De Ernesto Narcisi, un cura de la 1-11-14
Señor Senador, Miguel Angel Pichetto:
Lamento tener que contestarle. No me puedo callar. Mi voz o mis palabras, seguramente no van a tener la repercusión que han tenido las torpezas que usted profirió. Pero no importa… La indignación y el dolor no me permiten callar.
Tuve el privilegio de vivir más de 15 años en la Villa del Bajo Flores. Allí aprendí a caminar como sacerdote y vecino con los sufridos vecinos de la Villa.
Escuchar sus torpezas son realmente insultantes pero tal vez sean fruto de su vacío corazón y de su profunda ignorancia de la que usted hace ostentación.
Torpe e ignorante se vuelve soberbio e inhumano… hasta el colmo de lo tolerable…Y sus palabras violentas siembran el odio y la desesperación.
Los sufridos habitantes de la Villa del Bajo Flores no necesitan que yo los defienda. Lo hacen ellos muy bien y sin tantas palabras. Con sus vidas y el compromiso cotidiano se defienden y construyen… Pero usted no puede entender eso de construir. Su odio, su torpeza e ignorancia, solo pueden buscar “Volar todo por lo aires”… Dinamitar…
Usted no sabe de “Construir”.
Usted solo puede mirar desde un “Dron”… Y ni siquiera puede ver lo que mira…
Vamos a seguir construyendo. Vamos a seguir en la lucha y en la esperanza…
A pesar suyo y de su odio… A pesar de lo mucho que lastiman sus torpezas y su ignorancia…
No tenga dudas, Señor Senador, usted da vergüenza y nos empuja a no bajar los brazos.
Todavía quedan muchos ignorantes como usted…
Aunque no estoy seguro que haya tantos tan soberbios y violentos como usted…
Señor Senador, Miguel Angel Pichetto:
Lamento tener que contestarle. No me puedo callar. Mi voz o mis palabras, seguramente no van a tener la repercusión que han tenido las torpezas que usted profirió. Pero no importa… La indignación y el dolor no me permiten callar.
Tuve el privilegio de vivir más de 15 años en la Villa del Bajo Flores. Allí aprendí a caminar como sacerdote y vecino con los sufridos vecinos de la Villa.
Escuchar sus torpezas son realmente insultantes pero tal vez sean fruto de su vacío corazón y de su profunda ignorancia de la que usted hace ostentación.
Torpe e ignorante se vuelve soberbio e inhumano… hasta el colmo de lo tolerable…Y sus palabras violentas siembran el odio y la desesperación.
Los sufridos habitantes de la Villa del Bajo Flores no necesitan que yo los defienda. Lo hacen ellos muy bien y sin tantas palabras. Con sus vidas y el compromiso cotidiano se defienden y construyen… Pero usted no puede entender eso de construir. Su odio, su torpeza e ignorancia, solo pueden buscar “Volar todo por lo aires”… Dinamitar…
Usted no sabe de “Construir”.
Usted solo puede mirar desde un “Dron”… Y ni siquiera puede ver lo que mira…
Vamos a seguir construyendo. Vamos a seguir en la lucha y en la esperanza…
A pesar suyo y de su odio… A pesar de lo mucho que lastiman sus torpezas y su ignorancia…
No tenga dudas, Señor Senador, usted da vergüenza y nos empuja a no bajar los brazos.
Todavía quedan muchos ignorantes como usted…
Aunque no estoy seguro que haya tantos tan soberbios y violentos como usted…