Febrero de 1999 – diario CLARIN
NOSTALGIAS DE TORDOS Y NIDOS – por Alejandro Margulis
Durante 8 años viví en la calle Nicasio Oroño de Caballito y ya es un hecho que me voy. El amor se ha roto
y con él la perspectiva d seguir construyendo ahí mi porvenir.
Quizás mis hijos puedan disfrutar la calle como la disfruté yo; descubrir por ejemplo que en verano los tordos
siguen haciendo sus nidos en los árboles del cielo. Haciendo esquina con Avellaneda, cerca de la cancha de
Ferro, un coleccionista de Caballito bajó sus recuerdos a la cochera y los muestra como “Museo d Che Guevara”.
A 10 cuadras, pasando Gaona, vive un vicepresidente, Carlos Ruckauf.
Ultimame se me dio por buscar la genealogía de la calle. Encontré un librito verde con la vida y obra del hombre
que le dio su identidad. La historia no lo recuerda mucho mas que en la cuadra que fue la de mi casa y en un par
de calles y avenidas de Sta Fe y Rosario. Nicasio Oroño fue un político fascinado con Roca que le caía simpático
a Sarmiento; consideraba poco menos que imposible educar, sin antes poblar, un modo fino de decir, primero rajen
a los indios, después denle instrucción al soberano. Muy raro me resulta descubrir que viví 8 años construyendo
ideales montado sobre un nombre con origen tan cruel. Y, sin embargo, ahora que me voy siento pena por tener
que prescindir para siempre de la cuadra donde vi a los tordos hacer sus nidos.
Pero no me hagan caso: la nostalgia es amiga d las frases sensibleras.
Alejandro Margulis escritor
