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Subject: EL DECIA QUE UN ARTISTA ES MAS PELIGROSO QUE UN GUERRILLERO
Date: Fri, 16 Sep 2011 22:32:09 -0300
CHILE.- Sept de 1998- En mitad de la larga fila de cadáveres descubrí a Víctor. ¿Qué te han hecho para consumirte así en una semana? Tenía los ojos abiertos y parecía mirar al frente con intensidad y desafiante, a pesar de una herida en la cabeza y terribles moratones en la mejilla. Tenía el pecho acribillado y una herida abierta en el abdomen; las manos parecían colgarle de los brazos en extraño ángulo, como si tuviera rotas las muñecas; pero era Víctor, mi marido, mi amor. En ese momento también murió una parte de mí”. Así describe Joan Jara el encuentro con el cadáver de Víctor en el libro "Un canto inconcluso".
Victor Jara
Del Foro ABC.es, 12 de septiembre de 2003: "Para propios y extraños la noticia del salvaje asesinato del folclorista Victor Jara constituyó el primero de una interminable cadena de golpes.
Jara, conocido a nivel internacional, era miembro del partido comunista y durante años, incluso antes de la llegada del gobierno de Salvador Allende, se había dedicado a realizar investigaciones en torno del folclor de Chile y de América Latina. Movido por su estusiasmo ideológico compuso una gran cantidad de canciones en las cuales narraba las luchas de los trabajadores de su pueblo.
Ese fue su delito.
Detenido por los militares fue conducido a los sótanos del ministerio de la defensa donde se le obligó a desnudarse y a escuchar, de labios de los oficiales, una interminable serie de preguntas en torno a un supuesto acopio de armas y planes para asesinar a altos jefes del Ejército.
Una y otra vez jara negó las acusaciones y fue entonces cuando los oficiales decidieron utilizar un método diferente: conducido, siempre desnudo, pese al intenso frío, a otra área de los sótanos, se le hizo permanecer parado en el centro de un grupo de soldados armados con garrotes.
La orden fue dada y estos se estrellaron, inmisericordes, contra el cuerpo del cantante que sangraba profusamente. Cerca de dos horas duró aquel espectáculo que era contemplado por los oficiales y coreado por las risotadas de la soldadesca."
Tomado de las páginas 182 y 183 del libro Chile: "Una Traicion al futuro", del periodista mexicano León Roberto García.
Publicado en el foro: ABC.es
Por: Aurora Mendoza, el 12-09-2003 -------
Joan Jara
Las Ultimas Horas de Victor Jara
Del Foro ABC.es, 12 de septiembre de 2003: Al cumplirse 25 años de su muerte, es oportuno revisar los momentos finales del famoso músico chileno, cuyo legado se confunde con el mito que se ha formado alrededor de su figura.
Por Laura Landaeta y Sonia Lira. Chile: Qué pasa.
Víctor Jara reúne todos los requisitos para convertirse en una leyenda.
Durante su corta vida fue seminarista, soldado y un artista comprometido.
Pero la razón última de la creación del mito se encuentra en su temprana muerte, a los 40 años, en los primeros días del régimen militar. En torno a su fallecimiento se ha tejido una serie de historias, algunas falsas, otras verdaderas, que han acompañado el legado artístico del autor de Te recuerdo Amanda y otros tantos clásicos de la canción popular chilena.
Entre los relatos que surgieron luego de su muerte figuran la amputación de sus manos por su celadores y que habría compuesto una de sus canciones más bellas en una sala del Estadio Chile, donde los detenidos eran torturados, para levantar la moral de sus compañeros. Ambas historias han probado ser inciertas, de ahí que sea oportuno, al conmemorarse los 25 años de su asesinato, repasar las últimas horas de vida del artista y entender cuáles fueron los ingredientes que contribuyeron a la construcción de la leyenda.
El dramaturgo Alejandro Sieveking se reunió por última vez con Jara el 8 de septiembre de 1973. Hasta la casa del hombre de teatro también llegó el escritor Carlos Cerda, quien se encontraba preparando junto al músico un acto en el Estadio Nacional, con motivo del aniversario de las Juventudes Comunistas. "Esa tarde no hablamos sobre la posibilidad de un golpe, pero al momento de retirarse, Víctor se encontró con mi hermano en la escalera y le dijo que se alegraba de saber que teníamos un lugar donde irnos en caso de que sucediera algo malo", recuerda Sieveking.
A las 8. 30 horas del martes 11, con las primeras informaciones sobre el alzamiento militar, Jara llamó por teléfono al departamento de extensión musical de la Universidad Técnica, donde trabajaba, para saber a qué atenerse. Precisamente ese día estaba programado que el Presidente Allende asistiera al campus universitario durante un acto en apoyo a su gobierno. El compositor llegó al lugar junto a su guitarra, la que extravió al día siguiente, el mediodía del miércoles 12, cuando un contingente militar ingresó al recinto y obligó a sus ocupantes a tenderse boca abajo con las manos en la nuca. Los prisioneros fueron trasladados cinco horas después al Estadio Chile. Según antecedentes recogidos entre ex detenidos, lo más probable es que las primeras horas de detención de Jara hayan transcurrido en el anonimato y que sólo haya sido identificado en una segunda ronda de reconocimiento.
En el Estadio Chile, convertido en campo de prisioneros, existía la orden de separar a los presos corrientes de los "públicos", entre los que se encontraba el ex director de prisiones, Litré Quiroga, y el médico de Allende, Danilo Bartulin. "En otro grupo venía Víctor Jara y el comandante de campo, al verlo, dio la orden de que lo separara porque era un extremista muy peligroso. Lo pusieron a mi lado, separado al igual que yo del resto de los presos del Estadio Chile. Víctor ya venía con algunos golpes visibles en la cara", dijo Bartulin a Qué Pasa desde Madrid.
El médico y Jara pasaron mucho tiempo juntos en su calidad de detenidos especiales. Bartulin es, de hecho, el último prisionero que vio con vida al cantante antes de que cerraran el Estadio Chile y trasladaran a los demás presos al Estadio Nacional. El facultativo, el músico y Quiroga fueron enviados abajo, al sector de camarines y baños, acondicionados como sala de torturas. "A mí me colocaron en un camarín junto a Víctor.
Ahí los dos nos dijimos: 'aquí nos van a matar'. Ya no quedaba ningún preso en ese estadio, aparte de nosotros dos y Quiroga. Pero de pronto, una voz que viene de arriba me llama doctor venga rápido, y Víctor me dice te están llamando. Esas fueron sus últimas palabras que escuché", agrega Bartulin.
Luego de este episodio narrado por el médico ya no hay testigos civiles que puedan acreditar cuál fue la suerte corrida por el músico. En efecto, el día 15 de septiembre, Bartulin fue subido a un camión y salvó milagrosamente con vida. Jara y Quiroga, en cambio, aparecerían muertos en una calle unos días después.
Las horas transcurridas entre el 15 y el 16 de septiembre -fecha en que aparece acreditada la muerte del cantante- pertenecen al terreno de la especulación y fueron campo fértil para que se tejieran historias en torno a su figura. Por ejemplo, la noticia de su detención se propagó rápidamente a otros lugares de concentración, como recuerda el periodista y cineasta Douglas Hübner: "Estuve detenido en la Escuela Militar y ya se hablaba sobre la muerte de Víctor. Durante los dos días que alcancé a estar libre en Santiago -me soltaron el 15 o el 16- me contaron que lo habían asesinado en el Estadio Chile y que le habían cortado las manos.
Luego, estando detenido en el regimiento de Copiapó, un muchacho andaba con un papel que presumía era su última canción".
Otro de los relatos que afloraron tras el golpe es que el ánimo del artista se mantuvo siempre en alto, contagiando con optimismo al resto de sus compañeros. Sin embargo, Bartulin asegura que se trata de una exageración: "Nadie animaba a nadie, todos estábamos muy preocupados y esperando lo peor. Y nosotros dos, al ser seleccionados, estábamos más cerca de lo peor. De entonar canciones nada ni una sílaba, ni en voz baja".
Asimismo, la arraigada creencia de que le cortaron las manos fue desmentida por la propia viuda del cantante, Joan Turner, en su libro Un canto inconcluso: "En la mitad de la larga fila de cadáveres descubrí a Víctor (... ). Tenía el pecho acribillado y una herida abierta en el abdomen; las manos parecían colgarle en extraño ángulo, como si tuviera rotas las muñecas, pero era Víctor, mi marido, mi amor".
El cadáver fue descubierto casualmente por el actor Julio Jung el 17 de septiembre, según relató por primera vez al programa de TVN Informe Especial. Preocupado por la desaparición de su amigo Eduardo "Coco" Paredes -director de Investigaciones en la Unidad Popular-, el intérprete y actual concejal por Providencia partió a la morgue con la esperanza de que le permitieran ingresar al lugar.
"Entré por el patio de las ambulancias, entonces, uno de los carabineros me reconoció y me permitió entrar. Estaba repleto de cuerpos y de funcionarios de identificación poniéndoles tarjetas. En medio de 100 cadáveres reconocí el de Litré Quiroga y encima de una mesa de piedra descubrí a Víctor. Estaba desnudo y nunca en mi vida veré a una persona con un mayor número de balas encima. Sus manos no estaban cortadas, lo que no quiere decir que no estuvieran aplastadas o golpeadas", recuerda el actor. Qué sucedió exactamente durante las horas en que Jara quedó como prisionero exclusivo del Estadio Chile, sigue siendo un misterio. De acuerdo al testimonio dado por Bartulin y otros sobrevivientes, lo más probable es que fue el teniente de seguridad de ese lugar de detención -un oficial alto, rubio, al que le decían "El Príncipe", según algunos testigos- quien selló la suerte del cantante por orden expresa del comandante del campo de prisioneros.
Su muerte, en todo caso, no hizo sino extender su fama, que incluso traspasó las fronteras. Hoy, Víctor Jara es una figura reconocida internacionalmente y ya se han anunciado homenajes en Francia, España, Alemania e Inglaterra. Como para confirmar su prestigio, la actriz británica Emma Thompson está empeñada en producir un filme sobre la vida del músico chileno, para cuyo papel se ha mencionado al actor Antonio Banderas.
Autor original: Laura Landaeta y Sonia Lira. Chile: "Que Pasa".
Publicado en el foro: ABC.es
Por: Aurora Mendoza, el 12-09-2003
http://www.luisvargas.5u.com/6politica/victor_jara.html
