sábado, 23 de julio de 2016

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Cuba de luto Marlene Caboverde de Radio Jaruco mi regalo a la Polilla Rosa Baez

 

 

Polilla por siempre   Por Marlene Caboverde Caballero

 

Este 26 de abril la comunidad virtual perdió a uno de sus estrategas más dignos, el ejército de izquierda, a un soldado imprescindible y yo, a una hermana. Era de Cuba, y era una mujer extraordinaria. Se llamaba Rosa Cristina Báez Valdés, pero trascendió como La polilla cubana, el nombre que dio a su blog en Internet y por el que la conocimos y reconocimos miles de personas en el mundo.

Fue a fines del año 2008 cuando me topé con su nombre, su historia y su trinchera. En aquellos momentos me había sumado desde la emisora Radio Jaruco al jurado de millones que intentaba liberar a los Cinco antiterroristas, víctimas de la injusticia, el silencio y la cárcel en Estados Unidos.

En el mundo del periodismo, más allá del papel, la tinta y el éter existe un universo donde se entraman millones de brazos y de voces. Y es ahí donde el desafío es opacar la nimiedad que intenta aplastar lo más auténtico del ser humano. Esa fue la primera lección de la Polilla cubana, una bibliotecaria devenida periodista.

Desde la distancia me mostró los caminos y las herramientas para construir desde la Internet más efectividad, una pequeñísima parte de la verdad de Cuba. Mi prioridad en aquellos momentos era la libertad de Gerardo, Antonio, Ramón, Fernando y René, a quienes ella solía llamarles, "mis muchachos". Y no era de la boca para afuera. Los amó y les sirvió de corazón.

Fue la Polilla cubana quien me abrió todas las puertas y me indicó cada resquicio para distinguir en su exacta dimensión la espiritualidad de los cinco y sus familias. Por ella abracé a Alicia Jrapko, Bill Hacwell, Graciela Ramírez, Paco y Rosa Bernal y Wafica Ibrahim, enamorados también de la causa, de la paz y de Cuba.

Recuerdo, que nos escribíamos casi a diario, ella corregía mis trabajos o más bien, los bendecía con sus luces. Me asombró cómo solita, era a la vez su propio equipo de redacción, edición, diseño y montaje de las más atractivas, novedosas e impactantes publicaciones.

Además de publicar artículos propios en su blog y otros espacios digitales como Cuba Coraje, replicaba el quehacer de importantes intelectuales de Venezuela, Argentina, España, el Líbano y otras naciones del mundo en la plataforma Hermes que ayudó a dirigir y que aúna a decenas de periodistas de varias latitudes.

Eso y más lo hacía en medio de una concurrida soledad, desde una habitación en su casa de la Villa Panamericana. Tuve la oportunidad de ver aquella "cuevita", como solía decirle. En las paredes asoman las imágenes donde se le ve junto a sus amigos más entrañables: Silvio Rodríguez y Vicente Feliú. Y sobre la mesita, muy cerca de la "compu", un portarretrato en el que sonríen Gerardo y Adriana, juntos después del 17 de diciembre.

Era también poeta, a veces jardinera, siempre la ferviente admiradora de Mafalda y de manera invariable la más leal cómplice de Fidel y de sus ideas.

Para la Polilla el momento más importante era ahora, y esa sed insaciable de decir y de hacer arrasó su salud. Creía firmemente que era imperdonable perder un minuto y quien posterga pierde trozos de la vida. Así que pasó por alto el sueño, el descanso la alimentación.

Un día dejó de andar por sí misma y su precaria condición física le llevó al hospital y a la dependencia casi total de su compañera quien la cuidó hasta los últimos instantes.

Pero así mismo, continuó trabajando y hasta fue al hasta el Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos encuentro con los Cinco en febrero del pasado año, cuando las dos pudimos casi a la vez, abrazar a Gerardo y Adriana, y llevarnos dedicado por él el libro, El humor desde mi pluma.

Estoy segura que somos muchos quienes tenemos roto el corazón y triste el alma por su ausencia. "La Polilla murió", decía el mensaje que recibí en la mañana del 27 de abril. Eran tres palabras y un error que ya ella había remediado de antemano.

Y es que, Rosa Cristina Báez Valdés ilumina esa comunidad infinita y viva que es el mundo de las páginas digitales y las redes sociales.

Allí continuaremos encontrándola flotando libre en un cielo, que nos advirtió, es de todos y es deber defenderlo con astucia, pero con amor.

 

informó el Museo " ERNESTO CHE GUEVARA " de Caballito, CABA

calle Rojas 129, esq. Yerbal, Buenos Aires  (AAC 1405) Argentina

Visitar lunes a viernes de 10 a 19 hs. (corrido) – entrada libre y gratuita

Escuela de Solidaridad con Cuba " CHAUBLOQUEO "

Registro donantes voluntarios de Células Madre  (INCUCAI)

Coordinador Mesa Vecinal Participativa en Seguridad de Caballito

Tel.  4 903 3285   Irene Rosa Perpiñal  -  Eladio González (Toto) 

email -   museocheguevara@fibertel.com.ar

Blog museo    http://museocheguevaraargentina.blogspot.com/

Blog accidentes evitables    http://nomuertesevitables.blogspot.com   protege a hijos y nietos

Leé el libro Cuba Existe, es Socialista y No está en Coma del Arq.

Rodolfo Livingston en   http://estudiolivingston.com.ar/libros/cubaexiste.php  y emocionate.

Bastión de la diaria batalla entre el "David argentino" y el "Goliath  extranjero".   En la inusual instalación Ernesto "Che" Guevara esgrime lo Nacional contra la colonización lúdico-cultural materializada en el juguete, elemento psicoformativo de enorme valor.   El rosarino propone revalorización de símbolos patrios, potenciación de voluntarismo solidario, información y Registro de Donantes Voluntarios de Células Madre. (INCUCAI).   Un lugar para creer y además crecer.  calle Rojas 129, esq. Yerbal en CABA-llito   de Lunes a Viernes de 10 a 19 hs. corrido.  telef. 4 903 3285   -  Eladio González - Irene Perpiñal directores   museocheguevara@fibertel.com.ar

Centro Oftalmológico de Córdoba: de la utopía al asombro | Cubadebate

en Sao Paulo Brasil buscá    http://museuvirtualcheguevara.blogspot.com.br/




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