Entrevista Minas, Viernes 24 de junio de 2011 arequita
Martín Sharples llegó a nuestra ciudad acompañado de la docente y sindicalista Myriam Orlando. Ambos de Avellaneda;
ambos fanáticos del Racing Club. Para acceder al valioso testimonio de Sharples, debemos agradecer la coordinación e
invitación de la Sra. Mary Villar y del colega y amigo Gorge Gómez, así como también la hospitalidad de Daniel Fernández,
ya que la charla transcurrió en “La Casa Encantada”.
A continuación, nuestra entrevista a Martín Sharples.
-¿Cómo se produjo tu relacionamiento con la lucha por los Derechos Humanos?
-Fue a través de un amigo, que era militante socialista. Empecé a interiorizarme en el tema. Hasta ese momento, yo tenía
todo dado vuelta en la cabeza, escuchaba las dos versiones, no tenía familiares desaparecidos, ni militantes, y quería saber
la verdad en torno al tema.
Soy de clase media y muchas veces escuché aquello de “por algo será”. Conocí a este luchador social, quien me motivó a
escuchar las dos versiones. Hice un “crack” en mi cabeza. Todos mis amigos estaban vinculados al MAS -Movimiento al
Socialismo-. Yo iba a las reuniones pero no lo integraba. Me contacté con la organización “Hijos” y empecé mi militancia
independiente. Como era deportista, quería vincular ambas actividades. Hay quienes ven con malos ojos relacionar la política
con el deporte, y sobre todo en la época en que era ferroviario, en pleno gobierno de Menem y su afán privatizador. Luché
contra las privatizaciones y me echaron del ferrocarril. Por eso digo que, en cierta manera, mi militancia se la debo a Menem.
Te tenías que poner en algún lado frente a tanta desigualdad...
-El tema Derechos Humanos, en Argentina, fue abordado con intensidad y seriedad durante el gobierno de Néstor Kirchner. ¿A
los anteriores no les interesó el tema?
-En mi caso puntual, tomé contacto con la historia de Miguel Sánchez, un corredor desaparecido. Clarín dedicó su contratapa
cuando se cumplieron 20 años de su desaparición.
Ese artículo salió publicado el 6 de enero de 1998, cuando vine a correr una San Fernando, en Maldonado.
Él corrió la San Fernando del ’78 y tres días después fue desaparecido. Al leer la nota, quedé plenamente identificado con ese
pibe. Yo venía habitualmente a las carreras pero nunca me habían hablado de él.
Empecé a investigar y el compañero que me formó políticamente era de Berazategui, el lugar donde Miguel fue “chupado”.
Pensamos que entre los corredores teníamos que hacer algo, hablamos con la familia y le propusimos nuestra idea de reivindicarlo
por su compromiso militante.
-Como deportista, mientras Argentina daba la vuelta olímpica en el Mundial del ’78, concomitantemente, la dictadura desaparecía gente…
-Esa historia se vio reflejada en el libro “Terror y la gloria”, donde se habla acerca de cómo la dictadura aprovechó el Mundial para tapar todos
los casos que estaban ocurriendo. A la historia de Miguel la leyó un periodista italiano que decidió hacer una actividad para recordarlo.
Yo, mientras tanto, trataba de hacer algo por mi lado, pero hablar de ese tema en la época de Menem no tenía ninguna repercusión. Hasta
que llegó la movida de Kirchner, la reapertura de la ESMA -Escuela de Mecánica de la Armada-, donde yo estuve. Al principio, los luchadores por
los Derechos Humanos pensamos que Kirchner podía ser un oportunista - hasta Hebe de Bonafini creyó lo mismo-.
A partir de ese momento, la historia de Miguel salió a la luz pública. Quise hacer “La carrera del vidriero”, a través de un sindicato, en Berazategui,
que el premio se llamaba Miguel Sánchez, pero el Intendente de esa localidad nunca quiso hacerlo. El Intendente era duhaldista y uno aprendió
en qué lugar cada uno estaba posicionado.
Cuando ocurrió lo de Cristina y la 125, yo pensé que esa medida, con la popularidad alcanzada a través de su esposo, la iba a perjudicar. Tuvo
a gran parte de los medios en contra, incluso a partidos de izquierda, cuando debían darle para adelante con todo.
Cristina tomó medidas revolucionarias dentro de un sistema capitalista. No lo había hecho ningún otro gobierno en la historia del país.
-Se suele plantear por algunos sectores que hablar de Derechos Humanos, de lo sucedido en la dictadura, es anacrónico, que hay que ocuparse
de los temas del hoy, sobre todo de la seguridad y, dentro de este tema, de la protección a la propiedad privada…
-A Hebe le decían por qué la Fundación “Madres de Plaza de Mayo” construía viviendas. La vivienda es parte fundamental de los Derechos
Humanos. También la criticaban por hablar de los ’70, de los desaparecidos. Es el mismo discurso, el de la derecha, buscar un punto sobre el
cual machacar y machacar para tratar de debilitar
DIALOGAMOS CON EL DEPORTISTA Y MILITANTE SOCIAL MARTÍN SHARPLES
La Argentina, sus contradicciones y
la lucha por los Derechos Humanos
En 1993, tras un
accidente, perdió la
pierna izquierda.
Deportista de alma, no
fue obstáculo para seguir
corriendo y pedaleando.
Al deporte le sumó su
compromiso militante en
defensa de los Derechos
Humanos. En bicicleta
realizó una travesía que
lo llevó a recorrer más de
2.500 kilómetros, entre
Bolivia y Argentina, en
recuerdo al Che Guevara y
en homenaje a los
desaparecidos durante la
dictadura militar
argentina y a los
combatientes de Malvinas.
arequita Minas, Viernes 24 de junio de 2011 Entrevista|5
movimiento y sacar beneficios
por ese lado.
-Y el control de la información,
de los medios de
comunicación, juega un rol
preponderante, se fija la
agenda a través de ellos…
-En Argentina, todos los
medios corporativos le pegan
al programa “6, 7, 8”. Dicen
que nadie lo ve pero todos
le pegan. Lanata, cuando
estaba en “Crítica”, le pegaba
a Papel Prensa y ahora
está con ellos. Dice “¿de qué
lado voy a estar? Del más
débil”. ¿Clarín el más débil?...
-A veces cuesta identificar
a la izquierda argentina.
¿Dónde está posicionada?
¿Cuáles son sus referentes?
¿El peronismo puede
ser tan amplio que cobije
también a la izquierda?
-Si, la gente no debe entender
nada, sobre todo
cómo en el peronismo pueden
coexistir personas de
extrema derecha, de centro y
de izquierda. Yo creo que
Perón era fascista, más allá
de tomar ideas del socialismo.
Eso lo dijo Ángel Cappa,
que la revolucionaria era Evita,
no Perón, y le cayeron con
todo. Incluso los mismos peronistas.
Hasta Alejandro Dolina
salió a criticarlo. Tienes
a un De Narváez que se reivindica
como peronista, a
Duhalde, a Scioli, todos quieren
reubicarse y no sé si eso
es bueno o es malo. Si gana
Cristina, en mi opinión, debe
volcarse mucho más a la izquierda.
Ella ha cuestionado
a las corporaciones, al sindicalismo
argentino, con todo
el poder que tiene. Ella fue
muy clara. Dijo “ni extorsión,
ni explotación” y dio a entender
que no la desvela presentarse
a la reelección. Los candidatos
de la oposición se
caen solos. Pasó con Fernando
“Pino” Solanas, que decía
que tenía cuadros políticos
muy bien formados. Otro tanto
pasó con Mauricio Macri.
Esa gente se bajó de la candidatura
porque sabía que
perdía con Cristina. Lo que le
dijo al gobierno inglés sobre
Las Malvinas fue impresionante,
y los cipayos de los
medios se alinearon para el
lado de los ingleses. Tengo
un amigo ex combatiente y
ellos están muy contentos
con este gobierno porque fue
el único que reivindicó a los
soldados. No al ejército, a los
soldados, que fueron las verdaderas
víctimas, las otras
víctimas de la dictadura. Estaban
los Astiz, los Menéndez…
Ellos sabían torturar a
militantes en la Argentina
pero no supieron ganar una
guerra. Astiz se rindió sin tirar
un solo tiro y mandándole
una carta a la Reina de Inglaterra.
Un traidor hijo de puta...
-¿Y después de Cristina
Fernández?
-Ese es el gran tema. Hay
que armar muy buenos cuadros.
Ya no está Néstor Kirchner
para sucederla. Está bueno
que exista esa necesidad
de formar gente joven. Macri,
políticamente es un desastre.
Yo puedo entender que en
una primera gestión, como
había sido Presidente de
Boca Juniors, se lo veía como
un empresario exitoso por algunos
sectores, algunos pensaban
que a Buenos Aires la
iba a dejar bárbara, máxime
teniendo pretensiones presidenciables.
Demostró que es
un inútil, incapaz de hacer
algo, porque lo que hizo, lo
hizo mal. En primera vuelta
va a ganar; en segunda vuelta,
pienso, gana Daniel Filmus.
-También está el caso de
Elisa Carrió y su transformación…
-Mucha gente la votó esperanzada.
Ha hecho análisis
poco menos que apocalípticos
y nada de lo que dijo terminó
pasando. Realizó infinidad
de denuncias y nunca
presentó una prueba fidedigna.
-¿Y Ricardo Alfonsín, el
candidato de los radicales?
-Se ha vinculado a De Narváez.
Escuché decir a los propios
radicales que por cada
voto que gane por De Narváez,
perderá diez de los radicales.
-Todas las desapariciones
son repudiables y condenables,
ocurran en dictadura
o en democracia
como sucedió con el testigo
Julio López. ¿Qué opinas
de este caso concreto?
-Comprueba que determinados
grupos siguen operando
en la Argentina. Dijeron
“este habló, mirá lo que hacemos.
No hablen más porque
les va a pasar lo mismo”.
Igualmente, la gente no tuvo
miedo y siguió denunciando.
-¿Qué evaluación realizas
de lo que está sucediendo
en la actualidad en
torno a “Madres de Plaza
de Mayo” y, concretamente,
al apoderado de la organización,
Pablo
Schoklender?
-Creo que fue un error de
Hebe darle ese poder. Si hay
una persona honesta, frente a
la cual uno puede estar a favor
o en contra de su metodología,
es Hebe. Mucha gente
que estaba en la organización
le dio señales de que
esto podía pasar. Ella quiso
recuperar a los hermanos
Schoklender, que a su modo,
fueron también víctimas de la
dictadura, porque su padre
estaba relacionado a la venta
de armas. Hebe lo sintió
como a un hijo más a Pablo
Schoklender. Los medios
mienten cuando dicen que el
Estado no controla el dinero
que le da la fundación. El
gobierno le da el dinero a una
provincia, por ejemplo, y es
el gobierno de esa provincia
el que debe hacer el control.
Hasta Macri recibió dinero
del gobierno nacional por la
construcción de las viviendas
de la fundación. El tema está
en la Justicia y se resolverá
en ese ámbito
-Desde la militancia por
los Derechos Humanos
desde la Argentina, ¿qué
visión se tiene sobre la forma
en que el tema ha sido
tratado en el Uruguay, la
Ley de Caducidad, la ley
interpretativa, la actuación
del sistema político?
-En un momento nos pareció
que lo que ocurriera en
Uruguay iba a servir para que
todos los países se alinearan
detrás de él. Nos pareció muy
extraña esta movida, que el
Presidente Mujica estuviera
involucrado. Lo identificábamos
como a una persona que
estaba comprometida con los
temas relacionados a la justicia.
Hemos consultado a uruguayos
sobre el tema y nos
han respondido que eso demuestra
el verdadero compromiso
que tenía Mujica. Tal
vez tenía un compromiso hasta
determinado punto y no
“hasta el hueso”. Se aducen
cuestiones jurídicas, pero
aberración mayor que la Ley
de Caducidad, no existe. Es
una ley de impunidad.
-Uno mira la Argentina y
piensa en un país que podría
convertirse en potencia.
Sin embargo, ve la realidad,
lo que ha pasado
durante décadas, la pérdida
de valores de las personas
que llegaron al poder -
tal vez nunca los tuvierony
se encuentra con un país
siempre convulsionado...
-Tuvimos al más grande
revolucionario de la historia,
al Che Guevara, y tuvimos a
un Menen, a un Videla… Tuvimos
de todo a lo largo de
la historia. Quizá sea por
aquello que se dice hasta el
hartazgo, lo del crisol de razas,
que dentro de tanta mezcla,
tengamos de todo, lo
bueno y lo malo. A los nazis
se les abrieron las puertas.
Estaban en Bariloche. Tuvimos
a López Rega, cinco presidentes
en una semana... Si
uno va a Cuba, a los argentinos
nos idealizan, en cierta
forma. Y lo hacen por el Che.
Si fuera por todo lo demás,
sería imposible. A veces uno
tiene ganas de decirles que
Argentina, lamentablemente,
no es solo el Che, que somos
soberbios, que nos creemos
los mejores del mundo, que
hay absolutamente de todo.
Pasa otro tanto cuando los
porteños llegan a Punta del
Este. Allí debe de estar la
peor rancia de los argentinos,
personas que se enriquecieron
con el menemismo y que
se piensan los dueños del
mundo. Menem destruyó
todo. Una vergüenza, mientras
hablaba de que la Argentina
era un país del primer
mundo. Ahora hay medios
que dicen que en el mundo,
la Argentina no existe, cuando
en Europa establecieron
que la Asignación Universal
era la acción más revolucionaria
tomada por un Estado.
Si no se hubiera muerto Kirchner
seguirían hablando de
que este gobierno es una
monarquía. A pesar de todo
el aparato que tienen, no pudieron
esconder la emoción
de la gente una vez conocida
la muerte de Néstor. Carrió
dijo que el velatorio lo
había organizado “Fuerza
Bruta”, una organización de
artistas, y Mirtha Legrand
puso en tela de juicio si estaba
el cuerpo de Néstor en el
féretro.
-A pesar de todo, ¿eres
optimista con respecto al
futuro de la Argentina?
-Si, sinceramente lo soy.
El momento actual que vive
el país es inédito. Tengo 44
años. En la época del menemismo,
los pibes hablaban
de cerveza, boliches, autos,
modelos; ahora hablan de
política y esa es una señal
muy importante, porque
muestra su compromiso con
la realidad, con su tiempo.