viernes, 8 de junio de 2007
Politizan investigación Irán responde Mohsen Baharvand Argentina local
AMIA: una creencia y dos métodos
Escribe el Dr. Mohsen Baharvand, Encargado de Negocios de la República Islámica de Irán>
Recientemente, el tema de la AMIA junto con el nombre de mi país nuevamente se planteó entre los medios. En tanto que los ciudadanos de la República Islámica de Irán todavía no han contratado ningún abogado y el gobierno de Irán, excepto yo, no tiene ningún otro portavoz en Argentina, tal vez sea necesario aclarar a la opinión pública expresando mi punto de vista sobre este tema.
Sólo sabe Dios las veces que hemos repudiado los atentados terroristas de los años 1992 y 1994 en Buenos Aires; nuevamente condenamos los atentados cometidos como cualquier otro ataque y nos solidarizamos con los familiares de las víctimas de esto hechos salvajes y satánicos.
Nadie tiene derecho a dejar de lado el dolor y sufrimiento de los familiares de las víctimas, ni nadie puede disminuir la importancia de este tema al pueblo argentino y, por supuesto, tampoco nadie tiene derecho a abusar de la vida de ochenta y cinco personas para su beneficio personal o político. A su vez cualquiera que sea la magnitud y la importancia del tema, no hay que manejarlo erróneamente violando los derechos de otras personas. La justicia se debe ejecutar para todas las personas. Todos nosotros tenemos una gran responsabilidad ante la justicia y la verdad.
No se puede obligar a alguien a defenderse ante un tribunal. Las personas por diferentes razones o motivos podrían decidir no defenderse. La defensa es un derecho y no un deber. Si alguien no quiere tomar decisiones, no se puede ser injusto con él y violar su derecho. El gobierno de la República Islámica de Irán esta muy segura de la inocencia de sus ciudadanos y respecto a éste tiene, suficiente prueba en su poder. También,según la ley, el gobierno de Irán debe defender el derecho de sus súbditos. Por lo tanto, es natural que utilize todos los instrumentos legítimos y legales según el derecho internacional para defenderlos. Nosotros no estamos en busca de impunidad ni tenemos la intención de mansillar el derecho de otras personas y tampoco cubrir algún acto ilegal, sino recorrer un camino legal para llegar a la verdad simultáneamente respetando la soberanía de nuestro país.
Está claro que el Poder Judicial y los familiares de las víctimas de éste terrible atentado, también tienen derecho a buscar la verdad y permanentemente determinar que los responsables de éste ataque inhumano fueran juzgados. Esto es su derecho y hay que respetarlo, pero a cualquier precio no se puede buscar a un culpable. Castigar a los inocentes es tan ilegal e inhumano como la impunidad. Nosotros pensamos que en el año 1994 respecto a los que cometieron este crímen, hubo una intencionalidad o errores, y que los verdaderos responsables pudieron escapar de la justicia. Lamentablemente, este error ha continuado tanto que retrotraerlo, si no es imposible va a ser muy difícil. Pero vale la pena hacer cualquier cosa para llegar a la justicia y a la verdad, y respetar los derechos humanos.
Nosotros respetamos las opiniones y la convicción del Gobierno Argentino sobre la justicia y la verdad porque creemos a este tenor y pagaremos el costo de ésta convicción. Por esta misma razón, hasta ahora hemos ofrecido y reiteramos que estamos dispuestos a abrir un diálogo constructivo junto con una buena intención para poder esclarecer la verdad y así dar pasos por la Justicia, hasta descartar las diferencias. Esto no significa un acuerdo político y legal, sino el marco de un entendimiento para poder concordar entre poderes judiciales de ambos países y para que las víctimas de la injusticia en ambos también fueran definidos. Nosotros debemos poder crear un acercamiento entre dos métodos para llegar a la verdad.
Esta propuesta no significa olvidar las críticas y las diferencias políticas entre ambos países sino que su objetivo será separar un expediente judicial de los temas políticos que no tienen nada que ver. Las diferencias políticas siempre existieron y van a existir de ahora en adelante. Pero no se puede y no se debe hacer juegos políticos con los expedientes judiciales que directamente estan vinculados con los derechos humanos, sino que será necesario una conversión concreta hacia los mismos y el derecho internacional. Si un diálogo puede acercarnos un paso hacia a la verdad y la justicia aún siquiera éste diálogo sea con aquella persona que no piensa como nosotros, se debe llevar a cabo. Vale la pena probar cualquier método modesto para llegar a la verdad.
Buenos Aires,10 de mayo de 2007
Mohsen Baharvand
Encargado de Negocios,
República Islàmica de Irán.