VICTIMAS DE UNA CONJURA INTERNACIONAL
Roberto Oliva Alonzo
olivalonzo2004@yahoo.com.mx
Hoy se habla en la prensa escrita, de la pancarta más grande que se haya hecho jamás, en defensa de la libertad de prensa. Refiriéndose a la que portaban los opositores al Presidente Hugo Chávez, en la manifestación que efectuaron para tratar de impedir que se cumpla con la Ley. Yo al instante me he hecho la siguiente pregunta ¿Cuál libertad de prensa? La de los dueños de los medios de comunicación, porque ustedes habrán oído o leído acerca de la SIP (Sociedad Interamericana de Prensa), que en realidad debía agregar una P a sus siglas y denominarse SIPP (Sociedad Interamericana de Propietarios de la Prensa), ya que es una sociedad de los propietarios de los medios de comunicación, no de periodistas, que es una cosa muy distinta, lo que ellos cuidan son sus negocios, su poder para poderse inmiscuir en los asuntos del Estado, brindar su apoyo a quien mejor los represente, aquel que no los vaya a atacar, aquel que les sirva de alfombra para seguir creciendo con el imperio que construyen alrededor de un medio de comunicación.
Díganme, ¿Saben ustedes que es todo el cacareo alrededor del cierre de Radio Caracas Televisión? Es que se cierra la gallina de los huevos de oro de la oposición a Chávez, aquella que ha impulsado funcionarios y puesto Presidentes, la que ha estado detrás del fallido golpe de Estado de abril del 2002, la que ha estado incitando a la rebelión al pueblo de Venezuela, corrijo, incitando a la rebelión a las capas medias y altas de los ciudadanos venezolanos, ya que es indudable que el pueblo, ese marginado en todos los gobiernos anteriores, está con Chávez, de eso no cabe la menor duda, pero la prensa nacional e internacional quiere hacernos creer que todos lo detestan en su país, por lo que habría que preguntarles: ¿Acaso no son las elecciones una forma democrática?
¿Acaso no fue aplastante la derrota de los opositores de Hugo Chávez en las elecciones recién pasadas?
¿No es acaso una decisión democrática esa votación que confirmó a Hugo Chávez en el poder?
¿Por qué entonces, día a día, Radio Caracas Televisión sigue llamando a la sedición en contra de un gobierno democráticamente electo?
Nadie ha negado que el gobierno central de Venezuela tenga el derecho de no prorrogar la concesión que por más de medio siglo ha explotado Radio Caracas Televisión y ha enriquecido a sus propietarios, entonces ¿Por qué ahora que debido al historial desestabilizador de Radio Caracas Televisión, el gobierno de Venezuela, haciendo valer su soberanía, deniega alargar la concesión, todos protestan?
¿Verdad que no es lo mismo tener a una marioneta en el poder, que a alguien que ejerce el poder legal y la soberanía del país? Claro que no es lo mismo y por eso el gasto de tinta en todos los medios escritos y el tiempo en los medios radiales y televisivos del Continente, para inventar una imagen de Chávez nada favorable. No vaya a ser y de pronto los demás gobernantes dejen de ser marionetas de los grandes intereses y decidan ponerse, un poco, del lado de los más necesitados.
Que cambio daría el Continente Americano.