miércoles, 13 de junio de 2012

CUMBRE RÍO 20 DE LA RED "EN DEFENSA DE LA HUMANIDAD" mensaje venezolano y cubano

 


Asunto: MENSAJE ANTE LA CUMBRE RÍO 20 DE LA RED “EN DEFENSA DE LA HUMANIDAD”

 

Queridos Amigos

 

Próximamente se iniciarán los trabajos de la Conferencia de Naciones

Unidas sobre Desarrollo Sustentable, más conocida como Cumbre Río+20,

que tendrá lugar en Río de Janeiro, Brasil, del 20 al 22 de este mes.

Consecuentes con la defensa de las causas justas y urgentes de nuestros

pueblos, los capítulos venezolano y cubano de la Red de Redes de

Intelectuales, Artistas y Luchadores Sociales en Defensa de la

Humanidad, queremos someter a su consideración el siguiente Mensaje que

sería dado a conocer en el transcurso de la Cumbre de los Pueblos, la

cual sesionará durante los días comprendidos entre el 15 y el 23 de

junio, coincidiendo con la Conferencia de los gobiernos. Nos parece que

es sumamente importante y un deber ineludible que nuestra Red se

pronuncie ante un tema vital para la Humanidad, de manera que si

logramos un texto de consenso proponemos presentarlo en nombre de toda

la Red.

 

Agradecemos el apoyo con que siempre hemos contado y les solicitamos

conocer si se adhieren a esta iniciativa y también que nos hagan saber

si consideran realizar algún aporte al texto.

 

Como nos restan pocos días para este momento tan importante estaríamos

muy agradecidos si pudiéramos recibir cuanto antes sus invaluables

criterios.

 

Los correos que hemos habilitado para recibir sus adhesiones  y

opiniones son:

*

<mailto:salvemoslahumanidad@gmail.com>*

 

    * salvemoslahumanidad@gmail.com

    * humanidadenred@gmail.com

    * endefensadelahumanidad@gmail.com

 

 

Un abrazo,

 

Ariana

 

 

 

 

MENSAJE ANTE LA CUMBRE RÍO+20  DE LA RED “EN DEFENSA DE LA HUMANIDAD”

 

 “La solución no puede ser impedir el desarrollo a los que más lo necesitan. Lo

real es que todo lo que contribuya hoy al subdesarrollo y la pobreza constituye

una violación flagrante de la ecología. (…) Si se quiere salvar a la humanidad

de esa autodestrucción, hay que distribuir mejor las riquezas y tecnologías

disponibles en el planeta. Menos lujo y menos despilfarro en unos pocos países

para que haya menos pobreza y menos hambre en gran parte de la Tierra. (…) Cesen

los egoísmos, cesen los hegemonismos, cesen la insensibilidad, la

irresponsabilidad y el engaño.”

Fidel Castro, Río de Janeiro, 1992.

 

Ahora, veinte años después, inspirados en aquellas palabras de Fidel, en el

reciente encuentro que sostuvo con un grupo de fundadores de nuestra red y en su

llamado a seguir luchando sin descanso por salvar la especie humana, conscientes

de que el egoísmo y la ceguera de los poderosos seguirán bloqueando toda

iniciativa asociada a las verdaderas soluciones, circulamos este MENSAJE ANTE LA

CUMBRE RÍO+20 a los demás capítulos y miembros de la Red  En defensa de la

humanidad y a otros movimientos sociales, organizaciones, redes y personas que

no están dispuestos a aceptar el modelo suicida que se ha impuesto al mundo ni

el destino fatal de nuestra extinción.

 

Debemos exigir por todos los medios a nuestro alcance y plantear ante el sistema

de organismos internacionales de las Naciones Unidas:

 

1.        Que la Cumbre RÍO+20 parta del análisis del estado de cumplimiento de los

compromisos asumidos en la Agenda 21 y los Principios acordados en la Cumbre

Mundial sobre Medio Ambiente y Desarrollo de Río de 1992 y reiterados en la

Conferencia de Johannesburgo.

 

2.        Rechazar la pretensión de sustituir el enfoque en torno al cumplimiento de

los principios del  desarrollo sostenible y de los objetivos de desarrollo del

Milenio por las nuevas tesis planteadas en torno a la “economía verde”.

Redefinir este concepto con un enfoque multisectorial y multidimensional.

 

3.        Condenar la privatización de los recursos naturales y toda forma de

mercantilización de la naturaleza.

 

4.        Reconocer la urgencia de colocar la defensa de  los derechos de nuestra

especie y de la naturaleza como eje central de las negociaciones e instrumentos

normativos internacionales en detrimento de los derechos del capital.

 

5.        Que las autoridades públicas asuman  como obligación principal aplicar un

enfoque  basado en los derechos de sustentabilidad, bienestar y progreso de la

sociedad, y se reivindique  la responsabilidad inexcusable de los gobiernos de

proporcionar servicios esenciales para la vida a la totalidad de los ciudadanos.

Que cambien radicalmente los indicadores de desarrollo y progreso para que

tengan en cuenta los costos ambientales, la equidad social  y el desarrollo humano.

 

6.         Que se reconozca como imprescindible la transformación de los

patrones de

producción, consumo y distribución del ingreso. La búsqueda de acumulación

creciente de ganancias y la orientación de la producción en función de la

demanda solvente y no de la necesidad social, propia del sistema capitalista, no

puede, ni podrá nunca, generar igualdad, eliminar la pobreza, ni garantizar un

desarrollo armónico con la conservación del medio ambiente. La urgencia real de

migrar hacia tecnologías no contaminantes no puede reducir los análisis a

aspectos meramente tecnológicos

 

7.        Que el principio de responsabilidades comunes pero diferenciadas,

reconocido

en la Declaración de Río, se traduzca en reales mecanismos de financiación,

flexibilidades y políticas de acceso a la tecnología y el conocimiento para los

países más necesitados y en obligaciones ineludibles para los países

industrializados.

 

8.        Denunciar el cínico “discurso limpio” de las potencias del Norte que

intentan

hoy inculpar a los países del Sur mientras ocultan su responsabilidad histórica

y presente en el atraso de las tecnologías de esos países y en la deformación de

sus economías y favorecen las operaciones “sucias” de las transnacionales en el

Sur. Las marcas  y patentes “verdes”  deben ser denunciadas como un renovado y

peligroso mecanismo de reafirmación de la dominación hacia todos los países

tecnológicamente dependientes.

 

9.        Que la Cumbre se pronuncie por la imprescindible evaluación

precautoria de

las tecnologías según sus impactos sociales y ambientales. Debe gestarse con

urgencia una Convención mundial para el control de tecnologías nuevas y

emergentes,  basada en el principio de precaución y la evaluación participativa.

 

10.        Denunciar la llamada obsolescencia programada y que se favorezcan las

tecnologías que atiendan a la máxima vida útil de los productos, beneficien la

estandarización, la reparación,  el reciclaje y un mínimo de desechos, de manera

que se satisfagan las necesidades humanas con el menor costo ambiental.

 

11.        Condenar el control del comercio mundial por las transnacionales y el

papel

de la Organización Mundial del Comercio (OMC) en la imposición de acuerdos que

legitiman la desigualdad y la exclusión e impiden el ejercicio de políticas

públicas soberanas. Promover acciones concretas para lograr un intercambio

comercial más justo, y en armonía con los requerimientos medioambientales.

 

12.        Acordar medidas concretas para frenar la  volatilidad de los precios

de los

alimentos y la especulación en los mercados de productos básicos, como medio

indispensable para combatir el hambre y la pobreza.

 

13.        Denunciar la compra masiva de tierras en países del Sur por parte de

potencias extranjeras  y multinacionales para explotar sus recursos naturales o

dedicarlos a proyectos que comprometen el  medio ambiente o el equilibrio de sus

ecosistemas.

 

14.        Que se reconozcan las guerras, las políticas imperiales y la carrera

armamentista como las mayores agresiones al medio ambiente y a la preservación

de la especie humana, tanto por sus consecuencias directas como por los gastos

incalculables que provocan. Estos recursos bien podrían utilizarse para

solventar los principales retos sociales y medioambientales que enfrenta la

humanidad. Que se denuncie el carácter suicida de los arsenales nucleares y se

demande su eliminación y prohibición absoluta.

 

15.        Promover un convenio marco para la responsabilidad ambiental y social

de las

empresas y legislaciones nacionales que condenen prácticas nocivas y abusivas de

las mismas, teniendo  en cuenta el carácter transnacional de sus operaciones

 

16.        Promover acciones de control sobre la publicidad comercial, la

incitación al

consumo desmedido y la creación de falsas necesidades, sobre todo cuando se

dirigen a niños y jóvenes, y establecer en cambio políticas de impulso a la

publicidad de bien público, que constituya  fuente de información y prácticas

sustentables.

 

 

17.        Que se realice un firme pronunciamiento en favor de orientar  la

educación y

la ciencia en beneficio del desarrollo humano y no en función del mercado,

basada en una nueva ética del consumo que, sin sacrificar lo esencial de las

satisfacciones materiales, rechace los productos fruto de prácticas

ecológicamente agresivas o del trabajo esclavo y de otras formas de explotación. 

 

18.        Promover la revisión y modificación del sistema de propiedad intelectual

vigente, a la luz de las negociaciones medioambientales, la agenda de lucha

contra el cambio climático y los derechos humanos, de modo que pueda facilitarse

la transferencia de tecnologías y conocimientos prácticos ambientalmente sanos,

o el acceso a ellos.

 

19.        Exigir a la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) como

organización del sistema de Naciones Unidas, que enfrente la urgente necesidad

de un cambio de paradigma en torno a la investigación científica internacional y

el conocimiento, de manera que, dejando a un lado  los mecanismos de mercado,

fomente la necesaria colaboración, la investigación coordinada y la difusión y

aplicación de sus resultados a gran escala.  Que se implementen por esta

organización los mecanismos  necesarios  para propiciar en el menor tiempo

posible una transición energética efectiva y las medidas de mitigación del

cambio climático.

 

20.        Que se promueva una reevaluación integral del sistema de gobernanza

ambiental existente, que ha demostrado ser incapaz de frenar la catástrofe

ecológica, y se sienten las bases de uno nuevo, inclusivo, auténticamente

democrático y participativo, que se dirija a las causas profundas de la crisis,

y sea capaz de promover soluciones reales a estos problemas para las actuales y

futuras generaciones.