jueves, 14 de noviembre de 2019

Evo Presidente de Bolivia y ser humano excepcional por Andrés Mari museo Che Guevara de Buenos Aires

 Evo Presidente de Bolivia    por  Andrés Marí

Un ser humano, un político y un presidente como Evo Morales no existe fácilmente. Apareció y el sistema capitalista tenía que quitárselo de encima, pero nuestro hombre no comenzó a anular tal visión del mundo por decreto, pues hasta hizo un poco mejor a la cúpula militar que mantuvo tomándole el juramento de que jamás dispararían al pueblo. ¿Ingenuidad? Quizás. Evo pensó, con serena inteligencia y extrema humildad, que la mejor herramienta para empezar a cambiar el sistema era la paz que aman los pueblos y odia esa visión de la vida que celebra la destrucción de la casa donde vive y mata a la madre que lo parió cuando esta le pide compartir su riqueza. Durante los gobiernos de Evo, Bolivia tuvo la mayor estabilidad de un país en la región. Evo logró cierto acercamiento entre los empresarios y los trabajadores, propiciando un periodo de crecimiento económico y mejor distribución de los bienes nunca visto en el país. Evo logró la soberanía alimentaria del pueblo y lo aplaudieron múltiples organismos internacionales. Evo logró introducir en la constitución y que se respetara mundialmente la plurinacionalidad de Bolivia, aún cuando más del 60% de la población es indígena. Pero, ¿qué país no es plurinacional hoy día? Tanto EEUU y España, como Catalunya, y hasta Calella, el pequeño pueblo donde vivo, poseen características plurinacionales que solo unos olvidados de la fraternidad niegan. Evo convirtió a su país en el mayor defensor de la Tierra e implementó numerosas acciones por la salud del planeta. Bolivia fue cambiando hasta lograr que las ⅔ partes del parlamento, reconocido por la oposición, apoyaran a Evo. Ahora, la autonombrada sucesora, luego del gesto necesario de policías y militares, sustituyó a las cúpulas armadas y dice que devolverá al país la democracia y acabará con la violencia que ella, junto a EEUU y la OEA, crearon para saciar al sistema con la orden de matar. ¿Qué le falló a Evo? Quizás abolir la locura y estar muy cerca de la actual convulsión chilena