foto: niño no sabemos si metodista, cristiano, budista,evangelico, musulmán ó judío,
sí sabemos que es URUGUAYO porque en CUBA nunca se vió un niño así desde hace cincuenta años.
Cuba. Entrevista a Oscar Bolioli.
El pastor Oscar Bolioli, actual presidente de la Federación de Iglesias Evangélicas de Uruguay y quien fuera presidente de la Iglesia Metodista en Uruguay y por un largo período tuvo tareas de relaciones con América Latina y el Caribe en el Consejo Nacional de Iglesias de EE.UU., luego de un período en el Consejo Mundial de Iglesias, accedió a una entrevista propuesta por PE/Ecupres sobre la situación de Cuba.
PE. ¿Qué nuevas informaciones hay de Cuba?
Oscar Bolioli. Hace casi un mes atrás compartí con algunos amigos mi apreciación inicial de los cambios que se están dando en Cuba. Esto no significa un cambio de la revolución, sino que plantea una mirada distinta, de como esa revolución se articula frente a nuevas realidades. Esa mirada va por privilegiar lo pragmático.
Comenzó por una agresiva política exterior poniendo fin al aislamiento internacional. La crisis económica mundial encuentra a Cuba arrasada por tres huracanes, con una perdida que algunos calculan en 10.000 millones de dólares, lo que ha obligado a retrasar algunas reformas como aumento de salarios, mercado interno y cambios en la estructura de la tierra. Los cambios obedecen a buscar soluciones pragmáticas en un contexto difícil
Hace unas semanas atrás me encontré en México en una reunión de CIEMAL con el Obispo Metodista de Cuba, pastor Ricardo Pereira. El confirmó mis apreciaciones. Más aún, ha habido el cuidado de conversar con las Iglesias algunos de los temas. El Obispo me comentaba que Cuba esta poniendo un enorme esfuerzo en recuperarse del desastre, que dejaron los huracanes, construyendo puentes, carreteras, casas como nunca antes.
PE. ¿Es más rápido de lo esperado el cambio desde EE.UU.?
OB. La decisión del Presidente Obama, en primer lugar, cumple con la promesa durante las elecciones de modificar las restricciones impuestas por el Presidente Bush. Retrotrae las condiciones al tiempo del Presidente Jimmy Carter en forma generosa en sus condiciones, pero nada más.
Hay un detalle sugestivo, el anuncio fue hecho por un funcionario en español. La medida ha dejado aislado al grupo más conservador de los cubanos en Miami. En el pasado ese grupo tuvo un gran peso en la política del Gobierno hacia Cuba. El concepto de familia es muy fuerte para los cubanos y el levantar las restricciones de viaje y de remesas tiene un apoyo muy grande en el resto de los cubanos-estadounidenses.
La otra semana hubo una caravana de autos en Miami pidiendo ir más adelante en las relaciones con Cuba. Hace un mes se llevo a cabo en Miami el "Cuba Trade Expo" donde estuvieron especialistas y empresarios interesados en abrir completamente el comercio con Cuba. Estas cosas eran impensables hace un año.
A pesar que Cuba debe pagar al contado las compras en EE.UU., este se ha transformado en el quinto país mas importante de comercio para Cuba. En el 2008 llego a 700 millones de dólares. Desde el Puerto de Everglades salen constantemente barcos con pollos y hasta arroz.
En el 2004 la Universidad de Miami, nada favorable a la apertura, mostró que solo el 27% de los estadounidenses querían levantar el embargo. Hoy la encuesta indica que creció al 43.5% de la población. El ambiente se ha modificado sustancialmente y los cambios van más rápido a nivel popular. Un nuevo dato ofrecido por la prensa norteamericana del sábado 18 indica que el apoyo a la normalización de las relaciones con Cuba estaría cercano al 70 %
PE. Además de la medida de Obama, ¿hay algún otro movimiento en el Congreso?
OB. Sí. Hay otras iniciativas. Una fue la reciente visita de 7 miembros del Grupo de Congresistas negros a Cuba. Ellos fueron claros que no venían en nombre del Presidente. Sin embargo allí hay otro cambio.
En los últimos 8 años de Bush este fue muy critico de estos viajes de Congresistas. Obama no hizo ningún comentario. En Cuba la visita fue muy calibrada. Comenzó por lo protocolar con el Ministerio de RR.EE. y la Asamblea Popular. Luego con Raúl Castro terminando, poco antes del regreso, con una entrevista con Fidel.
También se voto una propuesta muy similar a lo que anuncio el Presidente en el Congreso. Pero lo más interesante es una propuesta que entro en el Senado auspiciada por los Demócratas y Republicanos. Estos últimos presididos por, nada menos, que Richard Lugar que ha sido el Republicano más antiguo en la Comisión de Relaciones Exteriores y un "gurú" en política exterior.
Esta propuesta plantea una apertura mayor, inclusive devolviendo a los ciudadanos norteamericanos el derecho de viajar y gastar libremente en Cuba. Si es aprobado significaría un cambio fundamental en 48 años.
La libertad de viajes a Cuba significaría la posible ola de norteamericanos que algunos consideran podría llegar a 1 millón de turistas. Ello significaría apertura de líneas áreas y un cambio emocional-cultural muy importante. En esta temporada, Cuba ha aumentado a 2.3 millones de turistas de Europa y Canadá. Muy difícilmente podría acomodar otro millón en corto plazo. Hay quienes piensan que puede ser un elemento desestabilizador en lo cultural-ideológico. Algunas voces ya se han hecho sentir el temor de no estar preparados para un giro tan rápido en la Isla.
PE. ¿Que se espera hacia el futuro?
OB. El Presidente Obama tiene que sacar la relación con Cuba de la esfera política doméstica a ser tratada como corresponde, como un asunto de relaciones internacionales.
Desde hace 48 años la relación con Cuba estuvo atada a los problemas domésticos. No es fácil, pero las condiciones están cambiando. El primer paso lo ha dado desde esa política domestica, cambiando favorablemente las condiciones de viajes y relación de los cubano-americanos. A lo que se agrega comunicaciones y telefonía.
Creo que estamos frente a una partida de ajedrez. Obama hizo el primer movimiento. Fidel tiene razón de decir que no se tocó para nada en el anuncio sobre el embargo. El día jueves 16 el propio Fidel, en sus escritos en el diario Oficial, elogia a la delegación norteamericana que fue a Cuba y recientemente pidieron a Obama un cambio de política. Raúl Castro contestó con una disposición a dialogar y negociar todo. La Secretaria de Estado H. Clinton recibió favorablemente esa comunicación. Estos intercambios envían un mensaje no solo a Cuba sino a la Cumbre de la semana pasada en Trinidad-Tobago.
El discurso de Obama en Trinidad-Tobago desarmó a los líderes latinoamericanos que planteaban una postura de levantamiento inmediato del embargo. Claramente enfatizó que quiere un nuevo comienzo con Cuba, que 48 años de desconfianzas y amenazas llevarán su tiempo en desarmarse. Que mira hacia soluciones del futuro y no al pasado. No hubo críticas hacia Cuba. Casi al mismo tiempo la Secretaria de Estado aceptaba que la política del pasado había sido un error.
Creo que ambos gobiernos tienen que sentarse a negociar una nueva situación, que lleve a la normalidad las relaciones EE.UU/Cuba. Hay negociaciones posibles que ayudarían a abrir el camino a una mutua credibilidad.
Reiniciar las negociaciones migratorias, que fueron muy positivas en el pasado, y terminar con el privilegio de los cubanos frente a otros migrantes que llegan a EE.UU.
Cuando la derecha norteamericana y cubana habla de liberación de presos políticos cubanos. Estados Unidos tiene que reconocer que hay reabrir los juicios realizados sin garantías y liberar a los cinco cubanos que, por razones políticas, fueron condenados por más de una vida entera en EE.UU. y están en condiciones muy duras.
EE.UU. y Cuba se necesitan mutuamente. Debe concretarse un comercio abierto. Sin restricciones, mediante el cual ambos pueden salir favorecidos. Creo que estamos en un proceso irreversible donde el embargo deberá levantarse. Esperemos que la reciente movida de Obama sea un primer paso hacia esa meta. Según el asesor de Obama para esta Cumbre, J. Davidow "... El Presidente no lleva una propuesta a Trinidad, va a escuchar, discutir y negociar con sus colegas"...es un cambio de actitud. Hasta la OEA hace comentarios de una posible reintegración levantando las cláusulas de 1962 que sirvieron a la expulsión de Cuba. En los peores tiempos de tensión hubo comunicaciones, no públicas, entre ambos Gobiernos. Imagino que en estas circunstancias deben ser mucho más abundantes.
Creo que las Iglesias, tanto de EE.UU. como de América Latina, deben participar en este esfuerzo. En los 90's El Consejo Nacional de Iglesias de EE.UU. y el Consejo de Iglesias de Cuba jugaron un papel fundamental tendiendo puentes y abriendo puertas entre ambos países. Hoy seria necesario nuevamente plantearse esta tarea de apoyo en búsqueda de una reconciliación definitiva Vuelvo a repetir que creo que estamos en un proceso que es irreversible y donde hay muy buena disposición de ambas partes.+ (PE)
09/04/20 - PreNot 8082
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