sábado, 12 de diciembre de 2009

ALFABETIZACION HABANERA MULTIPLICÓ PANES DIGNIDAD PECES CULTURA SOCAVÓ LA PROSTITUCION CUYOS RESPONSABLES HUYERON A EEUU Adys Cupull Froilán González III parte

busque en este mismo blog otros capítulos de esta histórica recopilación de como la cultura y el amor transformaron a una sociedad revolucionándola.   Eladio González   toto
 
A la maestra  Ana María Cuz

y  a los  educadores que se entregaron

a la noble misión  de transformar la

capital cubana. 


                III        PARTE
 
A PARTIR DE  1959, LOS  POLITICOS GENERADORES DE   INCULTURA , IGNORANCIA Y  PROSTITUCIÓN, SE MARCHARON PARA LOS ESTADOS UNIDOS.
 

La  Avanzada  alfabetizadora  habanera

                                              por   Adys Cupull  y  Froilán  González 

Sigamos conversando, hoy hablaremos  con el testimoniante  Pablo Huertemendía Díaz, de los que  al triunfar la Revolución se fueron para los Estados Unidos.  En 1961, Pablo fue desingado  Delegado  por el Partido Socialista Popular en la Comisión de la Campaña de Alfabetización de Dragones-Guadalupe.

Huertemendía es licenciado en Derecho y en Periodismo, siempre vivió en el barrio Dragones-Guadalupe, y en 1947 fue  presidente del barrio. Su testimonio nos lleva a la política corrupta, y a los politiqueros relacionados estrechamente con los degradantes actos de prostitución.

Durante la alfabetización en la ciudad de La Habana, trabajó en la Comisión que tenía la responsabilidad de  atender el traslado de  las "mujeres públicas", como también eran llamadas las mujeres  dedicadas a la prostitución, las acompañaban, en un auto desde su residencia hasta la estación de Zanja y Escobar. 

Explicó que este trabajo se hacía con el apoyo de los compañeros de la Policía Revolucionaria. Se atendían de esta manera para  poder realizar el Censo de Alfabetización, con información seria, eficaz, para la historia y el futuro cierto. Pablo afirmó que muchas veces  ellas protestaban, no se daban cuenta que se abría una vida nueva para todos, que nadie sería excluido de las conquistas sociales.  He aquí sus palabras:

       "La reacción,  en cada una de ellas, en el primer momento era negativa, de violencia.  Había una muchacha  que se alteraba con gran violencia, era una muchacha muy contradictoria, tenía cierto nivel cultural, ejercía la prostitución para mantener a su madre, viejita y enferma, además a un hermano anormal. Era muy tiposa, muy bonita, pero muy agresiva y violenta, dos cosas contradictorias.

  "Ella los trataba con mucha ternura  y cariño, no había conseguido trabajo en ninguna parte, su proceder era discordante porque  acompañada a la ternura con su madre, estaba su agresividad, se entraba a golpes con cualquiera como si fuera un hombre.

   "Yo siempre viví en ese barrio, lo conozco muy bien. Recuerdo una casa muy famosa, que era conocida como la Casa de Marina, quedaba en la calle Colón,  pero cuando triunfó la Revolución esa casa  dejó de funcionar como tal.

   "Marina era una jefa de esas mujeres  públicas, tenía muy buena posición económica. Las personas que iban allí, eran personajes de la vida política de aquella época capitalista. La Casa de Marina, no era un próstibulo corriente. Ella mantenía, al igual que muchos hoteles, álbunes con las mujeres desnudas, y el cliente escogía con cual quería pasar la noche.

   "Estas mujeres jóvenes  no eran conocidas  como prostitutas   pertenecían a la clase media y alta de la sociedad. Vivían en las zonas residenciales de La Habana. Eran profesionalistas o empleadas de cierta categoría, pero como a esa casa concurrían políticos importantes, senadores, representantes, ministros, industriales, negociantes, diplomáticos, gentes importantes, no sólo de Cuba, también de Estados Unidos y otros países.

   "Y esta Marina era una mujer que tenía muchas relaciones políticas. Allí acudía Paco Prío, hermano del ex presidente Carlos Prío. Aquella casa era un  centro de prostitución y drogas  de la burguesía, y  para la burguesía. Allí se podía pedir cualquier tipo de droga. Ella tenía empleados especiales para esas actividades. Su casa tenía prestigio, y los demás prostíbulos y burdeles la respetaban y la envidiaban.

La policía no se metía con Marina. En el resto de los prostíbulos  el nivel era muy bajo. La Policía era una entidad  explotadora más, porque estaban: el policía de posta, el capitán de la demarcación y así sucesivamente todos jugaban un papel determinante en las vidas de aquellas mujeres y en la prostitución en general, porque una zona o prostíbulo trabajaba  en libertad, en la medida de su aporte económico, por el contrario,  venían y con cualquier pretexto cerraban los burdeles, y los dueños y los proxenetas tenían que resolver las reaperturas a través de los delegados de barrios, o de los políticos con influencias para que estos hablaran con el Capitán de la Policía, y todo se arreglaba.

    "De ahí que muchos proxenetas  dueños de burdeles fueran los delegados políticos de los barrios. De esta forma se daba el marco de unión del político, el proxeneta y el policía. …Las cédulas electorales de esas mujeres  públicas estaban controladas y garantizadas para la hora de aquellas falsas elecciones. 

Recuerdo el caso de Julio Álvarez, miembro del Partido Auténtico, delegado de barrio, concejal, que había sido y seguía siendo proxeneta, y cuando llegó el dictador Batista al poder, Julio Álvarez traicionó a los auténticos y se pasó para las filas del dictador y esto le permitió seguir siendo proxeneta.

Otro caso fue el de Pedro Gutiérrez que llegó a ser Jefe de Licencias de Armas, durante los gobiernos de Carlos Prío y de Grau San Martín, y seguía siendo proxeneta. Todos ellos, al triunfar la Revolución se fueron para los Estados Unidos, incluyendo a la famosa Marina.

Continuará