual, por ser este el elemento más afín del proletariado intelectual, debiendo así hermanarse los hombres de Trabajo, para fomentar una nueva sociedad, libre de parásitos y tiranos, donde nadie viva sino en virtud del propio esfuerzo. 4
Julio Antonio Mella fue el creador de una Universidad especial, se destacó como organizador y profesor de la Universidad Popular José Martí, que ramificó por casi toda la Nación.
Los Estatutos de la Universidad Popular José Martí, creada el 3 de noviembre de 1923, constituyen la estructura estudiada y planificada docentemente para el buen funcionamiento del Alto Centro Docente, contempla los diferentes niveles de los educandos, declarados en secciones.
El estatuto número 8, especifica que los alumnos tienen los mismos deberes y derechos de la clase estudiantil declarados por el Primer Congreso Nacional de Estudiantes de Cuba.
Alrededor de esta fecha, Mella había matriculado, Derecho y Pedagogía en la Universidad de La Habana. Solicitud que adjuntamos. Y luego en 1926, en la Universidad de México realiza la misma solicitud de matrícula:. Derecho y Pedagogía, esta última es una de las Ciencias que le inspira, cuyos estudios fueron truncados por su asesinato en México, ciudad donde contribuye también a la Revolución educativa, desarró "Cursos para Corresponsales", en beneficio de la clase obrera, y apoyó a instituciones que se crearon para la superación obrera.
Fundó órganos de prensa para la juventud estudiosa y revolucionaria como “El Tren Blindado”. El Dr. Carlos Zapata Vela, condiscípulo de Mella en la Universidad de México, donde existía una Facultad para estudiantes trabajadores, afirmó que Mella era el máximo orientador y su palabra siempre se escuchaba con respeto en el alumnado. El Director de la Escuela Secundaria Nocturna para Trabajadores, José de los Reyes, afirmó que Julio Antonio Mella colaboró indirectamente en el mantenimiento de esta escuela, fundada en 1926, cuyo lema era “La misma oportunidad para todos”.5
¿Por qué Julio Antonio Mella enfatiza en la Función Social de la Universidad?
En febrero de 1923, después de la depuración de profesores, en un artículo de opinión publicado en Alma Máter insiste en que aún queda algo por hacer algo grandioso que está en la mente de todos “…esto es, la verdadera función de la Universidad en la sociedad. Dice que no debe ni puede ser El Más Alto Centro de Cultura una simple fábrica de títulos, Llama la atención que la llama el más alto centro de cultura, concibe la Universidad como el más importante sitio, generador y fragua de la verdadera cultura, el sitio desde donde las ramas del saber señalan el progreso de la Nación. Y explica que no puede ser una fábrica de títulos, donde los jóvenes van a buscar tan sólo el medio de ganarse la vida. Debe influir de manera directa en la vida social. Por medio de sus profesores, arrancar los misterios de la Ciencia y exponerlos al conocimiento de los humanos. 6
En 1924 fue creada la Confederación de Estudiantes de Cuba, presidida por Julio Antonio Mella que agrupó a universitarios, bachilleres y alumnos de escuelas normales en su declaración se declaraba enemiga del capitalismo y reconocía a Mella como presidente de todos los escolares de la Nación. Se cumplió otro acuerdo del Primer Congreso Revolucionario de Estudiantes. De acuerdo con la Declaración de Derechos la Confederación de Estudiantes de Cuba lucharía “en el orden educacional”. Así lo precisa por obtener la independencia absoluta de las instituciones de enseñanzas y señala que en el orden social laborará por la elevación cultural. Considera que únicamente por el dominio de la cultura podrán emanciparse los hombres.
Mella se dio cuenta que para hacer una verdadera Reforma Universitaria era necesaria la Revolución Social. Escribió “La Revolución Universitaria es parte de una gran cuestión Social, por esta causa, hasta que la gran cuestión social no quede completamente resuelta no podrá haber nueva Universidad”7)
Vigencia de Julio Antonio Mella en la Pedagogía Revolucionaria de Cuba.
No es de extrañar que el ideario de los grandes maestros, insignes patriotas como fueron, Félix Varela, José de la Luz y Caballero, José Martí, Enrique José Varona, entre otros, fueran estudiados por Julio Antonio Mella, quien aportó el propósito de llevarlo a la práctica, sobre todo el ideario martiano, junto elementos de las ideas progresistas de su tiempo: el marxismo leninismo.
Es él quien traslada la esencia del pensamiento martiano y marxista leninista como enlace a la nueva generación de cubanos guiados por Fidel que pudo hacer realidad lo que José Martí pensó y escribió, y lo que Julio Antonio Mella comenzó a llevar a la práctica y no pudo ver convertido en realidad.
No fue posible en su tiempo la Reforma Universitaria como deseaba. Reiteramos que Julio Antonio Mella dejó escrito que sólo con una Revolución Social sería posible realizar las transformaciones en la sociedad y en la Universidad.
La Universidad Popular José Martí duró menos de cuatro años, no hubo más atención educacional a las masas, se incrementó en Cuba el analfabetismo en las clases desposeídas, los hijos de obreros y campesinos no tuvieron acceso a la Universidad que siguió siendo elitista y exclusiva.
Fue a partir del triunfo de la Revolución Cubana (1959) cuando comenzó a desarrollarse el Programa del Moncada,, comenzaron a hacerse realidad los sueños de Julio Antonio Mella.
Desde 1959, podemos afirmar que sus ideas redentoras y su Pedagogía fue enriquecida paulatinamente con la experiencia y el pensamiento creador de los Maestros revolucionarios actuales, quienes se basan en las nuevas situaciones y necesidades de la población cubana cuyo nivel de escolaridad es el más alto de América Latina.
Se gestó una Verdadera Revolución Pedagógica que declaró al pueblo cubano libre de analfabetismo, en 1961, y seguirá avanzanado por los caminos y desarrollo de las ciencias, artes y técnicas, aún con los obstáculos impuestos por el injusto y genocida bloqueo.
Si Julio Antonio Mella estuviera presente, felicitaría a la muchachada estudiantil, militar y trabajadora que ha desfilado saludando el 50 Aniversario de la Victoria del Socialismo, también por la solidaridad con los pueblos de América. Por el nivel de escolaridad alcanzado en las masas. Pero seguro que nos diría que falta perfeccionar y seguir creando nuevos incentivos para enfrentar los tiempos difíciles de la humanidad.
Él recordaría que la generación presente está viviendo lo que previó José Martí sobre los Estados Unidos, y que hoy en sus reflexiones, alerta nuestro Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz sobre el Imperialismo del Norte revuelto y brutal y sus aliados, quienes tratan de apoderarse de las riquezas naturales y el patrimonio de los pueblos del mundo con inimaginables invasiones armadas y acciones brutales que han dejado impagables pérdidas de vidas y cientos de miles de niños en total desamparo.
Nota:
El 10 de enero de 1997 en acto solemne en el Aula Magna, la Universidad de La Habana le confirió el título de DOCTOR HONORIS CAUSA EN CIENCIAS SOCIALES. Obra Honoris Causa del Dr. Arnaldo Rivero
Fuentes de las citas
1- Adys Cupull y Froilán González, Julio A. Mella , Biografía, Editora Abril 2010, p.10
2. José Martí T.13 P 188
3- Cupull y González Ob. Cit. P. 194
4- Idem. P. 66
5- Adys Cupull, Julio Antonio Mella en los mexicanos, El Caballito, México, 1983, p. 37
6- Cupull y González, Biografía, Ob. Cit. P. 60