Gracias por volar con WordPress.com Tomado de la Pupila Insomne. "Sueñan los teóricos y agoreros de la política imperial que la Revolución, que no pudo ser destruida con tan pérfidos y criminales procedimientos, podría serlo mediante métodos seductores como el que han dado en bautizar como "política de contactos pueblo a pueblo". Pues bien: estamos dispuestos a aceptar el reto, pero jueguen limpio, cesen en sus condicionamientos, eliminen la Ley asesina de Ajuste Cubano, la Ley Torricelli, la Ley Helms-Burton, las decenas de enmiendas legales aunque inmorales, injertadas oportunistamente en su legislación; pongan fin por completo al bloqueo genocida y la guerra económica; respeten el derecho constitucional de sus estudiantes, trabajadores, intelectuales, hombres de negocio y ciudadanos en general a visitar nuestro país, hacer negocios, comerciar e invertir, si lo desean, sin limitaciones ni miedos ridículos, del mismo modo que nosotros permitimos a nuestros ciudadanos viajar libremente e incluso residir en Estados Unidos, y veremos si por esas vías pueden destruir la Revolución cubana, que es en definitiva el objetivo que se proponen. "Sin ánimos de perturbar los dulces sueños de los que esto último piensan, cumplo el cortés deber de advertirles que la Revolución cubana no podrá ser destruida ni por la fuerza ni por la seducción. "Martí dijo que trincheras de ideas valen más que trincheras de piedra, y compartimos con él ese pensamiento, pero nunca dijo que aquellas fuesen innecesarias. Cuba está hoy defendida por una doble trinchera de piedra y de ideas: una contra la fuerza bruta, constituida por la disposición de un pueblo a luchar hasta las últimas consecuencias, de forma que de nada valdrían las llamadas armas inteligentes ni los más sofisticados medios que emergen de los avanzados centros productores de instrumentos de muerte que poseen nuestros potenciales agresores. Pero lo está también por una gigantesca trinchera de sentimientos e ideas contra la cual se estrellará todo el arsenal de mentiras, demagogia e hipocresía con las que el imperialismo pretende engañar al mundo. Con ideas verdaderamente justas y una sólida cultura general y política, nuestro pueblo puede igualmente defender su identidad y protegerse de las seudoculturas que emanan de las sociedades de consumo deshumanizadas, egoístas e irresponsables. En esa lid también podemos vencer y venceremos. "La historia está igualmente de nuestro lado, porque el orden económico y político injusto y globalizado impuesto al mundo es insostenible, y más temprano que tarde se derrumbará. La naturaleza no podrá resistir la agresión a que están sometidos los recursos naturales y el medio ambiente. Los miles de millones de pobres que en número creciente habitan este planeta se harán ingobernables. No habrá leyes de inmigración ni líneas amuralladas que puedan contenerlos. La propia civilización estará amenazada. Los políticos, por soberbios e incapaces que sean, tendrán que comprender que en nuestra época y en nuestro planeta la paz y la cooperación estrecha entre los pueblos es la única alternativa posible." (Palabras de Fidel Castro el 26 de julio del año 2000, en un discurso en la ciudad de Santa Clara) |