jueves, 2 de septiembre de 2010

Geología de Liberación burbuja metano financiera Nyls Ponce y Jorge Torres Zafra Cuba

El sitio Museo Ernesto Che Guevara se honra en publicar este análisis llegado desde Cuba gracias a dos hermanos geólogos de la revolución.  Fidel lo había vaticinado 18 años atrás, hoy lo ratifica.

 

LAS   DOS   BURBUJAS

                                                                 Por  Nyls Gustavo Ponce Seoane

                                                                       Jorge Luís Torres Zafra

                                                                              (geólogos)

 

 

Fidel, en su Mensaje a los Jóvenes Cubanos (1), entre otras cosas, planteó:

“Imaginen que el sitio Web Global Research no merece crédito alguno; que la teoría de Gregory Ryskin, ingeniero bioquímico de la Universidad de Northwestern , sobre la burbuja de metano que el articulista Terrence Aym asoció al derrame petrolero de la British Petroleum en el Golfo de México, no merece atención alguna y nos invitan a dormir tranquilos”, y en su Reflexión (2) emplazando al Presidente de Estados Unidos retoma el tema planteando:

 “Científicos y defensores del medio ambiente han expuesto teorías relacionadas con catástrofes que ocurrieron en cientos de millones de años con las llamadas enormes burbujas de metano, causantes de gigantescos tsunamis que barrieron gran parte del planeta que, con vientos y olas que alcanzaron dos veces la velocidad del sonido y olas  de 1 500 metros de altura, liquidaron el 96% de las especies vivas”.

“Expresaban el temor – continuó Fidel – de que en el Golfo de México, que por alguna causa cósmica es la región del planeta donde la roca cársica nos separa de la enorme capa de metano, sea perforada en la desesperada búsqueda de petróleo con los modernísimos equipos de tecnología que hoy se dispone”

Este Mensaje y ésta Reflexión son todo un reto ya que tocan aspectos relacionados con una Teoría científica, y con ella Fidel, una vez más, nos está invitando a pensar, a investiga, dilucidar y comprobar lo acertado o no de la misma pues, en  principio, no hay teoría de la cual no se pueda dudar, criticar, refutar, aportar o apoyar, al menos hasta tanto que no sea demostrada en la práctica con los hechos. Corresponde en este caso a los que se ocupan de las Ciencias en general y de las Ciencias de la Tierra en particular, indagar y esclarecer detalles de la misma para una mejor comprensión de lo expuesto por el Comandante en Jefe.

 

La Burbuja de Metano.

En realidad la teoría lanzada por Ryskin y Aym no es más que una colección de burdas distorsiones de una hipótesis científica más seria relacionada con la extinción masiva de especies que marcó el fin del período Paleozoico (245 Millones de años) y a la que se le suele llamar “The Great Death” (La Gran Mortandad), ó la Bomba Climática”, más cercana a la realidad actual.

Por la Geología Histórica, Ciencia que estudia las huellas y evidencias  que han dejado las rocas a lo largo de la Historia de la Tierra, se explica que la gran crisis de las formas de vida en la Tierra, tanto vegetal como animal al final de Paleozoico se debió radicales transformaciones estructurales de la corteza terrestre, del clima y el relieve de la superficie terrestre como resultado de fuertes procesos tectónicos y orogénicos (formadores de montañas)

Se explica por otra Teoría que dicha extinción de especies fue desencadenada en realidad por eventos magmáticos geotectónicos (el gran afloramiento  de los Traps de Siberia Central (más de 1 millón de km3  de lavas basálticas). Esa magma, de acuerdo con investigaciones de geólogos soviéticos, en su ascenso, atravesó un potente horizonte de rocas evaporíticas (yeso, sales, carbonatos), disociándolas y dando lugar a un significativo enriquecimiento en Azufre (S) de las citadas magmas, parte del cual fue expelido a la atmósfera en forma de gas sulfuroso, además de anhídrido carbónico (CO2) y otros gases, generando grandes eventos de lluvias ácidas.

 

 Otro evento parecido ocurrió en esa misma época en el Sur de China, en la zona de Himalaya y Nepal. A pesar de ser menor, este otro gran foco magmático tuvo la importante particularidad de atravesar gruesos espesores de carbonatos; y carbonatos más calor suficiente. genera mucho CO2 emitido a la atmósfera.

 

Así el CO2 produjo un calentamiento global inicial de unos 5 grados Celsius, mientras las lluvias acidas dañaban la vegetación. La acidificación de las aguas marinas superficiales por CO2 y lluvias ácidas, junto con el aumento de la temperatura, provocó la inicial extinción masiva en el mar. La elevación de las temperaturas marinas superficiales provocaron la estratificación de la columna de agua oceánica, reduciendo drásticamente el abastecimiento de oxígeno a las aguas profundas, por lo cual una gran cantidad de materia orgánica muerta llega al fondo oceánico, consumiendo en mayor grado el oxigeno presente en el agua.

 

De este modo se desencadena en los océanos un Evento anóxico Mundial (la situación del Mar Negro a escala mundial).  El gas sulfhídrico (H2S), generado en estas circunstancias, es venenoso para los organismo aerobios siendo además un un gas de efecto invernadero.

 

Todo esto caldeó el medioambiente acuático y terrestre y desencadenó la disociación de los clatratos o hidratos de gas (almacenes de metano) dondequiera que estos existan, pero se trata de una emisión paulatina, no comparable en modo alguno con un escape de metano durante un accidente industrial o en un gaseoducto (cosa que si pueden ocurrir en la actualidad debido a la intervención tecnológica del hombre en la Naturaleza), por lo cual las explosiones de las que se habla en el artículo no tuvieron nunca lugar. Lo que ocurrió, probablemente, es que la concentración media mundial de metano en la atmósfera se elevó con rapidez y si se tiene en cuenta que como un gas de efecto invernadero el metano es 21 veces más potente que el CO2, puede esperarse lo que ocurrió tanto en el fin del Paleozoico  como en el Máximo térmico Paleoceno – Eoceno (64 – 36 MA), un incremento adicional de la temperatura media del planeta (que totalizó en la extinción paleozoica en unos 12 grados Celsius, llegando la media del verano en algunas zonas a los 50 - 60 grados. A través del desfavorable medioambiente creado para la cadena alimenticia, la extinción pasó del mar a la tierra y finalmente volvió al mar a cobrar su último diezmo. Se ha estimado, en base a  la relación geoquímica del carbono 12/ carbono 13 y del registro estratigráfico de diversas localidades del mundo, que todo esto ocurrió en 80 000 años, teniendo lugar el grueso de la extinción en un plazo de 8 000 a 12 000 años. Este es un largo plazo para la vida humana, pero para la vida geológica del plantea ocurrió a una velocidad realmente catastrófica (y que en la actualidad puede ser acelerada por el catalizador que es el intervencionismo tecnológico industrial en la Naturaleza). En cuanto a la duración del evento magmático que lo genero, fue de 200 000 a 800 000 años, de acuerdo con las diferentes dataciones realizadas en las rocas ígneas (a un ritmo de erupción de 20 a 50 veces más que el actualmente observado en Hawai, según las distintas estimaciones). En ese tiempo, 270 - 240 millones de años atrás, se trató de un  proceso enteramente natural, vinculado a la vida geotectónica del planeta. En otras palabras, para que ocurra la liberación masiva de metano a la atmósfera, no hace falta super grandes grietas ni catástrofes al estilo Hollywoodense, sino solo el calentamiento global y cambio climático del que tanto se viene hablando, generado ahora por el hombre debido al incremento rápido de CO2 en la atmósfera, en 4 - 5 grado Celsius, valores que están dentro de los peores escenarios evaluados en el Cuarto Informe del Proyecto Internacional del Cambio Climático (IPCC por sus siglas en inglés), de modo que tal cosa pudiera realmente suceder en los próximos 100 años.... y entonces, de nada valdrá que las once mil vírgenes se rasguen las vestiduras, pues la disociación de los depósitos de hidratos de gas es un proceso natural de retroalimentación, que una vez iniciado, transcurrirá con total independencia de lo que las chimeneas erigidas por la sociedad emitan o dejen de emitir aunque  esta emisión se sumaría al proceso natural, reforzándolo.

 

Ese es el sentido en el cual hay que interpretar la frase final del discurso de Fidel en la Cumbre de Río en 1992: "Mañana será tarde para hacer lo que debimos haber hecho". Una gran verdad, con la cual el Comandante percibió y aquilató la verdadera magnitud de lo que estaba ocurriendo con el medio ambiente y la desenfrenada intervención humana, que, desde entonces ha hecho que las cosas se hayan  puesto peores de lo que entonces se esperaba.

 

La Burbuja Financiera.

 

Hemos escuchado de economistas, periodistas  y duchos en la materia económica sobre la tal llamada burbuja financiera, la que no es ya teoría sino un hecho real,  y es esta burbuja (la que explota, explotó y seguirá explotando), nacida de la especulación financiera, la que compra acciones sin tener una base real productiva demostrada y enriquece a algunos especuladores, es uno de los hechos, sino el más importante uno de los más, que ha traído como consecuencia la actual crisis del sistema capitalista mundial con los correspondientes desastres hipotecario, bancario, de desempleo, monetario, medioambiental etc., y que por consiguiente, han puesto en crisis a las principales potencias del capitalismo mundial: EEUU, Japón,  Alemania, Inglaterra, Francia con derivaciones a Grecia, España, Portugal y demás.

Y ¿qué casualidad?, que se pone en boga por Internet en estos mismos momentos de crisis económica capitalista la teoría de la otra burbuja, la de metano. Es interesante también el hecho de que aquí se vinculan científicos con periodistas. Esto no es casual.

Así las cosas, se puede  considerar y llegar a la conclusión de que esta teoría de la burbuja de gas, divulgada en estos momentos, es un ejemplo típico de de lo que nos enseñara Martí cuando señaló: “Es además un arte de la política tener a los pueblos como distraídos y aturdidos; y obligar sus ojos a espectáculos variados y nuevos, para que teniendo siempre qué mirar, no les quede espacio de mirar en sí, y se vean míseros y bravos y no se rebelen”(3), así como de  “terrorismo científico mediático” actual, cuyo fin no es otro que el de desviar la atención de los problemas reales de la catástrofe y desastre económicos que sufre y afecta a la sociedad capitalista mundial en la actualidad y por lo tanto vemos como “… maravillosas inteligencias son manipuladas por los medios masivos de información…”, al decir de Fidel en su Mensaje a los Jóvenes Cubanos No es de extrañar entonces que sea habitual en estos tiempos, a partir de las tan cacareadas profecías mayas, y en general del fin apocalíptico del mundo con Armagedones de todo tipo, que esto sea para ellos, como método, la mejor forma de desviar la atención de la realidad existente hacia otros problemas y hacer que la población no se fije en los problemas económicos, financieros, políticos y sociales concretos que la afectan en estos momentos y no se preocupen ni ocupen de la forma de resolverlos; pues ellos son, con los peligros de guerra nuclear y los verdaderos impactos que ocasionan al medio ambiente con su accionar espontáneo tras las ganancias, los que verdaderamente pueden crear la Gran Mortandad en la especie humana y entonces, como el avestruz, que mete la cabeza en la tierra, le están diciendo al mundo y a los pueblos: témanle al fin del mundo que se cerca y no por lo que realmente está sucediendo ahora en el seno de la sociedad que nada podrán resolver.

Es por todo esto que se puede decir y afirmar que de hecho, el Juicio Final ha comenzado... y el Homo ¿Sapiens?... ¿aun no se ha dado cuenta de ello?; De aquí la importancia de las advertencias de Fidel (que una vez más se percata de la situación y le da la importancia extrema que tiene) sobre la posibilidad de una guerra nuclear y su vinculación con el cambio climático pues lo acentuaría. Estas advertencias de nuestro Comandante son una verdadera Proclama de Lucha por la Paz.

 

Referencias

 

1. Castro Ruz, Fidel. Diario Granma, p.5, 31/07/2010.

2. Castro Ruz, Fidel. Diario Granma. En Reflexiones del compañero Fidel “Emplazamiento al Presidente de Estados Unidos”, p.2, 4/8/2010.

3. Martí, José La Opinión Nacional, 7/2/1882, en  Obras Completas T.14,  p.341, Editorial Nacional de Cuba. La Habana, 1964.