El campamento habanero Julio Antonio Mella, espacio de solidaridad internacional del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), abriga durante esta semana a 58 delegados que participaron en conferencias referentes a la situación cubana e intercambiaron con profesionales de los medios de prensa cubanos como el periódico Granma, la agencia de noticias Prensa Latina y nuestro sitio digital Cubahora, entre otros.
La resistencia a las mentiras de los grandes medios de comunicación movió el debate entre los grupos de solidaridad que conformaron la brigada de lucha contra el terrorismo mediático.
"Este país es un faro de inspiración para todos los procesos izquierdistas de América y el mundo; de ahí nuestro interés de crear una red de prensa comprometida con la Revolución, en medio de una crisis estructural y de civilización", recalcó el representante de la Coordinadora Nacional de Prensa Popular en Perú, Carlos Romainville.
Amor a Cuba
Vuelve la solidaridad a Cuba, uno de los rostros comunes en este incansable batallar es el de la argentina Adriana Vega, escritora y periodista afiliada de la Unión de Trabajadoras de Prensa de Buenos Aires (UTBA) y la Federación Latinoamericana de Periodistas (FELAP) y presidenta fundadora de la Asociación Cultural José Martí de la República de Argentina.
Adriana conversó en exclusiva con Cubahora sobre su relación con Cuba y su valioso quehacer solidario.
¿Cuándo fue la primera vez que escuchó hablar de Cuba?
"Escuché hablar de Cuba hace mucho tiempo, creo que desde que nací. Primeramente conocí sobre José Martí en la escuela primaria y en la secundaria donde una monja dijo: este autor latinoamericano está prohibido porque es masón, y empecé a leer a José Martí.
"Después busqué información sobre la Cuba revolucionaria. La lucha de los rebeldes en la Sierra Maestra atrajo mi atención cuando tenía 17 años y militaba como socialista y marxista. En los diarios argentinos encontré que junto a los rebeldes cubanos había un aventurero argentino llamado Ernesto Che Guevara, ahí comienzo a escuchar sobre la Revolución, en 1957.
"Después hubo en Argentina una dictadura horrible, y quedó prohibido nombrar a Cuba, decíamos "la isla". Las personas de izquierda fueron perseguidos, en mi familia sufrimos un golpe muy grande pues mi yerno de 24 años, que se crió prácticamente desde los 13 en casa noviando con mi hija, desapareció a los ocho meses de casados ellos. Este hecho me marcó y comencé toda una trayectoria de derechos humanos y apoyo a Cuba. Visité la Mayor de las Antillas en 1985 por primera vez y en la segunda ocasión, en el 90, fundé la Asociación Cultural José Martí de Argentina".
¿Pudiese definir su amor por Cuba?
"Cuando joven me gustaba mucho Cuba por los bailes. Pero después de estudiarla la amé con más fuerza. Hasta recreé una ficción y digo que mi muerte fue en febrero de 1932 cuado ocurrió el devastador terremoto en Santiago de Cuba, por esas fechas me ahogué y las aguas me llevaron hasta Argentina, donde aprendí a nadar y volví a nacer con el amor de Cuba por dentro. Una ficción relacionada con mis sentimientos que son muy profundos, sobre todo la admiración hacia el Che, Camilo y Fidel.
"Mi amor por Cuba duele, porque sufro al escuchar las informaciones tergiversadas de los grandes medios. Las calumnias y mentiras contra las cuales luchamos los grupos de solidaridad."
¿Ese anillo que tiene en su dedo anular cifrado con las letras de Cuba, tan parecido al que usó José Martí durante toda su vida, qué significa?
"El anillo demuestra cómo Cuba procede cuando todos abandonan a los seres humanos, varios amigos salvamos a los prisioneros negros del Katrina, fueron dos noches de trabajo intenso tras el ordenador y como mantuve siempre al tanto del rescate a los cubanos, recibí este anillo que significa mucho para mí. Pienso en aquella catástrofe y recuerdo a los que se ahogaron que no pudimos salvar, a Cuba que le rechazaron la brigada médica Henry Reeve: médicos que iban a salvar a los norteamericanos".
¿Cómo pasa 12 horas delante de un ordenador y emite diariamente varios mensajes hacia cinco mil personas solidarias en todo el mundo mediante una lista de correos?
"Me levanto en la mañana para buscar los temas y analizar las reflexiones de Fidel que sirven de guía. Generalmente me anticipo a algunas noticias, en eso me le parezco al Comandante, he hablado de la Cuarta Flota cuando nadie hablaba, de Posada Carriles y Orlando Bosh cuando no se trataban en al prensa internacional.
"A los cinco mil contactos les envío por correo electrónico mis textos y noticias vinculadas con la solidaridad hacia Cuba. Las redes sociales pueden extender mucho más el mensaje por eso exhorto a mis compañeros a combatir en este nuevo campo de batalla digital".
¿Qué recuerdos se lleva de esta visita a Cuba, porque todas las visitas a la Isla no son iguales?
"He participado en varios encuentros de solidaridad mundiales y latinoamericanos pero esta visita me demuestra que puedo seguir visitando el Campamento Internacional Julio Antonio Mella. Aunque ya no veo muy bien y a veces me desequilibro al caminar, pude pasar la prueba y me llevo como experiencia la unidad latinoamericana. Hemos tenido un grupo magnífico que surge de la UNASUR, de Chávez, Evo, Correa y del Golpe de Honduras.
"Nos caracterizamos por la defensa en Latinoamérica y por los nuevos movimientos que tenemos para la lucha la brigada. Me llevo la experiencia de la unidad, además de compartir con amigas como las blogueras Norelys Morales y Rosa Báez (la polilla cubana) que nos conocíamos solo virtualmente, fue en encuentro entre los hermanos virtuales que se trasforman en los hermanos verdaderos, hijos e hijas de Cuba".
Fotos: Beatriz Pérez Alonso
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Fuente: EXCLUSIVO, 26/11/10
04/06/2011 
