23 hs. domingo 24 febrero, termino de ver en Crónica TV "La Cuba de Fidel Castro" me siento un gran periodista o la gente que hizo el programa no aprobó una materia. ¡Que verguenza me da Crónica con sus mentiras, sus maniobras sucias (infantiles) para engañar a los argentinos sobre Cuba.
Si lo de Crónica fuera verdad, yo habría sido chupado en Enero por un OVNI y estuve en otra galaxia y no es Cuba lo que cuento. Claro, allá, los periodistas son periodistas y no amanecen en Enero con balazos en la cabeza y el cuerpo incinerado dentro de su propio auto como José Luis Cabezas, ó Mario Bonino. A los maestros no se les dispara a la nuca con lanzagases como al asesinado Fuentealba. No hay un solo cubano al que pueblo, gobierno y policía busquen, como se hace aquí con Julio López.
Este pasado sábado 23 un patrullero se llevó detenido a un joven de 34 años de un Mc Donald en Ramos Mejía, (había ido a comprar comida rápida) en menos de hora y media lo llevaron al hospital muerto. Los médicos policiales dicen que hará unos 5 días debe haber chocado con un auto, pues hay dos vértebras cervicales fracturadas, cinco costillas rotas, el hígado estallado y el políglota (hablaba castellano, inglés y chino). Una hora antes estuvo visitando a sus tíos y estaba magníficamente bien de salud. Cosas que ocurren en la Argentina, donde todos somos Derechos y Humanos. Periodistas mercenarios y decadentes, traidores al pueblo que bebe de sus mentiras, los de Crónica TV. Toto.
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PARTE II - Toto en Cuba - Holguín – Santiago de Cuba Enero 2008
Terminal de micro falta una hora para partir hacia Santiago de Cuba, Irene con el equipaje y charlando con viajeros cubanos allí en la terminal holguinera. En las paredes los cinco rostros de nuestros héroes, como en todas las terminales de Cuba y frases de Martí, del Che, de Fidel.
Inquieto recorro los alrededores observando, fotografiando. A cien metros veo uniformes, en un soplo estoy frente a la escuela, ingreso a la antigua casa y a la abierta habitación donde varias mujeres conversan de pié. Salen algunas y la que me mira expectante recibe mi proposición. Tras exhibir mi credencial, que es la carta del cura argentino a los 5, quedo habilitado y voy con ella (la directora) al patio abierto donde esperan uniformados y en formación rigurosa doscientos niños, de ambos sexos y variados colores. Tras los niños, los padres, mientras se iza la bandera, doscientas y pico de infantiles gargantas entonan “la Bayamesa” de Perucho Figueredo (¡qué emoción!). Pero tengo que dejar la cámara porque la directora ya me presentó. “Un compañero de Argentina”. Leo el mensaje a los 5 héroes escrito por el cura argentino Ruben Capitanio. Y grito con el alma “¡Libertad a los cinco!” señalando a mi espalda el gran mural que muestra sus rostros. Gritan ¡Libertad! Y aplauden. Fuí por lana y salí trasquilado ya que con un gesto de la “dire” todos los rostritos se iluminaron y las doscientas boquitas entonaron completa “Cuba que linda es Cuba, quien la defiende la quiere más, un Fidel que vibra en la montaña, un rubí, cinco franjas y una estrella” (y sollozo ahora mientras escribo esto en la computadora). Como en cada escuela que visité, dejé allí una revista de “Pelota de Trapo” la Agencia de Noticias, me sentí muy orgulloso de sembrar en esos lugares de excelencia educativa y trato amoroso, una revista de tanta profundidad, poética y que denuncia el infanticidio argentino. Los cubanos van a sufrir cuando la lean, pero la verdad, será dolorosa, pero es la verdad. Y así apreciarán mejor su maravillosa realidad contrastada con nuestra dolorosa decadencia. A todas las escuelas les expliqué que “Pelota de Trapo” se puede pedir por mail, pero también la envía esta maravillosa gente por correo y gratuitamente. Cuba está lejos de nosotros, en distancias y en logros, pero les sugerí que pudieran pedirle a Morlachetti & Company que les envíe unos cuantos ejemplares a la Embajada de Cuba en Argentina, calle Virrey del Pino 1810, para que desde allí vaya a Camagüey, Holguín, Santiago de Cuba y porque nó, a todas las provincias cubanas. Es un sueño mío, soy fanático de Pelota de Trapo, será por mi inmadurez, nunca dejé de sentir mi niño interno y como es argentino, está hecho mierda. Veremos como hacemos.
Santiago de Cuba, el cartel con grandes letras cubre el maletín que porto siempre colgado a mi espalda, dice “VOTO UNIDO” y más chico abajo “Bush tarrú” arribamos y allí está la monumental escultura del “Titán de Bronce” Antonio Maceo, de la colina artificial basamento de la escultura ecuestre brotan como por arte mambí, decenas de gigantescos machetes. Frente al bello edificio del ICAP está el Palacio de Pioneros, que 5 años atrás visitamos descascarado y pálido. Hoy los dos gigantescos rostros de Camilo Cienfuegos y Ernesto Che Guevara a 30 metros de altura, lucen sobre el frontispicio del gigantesco palacio, recién pintado y remozado como si fueran una mágica aparición. Hileras interminables de escolares de secundaria, no cesan de ingresar al enorme jardín, que rodea la mansión y poco tardan en ser deglutidos a su interior. Profesoras especializadas les dan la bienvenida allí en el jardín y les adelantan la propuesta, que es el mes de la Orientación Profesional, que ni lerdos ni perezozos aprovechamos. Ambiente (gigantescos) por ambiente, acompañados por estudiantes ingresamos a las diferentes facetas del politécnico que se dictan en Cuba. Profesores y alumnos avanzados aguardan a que ingresemos y nos dictan clases magistrales, que pudieran detonar en nos una especial atracción por mecánica, gastronomía, arte, construcción, electromecánica, investigación, química, veterinaria, agronomía, etc, etc. Irene va dejando un tendal de alumnas/os, profesores, personal de maestranza shockeados, son quienes escucharon sus sinceras, veraces pero trágicas confidencias, sobre el estado de nuestra niñez y juventud, en cada oportunidad que habló dentro de ese lugar. Y fueran varias las veces. Ese mismo día, en esa misma visíta. Es que verlos tan puros, tan inocentes, tan gigantes en su pureza e inocencia te detona una envidia sana, pero envidia potenciada que solo podés elaborarla hablando como un autómata y confesando todo lo que vivenciás en ¿Buenos Aires?, con vecinos, amigos, nietos y entenados. Paramos en una casa para turistas, la joven familia, un matrimonio con dos varoncitos fueron como un sucedáneo de nuestras familias en Argentina. Vivíamos en el 1º piso, ellos en la planta baja, pero nos invitaban a compartir el noticiero por TV y a charlar. Nos obsequiaron un precioso libro revolucionario y el mayor de sus hijos (10 años) nos dedicó una acuarela sobre Ernesto Che Guevara. También debí escuchar al niño durante 20 minutos exactos sentado en su living, leerme un sesudo artículo de su libro de primaria sobre recursos minerales, cosa que me desconcertó. Afortunadamente la madre trajo al niño a la realidad y pude zafar. Día siguiente 7 de la mañana cruzo la calle y ataco a dos damas y tres varones médicos, de saco blanco, que toman fresco en una especie de sala de espera balcón, que tiene el policlínico y donde también cuando los hay, se sientan a esperar los pacientes (especie de consultorios externos). Enarbolo mi nacionalidad (cosa que en Cuba predispone pero a favor) y propongo escuchen el poema de Ramón Labañino a su madre muerta. Aceptan y se suma uno más, pero este de uniforme es custodio. Agradecen al finalizar y los dejo pues voy al matutino de la escuela que ví ayer a 2 cuadras. Es primaria, entro al edificio de 3 plantas que rodean un gran patio, con amplísimos balcones corridos, que dan a enormes y luminosas aulas. Sentados en grupos niñas y niños, unos 60 conversan, algunos miran en un TV dibujos animados allí mismo, en un aula lateral puedo ver 5 computadoras ocupados sobre un total de 15. Maestras o empleados no dejan subir a los niños a los pisos superiores pues es temprano. La directora me explica que los padres que deben ir a sus trabajos pueden traer antes a sus niños y son los que estoy viendo. Orgullosa me lleva a la dirección que está presidida con un único y enorme cuadro pintado al óleo de Ernesto Che Guevara, la obra impresiona y me comenta que la realizó el marido de la profesora de inglés. Me presenta a un hombre delgado jóven, es el profesor de ajedrez. El me explica las bondades que el juego ciencia desarrolla en el intelecto de los niños, cosa que les permite aprender más fácilmente otros conocimientos luego. Manuel Ambrusier Jáuregui, es Presidente de la Federación Provincial de Ajedrez Postal y también del Círculo Master de Ajedrez manueljit@yahoo.es ó Apartado Postal 106 Santiago de Cuba 1 – CP 90100 Cuba, escríbanle. Volaron los minutos y los alumnos se formaron y eran doscientos cincuenta, muchos padres permanecían esperando. Izaron la bandera mientras todos entonaban el himno nacional. La dire les recordó que en dos días custodiarían muchos de ellos las urnas. Que era fundamental que comprendieran el proceso eleccionario, y sugería que esa noche por TV en el canal educativo vieran la mesa redonda que se haría al efecto. Llamó a un niñito y lo abrazó contra su costado anunció que cumplía años ese día y toda la escuela le canto al niño celebrando. Luego subieron al pedestal del mástil donde estábamos parados los premiados de ajedrez (6) primeros puestos en campeonato provincial, una negrita maratonista, y ¡sorpresa! el morochito de 10 años premio mensual al mejor pintor plástico de la escuela, en cuya casa estábamos parando. A todos los aplaudieron entusiasmados. Luego oir a todos juntos gritar “nacimos para vencer y no para ser vencidos”. La dire preguntó por los “encargados de Argentina” y en un minutos tuve a mis costados una niña negra y un niño blanco que exhibían 2 grandes cuadros con mapa, bandera, escudo, escarapela, flor de ceibo, rostro de Néstor Kirchner, y listado de ríos y montañas argentinas. Me presenta, dice mi nombre y al unísono todos los alumnos lo vocean. Leo la carta del cura argentino a los 5 héroes. Aplauso cerrado. Luego les hablo con el corazón porque voy mirándolos uno por uno y mi cerebro está ocupado registrando ojos, colores, peinados, semblantes, dentaduras, posturas, pulcritud. Aplausos. La dire pide levanten su mano quienes se escriban con alguno de los héroes cubanos presos hace 10 años en EEUU… ¡ no puedo creerlo !, el 40 % de las manitas están alzadas.
Los medios de comunicación a sueldo del poder que destroza la civilización y el amor en todo el orbe, niegan que existan, ó atacan el método cubano de elecciones, sin aclarar de que se trata ó analizarlo. Irene y yo sentados en un banco estilo plaza a las 7 de la mañana, dentro del patio de un policlínico frente a nuestra residencia provisoria. No vemos soldados, ni policías en la hora y media que disfrutamos atestiguando, viendo llegar gentes de todas edades, sexos y colores. A tres que no encajaban (para mí) les pregunté la edad, dos respondieron 16 años, y el tercero 17. Viejos y jóvenes introducían el sobre en las urnas y los niños pioneros (7, 9 u 11 años) uniformados, ubicados a cada costado de la urna electoral, colocaban una mano en la sien y en voz alta decían ¡¡VOTÓO!!
Es fácil escribirlo pero una angustia explicable oprime mis lagrimales y me resta aire en los pulmones. ¿Cuándo pude yo a mis 10 añitos, ó cuando podrán mis 9 nietos en este triste país, custodiar el elemento básico donde la democracia expresa su voluntad? ¿Cuándo podrán votar a los 16 años? ¿Cuándo estudiar gratuitamente? El voto NO ES OBLIGATORIO y sin embargo votaron 8.231.365 de cubanos, que es el 96,89 % del padrón, y solo el 3,73 % votó blanco y el 1 % fueron anulados.
El Voto Unido propuesto por Fidel desde los años 90 (pleno período especial), respaldó al gobierno con el 91 % del sufragio en un país cuyo pueblo ha sido educado para discutir. Volvieron a ganar los líderes de siempre, Comandantes de la Revolución, Juan Almeida Bosque, Guillermo García Frías y Ramiro Valdés, y como la nueva generación de dirigentes, Carlos Lage, Felipe Pérez Roque, Abel Prieto, tuvieron más del 92 %. Raúl Castro, con su discurso acerca de la necesidad del debate nacional, en todos los sectores para paliar las dificultades actuales, que se presentan en el seno de la sociedad, fue aprobado por el 99,37 % y Fidel Castro con 98,26 %, a pesar del año y medio de ausencia. Los ciudadanos tuvieron las mismas oportunidades y no gastaron un peso para ser electos. En otros países esto es una quimera, comenzando por EEUU donde la campaña presidencial va a terminar costando más de mil millones de dólares. Visitamos la Casa Botiquín Frank País, donde vive mi querida amiga Mireya Fernández, viuda de Pedro Martí del batallón suicida. Allí escondían medicinas para apoyar la invasión de Fidel. El uniforme, el equipo de combate, las insignias todas que exhibíamos en el Museo del Che fueron aportadas por él. A 3 cuadras entramos a la Casa Natal de Antonio Maceo, (el Titán de Bronce” mulato héroe de la lucha contra el colonialismo español) Irene y yo fuimos atendidos 7 siete cubanos. Me presenté explicando de donde veníamos y que era amigo del héroe Pedro Martí. La custodio de uniforme del Ministerio del Interior me interrumpió diciendo. “Pues yo soy la hija de Pedro Martí”…. fué una gran sorpresa que asimilé apretándola contra mi pecho emocionado. Y era cierto, su tarjeta de identidad en el pecho, su altura de metro ochenta, era como el padre, y de él hija del primer matrimonio. Entonces fue como estar en familia. A cada rato me la abrazaba, con uniforme y todo. El guía del museo se lució por separado primero con Irene, luego conmigo, porque mientras nos turnamos en bajarle línea al personal cubano, que con atención nos escucharon primero a mí y luego a Irene. En realidad hablamos más nosotros que ellos, e inclusive tras hora y media de perorata, dos visitantes más se agregaron y ¡albricias! eran argentinos, maestros y jóvenes, se sumaron a la conferencia y sus conceptos lapidarios se sumaron a la realidad argentina que habíamos descripto nosotros. Deshago mi último abrazo con la hija militar de mi amigo y nos fuimos para el Museo de la Clandestinidad, ex edificio de la policía batistiana que fuera incendiado por jóvenes revolucionarios que apoyaban el desembarco del Granma. Frente a ese museo está la casita, donde Fidel con solo 6 añitos era mantenido como rehén, por la pianista hermana de la maestra del caserío que Don Angel el padre de Fidel tenía en Birán, Holguín. El motivo era que doña Lina y Don Angel pagaban una buena suma de dinero mensual, para que su hijito estudiara en Santiago de Cuba, cosa que era una mentira, esta maestra y su hermana se aprovechaban de los padres de Fidel y al niño no le enseñaban nada.
Al chofer que nos lleva hacia la Granjita Siboney le comenté… “ché levantá a quien se te ocurra eh….” al rato se detiene y sube una cubana de mediana edad a la que se ve que el hombre conocía. Llegamos a la granjita cuando entramos resulta que la mujer que nos guía es la misma que levantamos por el camino. Tiene los labios pintados pero además hay como brillitos en esa boca. No se bien si es por la precisión y firmeza de los conceptos con que me describe la gesta de Abel, Fidel, Raúl y tantos otros que convence, o se trata de un nuevo y cubano concepto en cosmética erótica. Al ambiente principal ingresa un contingente de alemanes con guía propia. En lo primero que se interesan es en mí cartel de Bush Tarrú, veo que la guía les aclara el significado del cartel y en las caras de mujeres y hombres veo que la traducción fue correcta.
En la iglesia del colegio donde estudiaron Fidel y Raúl asistimos a un concierto de la Orquesta Sinfónica de Oriente. Fueron una dulzura para el oído y el alma las interpretaciones dirigidas por una negra delgada y bella de unos treinta años. Los 40 maestros se conjugaban maravillosamente bien. Increíblemente el público cubano, no estallaba en aplausos tras cada tema, pero como la vergüenza la perdí hace mucho y no la volví a encontrar, era aplaudir yo como un poseído en mi lugar de primera fila con mi cartel de “Bush Tarrú” apoyado en la butaca contigua. Irene sentada con nuestra amiga santiaguera dos hileras más atrás hacia como que no me conocía. A la entrada había entregado a una de las violinistas mi tarjeta y el pedido (para transmitir al director) de que uno de los temas fuera dedicado a los 5 Héroes Cubanos Prisioneros en EEUU. Finalizaba el concierto y no había presentador, no se habían anunciado ninguno de los temas, había perdido la esperanza…. pero: la directora que había dejado a los músicos recibiendo aplausos del público y ¡bravos! míos, volvió y explicó que el siguiente tema era dedicado a los 5 Héroes cubanos presos a pedido de 2 argentinos presentes y que interpretarían “Tangazo” de Astor Piazzolla. Indescriptible el sentimiento que nos provocó escucharlo en una iglesia interpretado por cubanos. Imaginé a nuestros dos hijos Demián y Manuel con sus parejas bailando allí y solo extrañe por un segundo a un bandoneón. Después de cenar ya en la calle un hombre de mi edad ofrecía dos tortas grandes, rosadas, con forma de corazón le compré una y salí corriendo en dirección de la plaza, con la torta sobre su plato de cartón, a fin de revenderla. Solo pretendía sacarle 5 pesos cubanos sobre el costo, pero a pesar de que la ofrecí con gran entusiasmo, sonrisas y frases gancheras que apelaban a la edad, ó situación de los posibles clientes (parejas de novios) solo recibí miradas asombradas e indiferencia. El capitalismo nunca podrá echar el ancla allí, yo soy comerciante pero no se si sería mi cartel de “Bush Tarrú” o mi acento porteño pero desconfiaban y la torta la tuvimos que comer nosotros. ¡Estaba buenísima!.
Camagüey segunda vuelta – Heladería Copelia, visita con degustación múltiple, primero el producto que es delicioso, crema helada, luego la charla con el personal que es admirable, Irene les endosa un discurso de barricada, para nada congelado. Las manos de las operarias juro que estaban heladas pero sus rostros ardían en blanco, negro ó cobrizo de interés, fraternidad y revolución. Recordé allí la impresión que habrá tenido mi hijo Demián al conocer a su hoy media naranja, que laboraba expendiendo helados y tocarle la punta de las extremidades superiores. El cartel de Bush Tarrú siguió detonando risas y felicitaciones. Irene se siente como en su casa y decide cocinar pizza para todos, un éxito total y hasta sobró masa para el día siguiente, pidió a una de las chicas que le moliera tomate para la salsa. Se levantó temprano abrió la heladera y el tarro con pulpa roja lo vació sobre la masa que puso al horno, claro que no era tomate, así que se adjudicó la PRIMERA PIZZA DE GUAYABA (fruta rojiza), que confieso haber comido como un rico postre. Viajamos a Sierra de Cubitas y así regresamos al lugar donde empezó todo para nosotros hace 15 años. Hoy como corresponde todo creció, mejoró, desarrolló. En la Escuela Secundaria los trescientos alumnos miran y escuchan atentamente, a esa pareja mayor que desde el escenario, se turna para hablarles de otro mundo, otro país, de otra forma de vida, de la droga, del delito, de maestros asesinados, de testigos desaparecidos. Que vívidamente les relata el apaleado de manifestantes, las balas de goma y de las otras, los caballos, la desaparición de adolescentes para las redes de la prostitución. La búsqueda de nietos desaparecidos, la matanza de jubilados para robarles, el Paco y tanta mierda más. Además enumeramos los logros cubanos en estos 15 años. Declamo el poema a Fidel, del premiado con el Cervantes Juan Gelman, no sin antes relatar la tragedia del poeta con su hija desaparecida y su nieta sin aparecer. Caminamos metros hasta la radio que funciona dentro de la escuela y que ganó muchos premios provinciales y nacionales.
Luego reportaje al aire y contar como luchan los compañeros en Argentina, pidiendo la libertad de los 5. De allí a la escuela primaria Héroes de Yaguajay, recorrida por las amplias aulas donde 25 niños en cada una, parecen nada. Es que el método cubano es intensificar en pocos niños la atención de la maestra, a fin de lograr mejores resultados y menos desgaste en la educadora. De aula en aula llego (yo caminaba adelante) a la gran ventana de una y veo a la maestra parada leyéndole a los niños en voz alta:
“Habana, Año de la Agricultura . Fidel: Me recuerdo en esta hora de muchas cosas,… sin pedir permiso entro, la interrumpo y digo: “Perdoneme pero somos argentinos y eso tengo que leerselo yó.” El libro pasó a mis manos, lucho con el nudo en mi garganta, con las letras chicas que mis anteojos sucios no me dejan leer y sigo ….:
de cuando te conocí en casa de María Antonia, de cuando me propusiste venir, de toda la tensión de los preparativos. Un día pasaron preguntando a quién se debía avisar en caso de muerte y la posibilidad real del hecho nos golpeó a todos. Después supimos que era cierto, que en una revolución se triunfa ó se muere (si es verdadera). Muchos compañeros quedaron a lo largo del camino hacia la victoria. Hoy todo tiene un tono menos dramático porque somos más maduros, pero el hecho se repite. Siento que he cumplido la parte de mi deber que me ataba a la Revolución Cubana en su territorio y me despido de ti, de los compañeros, de tu pueblo, que ya es mío. Hago formal renuncia de mis cargos en la dirección del Partido, de mi puesto de Ministro, de mi grado de Comandante, de mi condición de cubano. Nada legal me ata a Cuba, solo lazos de otra clase, que no se pueden romper con los nombramientos. Haciendo un recuento de mi vida pasada creo haber trabajado con suficiente honradez y dedicación para consolidar el triunfo revolucionario. Mi única falta de alguna gravedad es no haber confiado más en ti desde los primeros momentos de la Sierra Maestra y no haber comprendido con suficiente celeridad tus cualidades de conductor y de revolucionario. He vivido días magníficos y sentí a tu lado el orgullo de pertenecer a nuestro pueblo en los días luminosos y tristes de la crisis del Caribe. Pocas veces brilló más alto un estadista que esos días, me enorgullezco también de haberte seguido sin vacilaciones, identificado con tu manera de pensar y de ver y apreciar los peligros y los principios. Otras tierras del mundo reclaman el concurso de mis modestos esfuerzos. Yo puedo hacer lo que te está negado por tu responsabilidad al frente de Cuba y llegó la hora de separarnos.
Sépase que lo hago con una mezcla de alegría y dolor; aquí dejo lo más puro de mis esperanzas de constructor y los más querido entre mis seres queridos… y dejo un pueblo que me admitió como su hijo: eso lacera una parte de mi espíritu.
Irene aguanta hasta aquí, me arrebata el libro y sigue ella:
En los nuevos campos de batalla llevaré la fé que me inculcaste, el espíritu revolucionario de mi pueblo, la sensación de cumplir con el más sagrado de los deberes: luchar contra el imperialismo donde quiera que esté; esto reconforta y cura con creces cualquier desgarradura. Digo una vez más que libero a Cuba de cualquier responsabilidad, salvo la que emane de su ejemplo. Que si me llega la hora definitiva bajo otros cielos, mi último pensamiento, será para este pueblo y especialmente para ti. Que te doy las gracias por tus enseñanzas y tu ejemplo y que trataré de ser fiel hasta las últimas consecuencias de mis actos. Que he estado identificado siempre con la política exterior de nuestra revolución y lo sigo estando. Que en dondequiera que me pare sentiré la responsabilidad de ser revolucionario cubano y como tal actuaré. Que no dejo a mis hijos y mi mujer nada material y no me apena; me alegro que así sea. Que no pido nada para ellos, pues el Estado les dará lo suficiente para vivir y educarse. Tendría muchas cosas que decirte a ti y a nuestro pueblo pero siento que son innecesarias, las palabras no pueden expresar lo que yo quisiera, y no vale la pena emborronar cuartillas.
Hasta la victoria siempre. ¡ Patria ó Muerte !
Te abraza con todo fervor revolucionario. CHE
Nuestra entonación y cadencia acentuó el realismo del texto, para esos niños cubanos, que para nosotros son ese Fidel, a quien el Che Guevara habla en su carta. Tras eso, nos agasajan con exhibiciones teatrales, poesías, canciones individuales de excelentes solistas a capella y himnos colectivos en los que los trescientos alumnos, padres, empleados, maestros, directora y nosotros TODOS TOMADOS DE LAS MANOS balanceamos ambos brazos alzados. ¡¡No se puede creer!! Yo pensaba que los evangelistas eran inteligentes en la temática de la integración comunitaria, pero los cubanos los pasan por arriba. Todo ocurre con una bella preadolescente que se te pega desde la entrada a la escuela y como si fuera “tu dueña” (término que usa Rodolfo Livingston y es acertadísimo) te acompaña asesorándote en todas y cada una de las cosas que puedas necesitar ó dudes. Por la noche Casa de la Trova, excelente grupo salsa al que solicité dedicaran un tema a los Cinco Héroes prisioneros y luego unipersonal de un joven actor, se burla de los carteles con los que el pueblo convive en Cuba, “picadillo de embarazada” es porque las que lo están tienen subvencionado un picado de carne. Juega humorísticamente con que un extranjero pensará que en Cuba pican a las embarazadas y así por el estilo, (todo con tufillo gusanoide, a pesar de ser muy inteligente, rápido y preciso). Nuestra mesa era la más lejana a 25 mts del escenario, no tardé nada en pasar delante del escenario y dejar caer “inadvertidamente” mi maletín que quedó a la vista de todos con el “Bush Tarrú”, el actor siguió sin darse cuenta, yo me senté a un costado prestando atención y disfrutando la inteligencia y velocidad mental del joven. Cuando ví que decía gracias y estaba por terminar el tema salté al escenario y nos miramos por un segundo, extendí la mano mirando y pidiéndo el micrófono. El gusanito lo escondió tras su cintura, cosa que ni me mosqueó. A grito pelado saludé al público y expliqué que deseaba colaborar con tan buena e inteligente actuación del actor, con un cartel del cual yo era autor en Argentina. Y recité: ¡¡ SALVEN A LOS ARGENTINOS !!
“las ballenas”. Tras solo eso descendí del escenario, en medio de aplausos y pude oir mientras me dirigía a mi mesa, que el gusano explicaba que no me había dado micrófono pues no era la primera vez que lo insultaban allí. Y agregó (como yo estaba esperando, me la devolviera de alguna forma) “Inteligentes….. las ballenas”. Creo que fue el único trago amargo para nosotros en Camagüey. Hay gentes que usan el humor para destruir y no para construir. Con inteligencia y sagacidad se puede usar para bien.
Terminal Camagüey: distraído leo consignas prolijamente pintadas en todas las paredes. Me llama Irene e ingreso a la oficina donde está, es venta de pasajes para turistas, tras un escritorio dos cubanas de mediana edad. Irene me dice: “dame cucs ahora” … yo digo “¿aquííí..? Irene es terminante, las dos mujeres me miran.
Con una mano manoteo mi cinturón, dudo, pregunto ¿no ponen música? Y corriendo el sofá de la oficina me refugio atrás para bajarme los pantalones y sacar el dinero que tenía escondido. Ni siquieran hacían palmas, mi strip fue vergonzozo y perdí plata. Nos abrazan despidiéndonos Sonia Castillo y su esposo además de Paquito.
continuará... y además Irene Perpiñal ya escribió su versión del viaje, van a ver.