1982
Islas Malvinas
La Guerra de
las Malvinas, guerra patria que por un rato unió a los argentinos
pisadores y a los argentinos pisados, culmina con la victoria del ejército
colonialista de Gran Bretaña.
No se han
hecho ni un tajito los generales y coroneles argentinos que
habían prometido derramar hasta la última gota de sangre. Quienes
declararon la guerra no estuvieron en ella ni de visita. Para que la
bandera argentina flameara en estos hielos, causa justa en manos injustas,
los altos mandos enviaron al matadero a los muchachitos enganchados por el
servicio militar obligatorio, que más murieron de frío que de bala.
No les
tiembla el pulso: con mano segura firman la rendición los violadores
de mujeres atadas, los verdugos de obreros desarmados.
Eduardo Galeano
Memorias del fuego III. El
siglo del viento.
Siglo XXI de España Editores
S.A. 9ª Ed. Noviembre 1990. Pág. 234.
“Algún
día América Latina tendrá una voz de continente, una voz que será respetada y
oída, porque será la voz de los pueblos dueños de su propio destino”.
(Salvador Allende en entrevista publicada en Punto Final, marzo/71)