Hace
unos cuantos años anuncié como reconocimiento a la compañera Marta Speroni
(autora del reportaje a nuestra querida y admirada Edith Glaif) le entregaría
un Premio a su trayectoria de lucha contra el bloqueo y la libertad de los
cinco héroes cubanos. Consistía en un bello micrófono de loza azul cuyo
valor consistía en que nos había sido entregado por Martín Arranz Fuentes,
locutor de CMKO Radio Angulo en Holguín en el Partido Comunista de esa
Provincia junto a la partitura del “Tango a los desaparecidos argentinos”
escrito por Carlos Celaá, cubano Presidente de la Peña del Tango de
Holguín. El trabajo de Marta Speroni en FM Flores lo merecía
sobradamente. Llegué al encuentro de solidaridad con Cuba donde se
transmitiría en video directo un saludo de uno de los Cinco Héroes recién
liberado a los compañeros argentinos. Iba entusiasmado, consideraba que
la entrega del MICRÓFONO HOLGUINERO sería un agregado pequeño, pero que
agregaría emoción y contenido a la convocatoria. Pero al ingresar al hall
del teatro donde comenzaría la actividad me interceptó un COMPAÑERO de la “alta
dirigencia” de Mascuba para decirme que NO PODIA ENTREGAR NADA EN ESA
ACTIVIDAD. Con mi primorosa caja que contenía el Micrófono Azul de
Radio Angulo Holguín y la cola entre las piernas ingresé a la sala
decepcionado. Disfruté como todos emocionado de lo que ocurrió allí y
afortunadamente a pesar de que Marta no asistió, pude encomendarle a una amiga
personal de ellai le hiciera llegar su merecido PREMIO.
Eladio González - toto
Edith
Glaif HLVS
Este mediodía
falleció nuestra compañera Edith Glaif. Nos honró con su militancia y trabajo a
destajo en la Liga desde los `80 aportando así toda la trayectoria militante
que desde muy jóven forjó al calor de la solidaridad internacional y
particularmente con los pueblos de la Patria Grande en años de clandestinidad y
persecución política.
Camarada Edith, te
llevaremos con nosotrxs HASTA LA VICTORIA!
Les dejamos una
entrevista en la que ella cuenta en primera persona un poco lo que fue su vida
dedicada a la construcción dela hermandad entre los pueblos y la PAZ en el
continente.
Entrevista a
Edith Glaif, de la LADH,
por Marta
Speroni (Rompiendo Muros)
El pasado 11 de
noviembre impusieron la Medalla de la Amistad por su labor constante en la
solidaridad con Cuba desde nuestro país a Amalia Edith Glaif, militante de la
Liga Argentina por los Derechos del Hombre (LADH), en donde forma parte de su
Comisión de Solidaridad Internacional y actúa como animadora cotidiana de la
labor de todas y todos los que luchan desde esa trinchera de los derechos
humanos, que ya ha pasado los 75 años de existencia.
Dicha condecoración
le fue otorgada por el Consejo de Estado de la República de Cuba, a propuesta
del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), cuya Presidenta,
Kenia Serrano, afirmó durante el acto que "es como colocar una medalla
sobre otra medalla".
Edith Glaif nació el
3 de enero de 1930 y se constituyó en el baluarte de la solidaridad con todas
las causas justas; en particular, con la Revolución Cubana y con Los Cinco, con
un perfil bajo que es sumamente apreciado por las y los compañeros argentinos y
de otras partes del mundo.
Al recibir la
medalla, sostuvo que "las naciones del mundo deberían tomar el ejemplo de
Cuba en materia de transformaciones sociales" y afirmó, refiriéndose a la
Revolución Cubana, que "la esencia misma de su triunfo es el mejoramiento
de la vida de los pueblos", mientras que destacó que "nosotros
sentimos un gran cariño por estos cubanos, pues luchan por su pueblo y tienen
una conciencia clara de lo que representa el imperialismo, estamos con ellos y
trataremos de extender la causa a todos los rincones", al recordar la
lucha por la libertad de los Cinco Héroes.
Hoy, les acercamos la
entrevista que le realizara la compañera Marta Speroni en su programa Rompiendo
Muros:
Desgrabado
de la emisión de Rompiendo Muros
Inicio: Audio: Voz de
Fidel Castro Ruz.
"De nuestra
juventud salieron nuestros cinco héroes prisioneros del imperio, que, víctimas
de la venganza y el odio, sufren injusta y cruel prisión en las cárceles
norteamericanas sin que su honor, su entereza y su lealtad a la Revolución y a
nuestro pueblo hayan podido ser quebrados.
Ellos son símbolos e
inspiración para los que harán cambiar el mundo. No descansaremos un segundo
hasta que se haga justicia y sean devueltos a nuestra Patria. ¡Tarde o
temprano, con el apoyo de los demás pueblos del mundo, ganaremos también esa
batalla!"
Marta Speroni:
-Buenas noches, estamos en Rompiendo Muros, la columna del Comité Internacional
por la Libertad de los Cinco, transmitiendo desde Buenos Aires, Argentina desde
FM Flores 90.7. Estamos comunicados con Ciudad de Buenos Aires con una
entrañable amiga y compañera, Edith Glaif, argentina, nacida el 3 de enero de
1930, quien es una combatiente por los Derechos Humanos; ya que ha dedicado su
vida a la lucha por los Derechos Humanos. Ha sido el Consejo de Estado de la República
de Cuba -a propuesta del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos- quien le
ha otorgado la Medalla de la Amistad por su labor constante con la solidaridad
con Cuba en su país; y yo voy a agregar por mi cuenta, en la solidaridad con
todos los Pueblos. Hola Edith, ¿estás ahí?
EDITH GLAIF: -(risas)
Sí, estoy acá.
MS: -¿Cómo estás
Edith? Estamos encantados de comunicarnos con vos, realmente esta entrevista
para mí en lo personal y para el Comité Internacional es una fiesta, por tus
características. Edith Glaif tiene 83 años, y ha tenido siempre una trayectoria
militante de muy bajo perfil público, como revela su humildad, modestia y
decoro. Eso le ha valido gran estima y respeto entre sus compañeros argentinos
y más allá de las fronteras de su Patria. Todo esto ha salido a la luz -porque
Edith nunca quiso tocar el tema de su gran trayectoria- a instancias de que el
Comité Internacional por la Libertad de los Cinco le pidiera un breve currículo
para poder ser presentado para el otorgamiento de la Medalla de la Amistad, que
realmente nos ha enorgullecido a todos; porque si hay alguien que lo merecía es
Edith. ¿Cómo estás Edith? ¿Cómo has tomado esta condecoración, este
reconocimiento por fin? Después de tantos años de militancia en la Liga
Argentina, que es la entidad de Derechos Humanos más vieja del continente,
aparte. ¿Cómo tomaste cuando te enteraste del reconocimiento?
EG: -Muy emocionada,
yo no esperaba una cosa así nunca, y bueno, fue una gran sorpresa para mí; no
sólo por la Liga, por la cual yo estoy trabajando desde el año ´80, antes
estuve en otras organizaciones, con los estudiantes, en la organización de los
Festivales de la Juventud; todo eso llevó a que los compañeros del Comité
Internacional por la Libertad de los Cinco propusieran para que me dieran un
premio. Para mí fue emocionante el premio, el hecho de haberlo recibido por
Cuba porque todos los días estos que estuve allá fueron emoción tras emoción.
Se hizo la entrega en una casa grande e imponente que el gobierno cubano les
donó a los chilenos…
MS: -El Memorial
Salvador Allende…
EG: -Sí, se llama
Salvador Allende. Entonces es por eso que me sentí también muy tocada, muy
emocionada por todo esto, ¿no? ¡ Fue muy lindo ! Después de ahí fui a Holguín,
donde se realizó el Encuentro por la lucha por la libertad de los Cinco cubanos
presos en Estados Unidos. Estuve con el primero que salió en libertad de los
Cinco, René, y ahí fue una cosa muy linda, muy emotiva; porque estuvimos juntos
en una cosa muy interesante, que fue en la Universidad de Holguín y también en
el acto donde se realizó las Jornadas por los Cinco. Fue muy bueno, el hecho de
que participaran países que nunca habían participado: de Asia, de África, de
Europa, de América Latina, de todo el mundo. Nos encontrábamos con chinos, con
vietnamitas, palestinos, con gente que pudieron por primera vez estar en
Holguín; así que eso ayudó mucho, porque en todos lados, en todo el mundo, se
está tomando la lucha por la libertad de los Cinco, que esperamos que tenga
resultados positivos, ¿no?; así como fue el primero René, puedan seguir los
otros compañeros cubanos.
MS: -Es la lucha
nuestra de todos los días, siguiendo las palabras de Gerardo, de que sólo un
jurado de millones los va a sacar de la cárcel, porque obviamente nunca el
Comité Internacional confió en la justicia norteamericana. Siempre supimos que
había que dar una pelea en el campo de la solidaridad, como se hizo otras
veces, como se hizo con Elián González, que ya es un hombrecito y que debe
haber estado en Holguín, ¿cierto?
EG: -Sí, sí. Hay que
iniciar una campaña mundial grande, donde todos los países del mundo pidan por
la libertad de los Cinco. Esto es una cosa que no sólo por un grupo o un
Comité, sino que lo que nosotros tenemos que hacer acá en la Argentina es
mandar, intercambiar con otros países del mundo para que se pronuncien y pidan
y exijan la libertad de los Cinco. Tenemos algunos ejemplos. Ahora por ejemplo,
está lo de Puerto Rico, donde se pide que Puerto Rico participe en la CELAC; y
esto es producto de que con Puerto Rico nadie podía tener nada porque es una
colonia de Estados Unidos; y sin embargo se hizo una lucha muy grande todos los
años.
Hay también presos de
Puerto Rico en Estados Unidos, y se hizo una campaña muy grande, y ahora van a
participar los portorriqueños en la CELAC. En todos los países de América
Latina se está tomando muy fuerte la libertad de los Cinco. Desde Ecuador, por
ejemplo, están permanentemente saliendo proposiciones para que Estados Unidos
se pronuncie y deje en libertad a los Cinco. Esto es muy importante… Ecuador,
Venezuela, Bolivia, Brasil, en todos lados hay Comités y se está luchando
porque puedan sacarse lo antes posible esta gente, que puedan ser útiles para
su país y para el mundo, libres.
MS: -Puerto Rico y
Cuba tienen una cercanía absoluta. Dicen -a ver si me ayudas que no recuerdo la
frase bien- que son dos alas de la misma paloma, algo así. Lamento no recordar
la frase pero están fuertemente unidas… Y nosotros, como Comité Internacional
por la Libertad de los Cinco, además de pedir por la libertad de los Cinco,
pedimos constantemente y anunciamos y seguimos o compartimos todas las campañas
que hay por la libertad de Oscar López, el independentista boricua que después
de 32 años sigue preso en Estados Unidos injustamente, y que ha cumplido hace
muy poquito 71 años, y que le escribiera una carta hermosa, una carta abierta,
a su hija Clarisa. Yo voy a invitar a los oyentes a que entren -porque es tan
enorme tu trayectoria, Edith, que es imposible leerla al aire- en nuestro muro,
en www.rompiendomurosxlos5.blogspot.com.ar, y ahí están indicados todos los Festivales a los cuales vos
asististe y colaboraste con la organización desde 1949 fuiste delegada del
Centro de Estudiantes; o sea que con 15 años, ¿puede ser?
EG: -Yo tenía los 15
años en el año ´45, yo nací en el ´30.
MS: -Ahí te
afiliaste al Partido Comunista…
EG: -Entré a la
Juventud Comunista en el Liceo Nº 2 de Buenos Aires y ya empecé ahí, estuve en
la formación del Centro de Estudiantes, algo muy lindo, nos unimos a los
colegios secundarios, entre ellos el Colegio Mariano Moreno, y bueno, ahí
empecé a trabajar. Después se formó un movimiento que se llamó UJPA - Unión de
Jóvenes Patriotas Argentinos que era una organización de lucha muy interesante
donde participaban jóvenes de todo el país y luchaban por las reivindicaciones
juveniles, no sólo estudiantiles sino juveniles. Después, ya en el año `51,
participé en la organización del primer Festival que yo tuve la suerte de ir,
que se hizo en Berlín, donde conocí a gente muy importante, entre ellos a los
cubanos, ahí nos hicimos una gran amistad con los jóvenes cubanos que también
participaban en el Festival -estuvo Guillén en el Festival- y fue una cosa la
verdad muy buena. Tengo anécdotas muy lindas… había un muchacho cubano -que
después estaba en la Embajada en Vietnam-, Raúl (no me acuerdo el apellido) que
nos hizo leer una carta, en medio de un frío terrible.
Para ir a China,
fuimos todos juntos con los cubanos y teníamos que pasar por Siberia, y en ese
momento ya era casi el invierno y hacía mucho, mucho frío, y él había recibido
una carta de la compañera de él, de la esposa, donde anunciaba que iba a tener
un niño, era una muchacha joven. Entonces se puso debajo de un farol para leer
la carta y era que nosotros decíamos “terminá la carta, terminá la carta”,
hasta que al final la pudo terminar. Raúl Valdez Bibot se llamaba. Murió hace
muy poquito. Yo lo quería ver, justamente que estuve ahí en Cuba, y hacía una
semana que había muerto, me dio mucha pena porque fue un gran compañero
nuestro, de todos.
MS: -Ahora para los
que queremos mucho a la figura de Allende, a su Revolución, a esa gesta tan
importante que destruyó el Plan Cóndor, vamos a recordar algo muy importante:
que vos colaboraste con la lucha clandestina de ese Pueblo chileno y que fuiste
personalmente la responsable de la seguridad de la histórica dirigente Gladys
Marín en su paso por la Argentina y en sus ingresos ilegales a Chile, a quien
acompañabas permanentemente.
EG: -Yo estuve en la
solidaridad con Chile en el año ´51, que fue el año del Festival ese que fui,
fui para ayudar al trabajo para la organización allí. Era la época de González
Videla, que era un tirano. Terrible la situación… tal es así que por ejemplo me
tocó ir a Lota, las minas de carbón, para ver si podíamos sacar algún joven
delegado para ir al Festival; y ahí hacíamos las reuniones, entrabamos a un
lugar por una ventana porque no se podía, no había luz, solamente con una
velita nos iluminábamos a toda la gente, a los obreros de las minas y a otra
gente para preparar. Por suerte después de ahí hubo algo muy lindo que fue una
delegación muy importante chilena al Festival. Bueno, ahí tuve la suerte de
conocer a Pablo Neruda y a su primera esposa, a la que le decían Normita, ahí
conocí también a Jorge Amado, a Nazim Hikmet -el famoso poeta turco que estuvo
muchos años preso-; y fue un trabajo muy lindo ese. Después cuando fue el golpe
de Estado, nosotros habíamos ido a Chile antes del golpe y ahí lo conocimos a
Salvador Allende que estaba preparándose para las elecciones, para salir como
Presidente. Fue una cosa muy linda, muy emotiva. Con la caída en el ´74 tuve el
apoyo para poder viajar a Chile y poder ayudar a sacar a la gente para que
viniera acá a la Argentina y de acá se le pudiera hacer los documentos y las
cosas para salir para Europa. Generalmente ahí tratamos de sacar a bastante
gente chilena. Ahí conocí -es decir, yo la conocía ya de antes porque había
estado acá cuando era muy jovencita, en la Argentina- a Gladys Marín. Ella
venía de Europa para pasar a Chile en ese momento; y yo la fui a buscar al
lugar donde había bajado ella -que era un hotel- y de ahí la llevamos a un
lugar, una casa donde la ayudamos, salíamos y teníamos reuniones con otra
gente, a pesar de la situación terrible que ella tenía, pudimos lograr que
pudiera hacer un buen trabajo acá en la Argentina. De acá la ayudamos a pasar a
Chile; no sólo a ella, a varios que venían y nosotros después los pasábamos
para Chile.
MS: -En la
publicación que hemos hecho de esta entrevista tuya, hemos publicado una foto
donde se te ve agradeciendo con un papel en la mano y un micrófono, y vos estás
agradeciendo -seguramente- la Medalla de la Amistad que te dio Cuba,
merecidamente. Y ahí lucís el hermosísimo collar que te regalara Gladys Marín y
que había sido justamente de la mujer de Neruda; y que yo veo que vos lo usás
en los grandes acontecimientos.
EG: -(risas) Sí, sí.
MS:
-Lamentablemente tenemos que terminar porque ya nos estamos excediendo de la
hora, pero te quiero preguntar para terminar: ¿Hay algo, Edith, que no hayas
hecho, algo que te quede pendiente?
EG: -Lo que me tiene
pendiente es como se puede organizar acá un mejor trabajo por la libertad de
los Cinco. Es decir, tratar de ver como se puede llegar a los lugares
populares, a los barrios, a las fábricas, a las escuelas, a las universidades,
para que se conozca bien lo que pasa con los Cinco y para que se luche por la
libertad de los Cinco. Eso para mí es fundamental.
MS: -Maravilloso,
Edith. La última pregunta: ¿A Gelman lo conociste?
EG: -Sí, sí. Lo
conocí de la época que éramos muy jóvenes. Él estudiaba en el Nacional Buenos
Aires, yo en el Liceo 2 y tocaba el piano muy bien, en mi casa había un piano
porque mi mamá había sido pianista, entonces él venía con la gente del Nacional
Buenos Aires -donde él estudiaba- y cantábamos y él tocaba el piano. Nos
conocemos desde esa época con él. Después cuando él trabajó en el Diario “La
Hora” y en el Diario “Orientación” del Partido -el Partido Comunista- yo lo iba
a visitar muchas veces para pedirle, intercambiar opiniones, consejos y cosas
como para trabajar mejor. Fuimos muy amigos con él.
MS: -Me imaginé… Edith
te mando un beso grande. Nosotros hemos publicado en nuestro blog ese inmenso
poema que hiciera Juan Gelman que se llama “Fidel”, que solamente Gelman podía
escribir. Ese poema es maravilloso, como todos…
Edith, te mando un
beso enorme, sabés que te queremos muchísimo, que te valoramos muchísimo desde
siempre -no desde la Medalla de la Amistad- y en lo personal, sigo deseando que
en algún momento puedas escribir un libro que realmente para nosotros va a ser
apasionante. Beso grande Edith y gracias por esta fiesta.
EG: -No, muchas
gracias a ustedes. Un cariño muy grande para Graciela Ramírez y para Kenia, la
compañera del ICAP, que fueron tan amables conmigo y que me brindaron tanto
cariño.
MS: -Y que Kenia
dijo al ponerte la Medalla de la Amistad, que era “poner una medalla sobre otra
medalla”, la otra medalla eras vos. Muchas gracias.
EG: -Un beso grande.
MS: -Muchas gracias
Javier en la operación técnica, gracias a la Deuda Eterna. Nos estamos
escuchando con otra entrevista el jueves próximo. Buenas noches, hasta el
jueves.
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- museocheguevara@fibertel.com.ar