miércoles, 12 de febrero de 2014

Oráculo Noceda el puntano de San Luis Argentina escribe a Marta Frómeta Rueda de Moa, Holguín, CUBA Chaubloqueo Toto Eladio González Museo Che Guevara Fukuyama




Identidad

 


 
 
                                              Por qué
 
                                                            Te escribo, Marta Frometa
porque conozco una parte de tu Isla
y también un trocito de ti
Si no te escribiera de seguro el destinatario sería otro
tal vez la parte mía que quedó allí
pero aunque no pretendo que se me olvide
a ella ya la conozco

A ti todavía no
Si te digo que eres la 81 y la 92
No es porque sean los números de alguna calle
Sino que es el número de la hoja con que figuras
en el árbol del Toto
en el Árbol de la Vida

Si quieres, cúlpalo
Pero considera que si fue así es por Uds.
Que ponen el material de los eslabones de esta cadena

O si quieres, un fueguito
o unos cuantos
Confieso haber prendido el mío también
Un 28 de enero
Y hasta el día de hoy
Aún a miles de kilómetros
Sucede que no se ha apagado
como prueba que los pequeños milagros
también suceden
como que el Toto y su tribu
se lleguen por ahí prontito

Porque tus palabras llegaron hasta quien está en la cárcel
Y hasta una adolescente
y presiento que a muchos más
En época de la dictadura yo debí haber escrito
también a compañeros y amigos tras las rejas
pero sabía que las cartas eran revisadas
y más que un documento con palabras de aliento
habría sido motivo para nuestra persecución

Te escribo Marta Frometa
porque quiero que le transmitas a los compañeros
que la Historia Oficial tuya
es la No Oficial nuestra
Que nuestro presente puede ser tu futuro
En nuestro presente la seducción es el arma
para DOMINAR
La Nada no es la ausencia o la carencia del Todo
sino la imagen virtual de él

¡Oye, qué complicado eres compañero!
-pensarás-
Pero es simple, mira

Con la seducción te crean la ilusión (falsa)
De que puedes tenerlo Todo
Pero en realidad es un mundo de plástico
Frágil y descartable  

                                         Que compras también con tarjetas de plástico
Y cuando menos te lo piensas
te has llenado de basura y te has endeudado
de por vida
Y con gran sorpresa te encuentras trabajando para ellos

Los dioses son benévolos a pesar de todo
Nos proveen de televisores, videos y cuanto chiche electrónico
te puedas imaginar
para tu consumo y el de todos
Y con estos espejos mágicos sigues consumiendo

Los libretistas ya no escriben más telenovelas
las toman de la realidad
el Reality Show

Tú puedes ser el protagonista de tu propia telenovela
Puedes contar o representar lo que quieras
casos de corrupción, estafas, violaciones, crímenes,
puedes discutir con el asesino si su móvil era el dinero
o solamente pasional
o por diversión
o político
En fin, no es para aterrarse
Pero es el precio de vivir bajo el mandato de los dioses del consumo
Se dice que después de la caída del muro

La polaridad entre Este y Oeste se terminó
Es la muerte de las ideologías
Y la historia terminó
Todas tonteras que dice un tal Fukuyama

Yo diría que en la Historia Oficial
siguen existiendo Dios y el Diablo,
tal vez por eso el Papa los visitará en enero

Pero en la historia real, la No oficial
lo que existe son los dioses mitológicos,
el Olimpo está entre nosotros
los dioses son generosos,
te ofrecen de todo para consumir
en sus benditos santuarios
en los Maxi, Mega, Super
hasta te envían por correo las tan preciadas tarjetas de plástico
para consumir más plástico
(este año nomás me ofrecieron ocho)
y puedes consumir de todo a cambio de dólares
autos, vestido, comida, sexo,
filosofía, religión, pasiones,
hobbies, corrupción, crímenes, justicia,
salud, educación
todo por la módica deuda para toda la vida,
lo que queramos,
y nuestro abismo es cada vez más grande
y tal como en la mitología
los dioses se divierten haciéndonos partícipes
de sus rencores, celos y batallas
Zeus, Hera, Vulcano, y toda la familia
                                 intentan dirigir nuestros destinos                                                     

                                     encadenándonos al consumo desenfrenado

Te escribo Marta Frometa
No para que te horrorices
Simplemente dile a los tuyos que has tenido una visión
El Oráculo te ha mostrado lo que podría ser tu futuro
a través de mi presente

Mientras escribo un nuevo personaje del espejo mágico
la  cámara secreta,
un artilugio electrónico utilizado para mostrarnos
el horror diario en forma de show,
me ofrece la imagen de una abuela
cerrando el trato de una venta
sentada cómodamente en un restaurante
frente al portador de la cámara
(un supuesto traficante de droga)
el precio fijado y regateado:
Mil dólares y un kilo de cocaína
El objeto: su nieta de cinco años
que a su lado come pacíficamente una chuleta con papas fritas
El padre de la niña espera tranquilamente dentro del auto
que la operación llegue a buen término
para el bien de todos

Pero también se ve otro caso
El de otra abuela que habiéndose quedado sin nietos
y sin hijos
reúne bajo la autopista de Buenos Aires
otros nietos e hijos reunidos de la calle y la miseria
los abriga, los alimenta y les brinda su amor
a sangre y pulmón
para demostrarnos que los dioses del Olimpo también
algunas veces suelen perder
ya que la Solidaridad crea sus propios anticuerpos.

Un fueguito y otro fueguito

pueden ser
once fueguitos
once mil
once millones
y otros tantos más
a partir de un 28 de enero.