jueves, 28 de abril de 2016

CUBA VA




De: Froilan y Adys <froilan@cubarte.cult.cu>
Enviado: viernes, 29 de abril de 2016 02:18 p.m.

 
 


 

The Washington Post acusa a Cuba

Por Arthur González

Lo que ha soportado y aun soporta Cuba es para inscribirlo con letras de oro en la historia de la humanidad.

La más reciente acusación la realizó el diario The Washington Post en un editorial publicado el domingo 24.04.2016, donde invita a los estadounidenses que viajen a la Isla a levantar su voz para defender la democracia, "una y otra vez".

Antes de triunfar la Revolución ya el Gobierno de Estados Unidos se esforzaba por evitar que su líder, Fidel Castro Ruz, lograra derrotar al dictador Fulgencio Batista, apadrinado por ellos desde que asumió el poder en 1952 mediante un golpe militar.

Planes de terrorismo de Estado, ponen de manifiesto los crímenes cometidos contra el pueblo cubano; una invasión mercenaria igualmente sufragada por el Gobierno estadounidense; presiones políticas para lograr el aislamiento de la naciente Revolución y su expulsión de la OEA; acciones de guerra biológica donde introdujeron plagas y enfermedades contra la flora, la fauna y los seres humanos, como fue la primera epidemia de Meningoencefalitis a inicios de la década de 1960 y en los años 80 el Dengue Hemorrágico, que durante su primera aparición en la Isla en 1981, dejó un saldo de 158 muertos, de ellos 101 fueron niños.

La guerra psicológica es una constante en la hostilidad yanqui contra Cuba. Iniciada en 1960 con la instalación de una estación de radio con transmisiones ilegales hacia la isla, denominada Radio Swan, fue la instigadora de noticias falsas para causar alarma y terror en las familias cubanas.

Esa radio transmitió el 26.12.1960, un mensaje subversivo que dio inicio a la criminal Operación Peter Pan, mediante la cual lograron sacar de Cuba a 14 mil 48 niños sin acompañantes, conformando de esa forma el mal llamado exilio cubano.

El mensaje de esa radioemisora decía:

"¡Madre cubana, la próxima ley del gobierno será para quitarte a tus hijos desde los de 5 años y devolvértelos a los 18, convertidos en monstruos del materialismo! ¡Ve a la iglesia y sigue las orientaciones del clero!".

La radio y la tv Martí, siguen similar línea de acción contra la Revolución, transmitiendo noticias falsas y distorsionadas.

Las nuevas tecnologías de la informática y las comunicaciones también son empleadas para estas campañas. Para eso fabricaron en 2007 a la emigrada cubana, devenida en repatriada y exitosa bloguera, Yoani Sanchez, conformándole una imagen internacional mediante la entrega de los más reconocidos premios de periodismo, que ni el mismísimo Gabriel García Márquez obtuvo en vida.

Un tema favorito, construido por sus especialistas a finales de los años 70, es el de los Derechos Humanos, para lo cual sobornaron a delegados en la extinta Comisión de los Derechos Humanos de la ONU, logrando inicialmente condenar a Cuba, hasta que el proceso fue revertido ante las mentiras reiteradas.

Al crearse el nuevo Consejo de Derechos Humanos, fue Estados Unidos quien no fue electo para integrarlo, pues la votación fue secreta.

La prensa yanqui, y la de sus aliados, es el soporte empleado por la CIA, el Departamento de Estado y otras agencias gubernamentales, para desarrollar la guerra mediática contra la Revolución cubana; de ahí que el The Washington Post, lanzara su más reciente campaña contra Cuba.

Sin embargo, no hacen lo mismo contra países donde las violaciones de los derechos humanos, mediante el asesinato a periodistas y defensores de los derechos indígenas, se suceden a diario, como son los casos de México, Honduras y Guatemala, algo que jamás ha sucedido en Cuba.

En su editorial dominical se pone de manifiesto el por qué Barack Obama, amplió las licencias para que sus ciudadanos viaje a Cuba.

La razón es una sola, deben ejercer influencia subversiva con el fin de lograr desmontar el socialismo cubano desde adentro y así lo ha reiterado sin cortapisas.

Otro aspecto que deben ejecutar los viajeros yanquis es fortalecer los negocios privados de hospedaje y restaurantes, con el fin de empoderar a la llamada sociedad civil.

Ante la realidad que están constatando los estadounidenses que visitan por primera vez a la isla prohibida, muy diferente a la que les han contado, su Gobierno se percata que las mentiras se desboronan ante una situación aplastante.

Cuba, bloqueada y agredida, ha resistido y muestra niveles de atención médica inimaginables para los estadounidenses, los que deben pagar altísimos seguros médicos que no cubren operaciones complejas, ni tratamientos contra el cáncer, algo que los cubanos reciben de forma gratuita.

Ante la reciente visita a La Habana de la delegación del Comité Presidencial pa­ra las Artes y las Humanidades de Es­tados Unidos y el descubrimiento que sus miembros hicieron del vasto espectro cultural cubano, la Casa Blanca percibe que su boomerang los golpea.

Quizás lo que motivó la publicación del editorial del Washington Post, fueron las declaraciones de George Stevens, copresidente de dicho Comité Presidencial, al despedirse de La Habana, cuando sin presiones de ningún tipo expresó: "Nosotros, todos juntos, hemos vis­to aportes maravillosos al espíritu humano en nuestros días aquí en Cuba".

Criterios similares exponen diariamente miles de norteamericanos que retornan de Cuba, al constatar que la realidad es muy diferente a las barbaridades que durante medio siglo les contaron.

De ahí la exhortación realizada en el editorial, posiblemente redactado en la propia Casa Blanca, y la insistencia de que las autoridades de la isla "persiguen a los cubanos que ejercen críticas contra el Estado y existe represión contra los opositores", escenario que no ven ni comprueba los que con entera libertad recorren calles y plazas del archipiélago cubano, pues como aseguró José Martí:

 

"Las verdades reales son los hechos".