sábado, 25 de agosto de 2007
Judo 5 Medallas Oro, 3 de plata y 5 de bronce ganadas por Cuba en Juegos Panamericanos Cariocas Sheila Espinosa, Yanet Bermoy nativas de Cienfuegos
Tres de los cinco oros del judo son de Cienfuegos
CUBA REINA CORONADA EN JUDO
Cuba trae a la Isla la corona de ese deporte luego de cerrada disputa con el equipo anfitrión
(23/07/2007) 2:35 p.m.
Una cosecha general de cinco títulos (el 60 por ciento de ellos de cienfuegueros), tres medallas planteadas y cinco de bronce, le dio a Cuba el título general de la competencia de judo de los XV Juegos Panamericanos, en reñido duelo deportivo entre isleños y cariocas sellado al final de la ceremonia de entrega de premios con una demostración de hermandad entre atletas de las dos naciones fundidos en cálido abrazo.
Nuestro equipo cerró con broche dorado la justa en esta disciplina, al sumar con los dos metales dorados de las cienfuegueras Yanet Bermoy y Sheila Espinosa un total de cinco títulos frente a cuatro de los anfitriones, en una de las competencias de judo más reñidas de las últimas citas continentales.
La balanza se inclinó de manera definitiva hacia los cubanos tras la cerrada victoria de Sheila Espinosa ante la anfitriona Erika Miranda en los 52 kilogramos. Ninguna de las dos muchachas pudo marcar durante los cinco minutos oficiales, por lo que tuvieron que decidir el pleito en tiempo extra, en el cual la atleta local fue penalizada por falso ataque, cuando apenas restaba un minuto para finalizar el combate.
Considerada por los anfitriones como controvertida, la decisión arbitral desató a límites increíbles el fanatismo de los locales, muy a gusto sin embargo cuando en idéntica decisión los jueces favorecieron con el llamado punto de oro al brasileño Joao Derly sobre el cubano Yordanis Arencibia, en la que muchos aseveran fue una final adelantada.
El camino hacia el sitial más alto del judo cubano lo abrió en la jornada del cierre la fuera de serie Yanet Bermoy, campeona mundial de los 48 kilos, quien a pesar de tener un pleito complicado ante la fogosa Daniela Polzin, sí que no dejó margen a las dudas con una proyección categórica. Esta es la cuarta oportunidad consecutiva en que la Bermoy le gana a la brasileña, dos de ellas este año. Al decir de los entendidos, y de manera extraoficial, la cienfueguera debía ser merecedora del trofeo a la mejor judoca, tras ganar todos sus pleitos por ippón.
Otro que pudo haber aportado un oro que no estaba en pronósticos fue Yasmani Pike, inmenso en toda la lid tras doblegar a los mejores de la división: el brasileño Alexandre Lee y después al titular continental, el canadiense Hill Frazer; sin embargo, fue sorprendido en la final por una depurada técnica de hombro del argentino Albarracin que lo dejó en plata.
El torneo de judo de los XV Juegos Panamericanos culminó con Cuba en primer lugar con cinco preseas de oro, tres de plata y cinco de bronce, escoltada por Brasil (4-6-3), Estados Unidos (3-1-2), Argentina (1-0-3) y México (1-0-0).
Lo curioso del caso es que de los cinco metales áureos tres fueron aportados por atletas cienfuegueros, ya que con anterioridad, en la división de los 100 kilogramos, Oreidis Despaigne recuperó para Cuba una corona perdida en los Juegos de Mar del Plata-1995. Para ello tuvo que pasar por encima del medallista de bronce del último campeonato mundial, el brasileño Luciano Correa, un hombre que además de ser el anfitrión le asistía para ese combate el aval de figurar actualmente como uno de los talentos más preciados del equipo verde amarillo.
Ya en el combate final Oreidis encontró a un experimentado judoca, el canadiense Keith Morgan, el mismo ante el que Cuba cediera el oro de los 100 kilos en Mar del Plata, ganador luego en Dominicana 2003 y de preseas en campeonatos mundiales y copas del mundo.
"Chocamos en Montreal en el campeonato panamericano del deporte. Allí le vencí, pero es un hombre que tiene mucho tatami recorrido en más de cuatro mundiales. Le pude ganar por el mejor control que ejercí en cada agarre y por eso logré con una técnica de pierna (kosoko-gake) la victoria", afirmó en declaraciones a la prensa luego del memorable combate.
Pero Oreidis dijo que una buena parte del triunfo se consiguió cuando derrotó al brasileño. "Es que él es un tremendo competidor, de lo mejor que hay en el mundo hoy. Era la tercera vez que nos veíamos en este 2007, con una victoria por bando, así que el ippón con el que lo vencí fue el desempate", dijo.