sábado, 13 de junio de 2009

matrimonio de jubilados norteamericanos eran espías de Fidel Castro, Raúl, Almeida, Silvio Rodríguez, Pablo Milanés derrotando a Pentágono Anny Arroyo

foto: la peligrosa pareja procubana en acción


El pasado 5 de junio ¡mucha efervescencia en las agencias de prensa internacionales: ¡la AFP y luego Reuters anuncian la detención de una pareja de espías a sueldo de Cuba!

Durante unos 30 años, Walter Kendal Myers y su esposa Gwendolyn habrían transmitido informes a La Habana, habiendo sido reclutados en 1979 después de una estancia en la Isla.

Este caso, calificado de « extremadamente grave » por David Kris, ministro adjunto de la Justicia de EE.UU. puede dejar perplejo a uno, por más de un aspecto.

Primero, los principales protagonistas, un James Bond de 72 primaveras y su media naranja, una Mata Hari que celebró sus 71 años a las pasadas cerezas, que usaban el marco prestigioso del supermercado vecino para intercambiar portadocumentos – perdón, carritos – cargados con informaciones secretas, discretamente pilotados por la señora.

Quienes sueñan con un super espía con físico de estrella de Hollywood y técnicas sofisticadas estarán decepcionados al imaginar los documentos supuestamente comprometedores escondidos entre una lechuga, una botella de coca cola y un paquete de cornflakes…

Las informaciones clasificadas iban probablemente criptadas como los mensajes radios recibidos de la Isla (¡es una locura ver como los Cubanos consiguen sin problema emitir hacia el enemigo! ¡Mejor que Radio Martí !) antes de quedar copiados con la lista de las compras.

Porque las buenas de esas personas iban organizadas : un agente secreto cubano habría convencido a abuelo Myers que busque un empleo, sea en el Departamento de Estado, sea en la CIA.

No problem ! Super Walter consigue contratación primero en el Departamento de Estado, luego en el INR (el Servicio de Informe e Indagación del ministerio) donde lo emplean periódicamente de 1988 a 1999.

Luego, beneficiando de una promoción, allí habría estado empleado definitivamente como analista, lo que le habría permitido un acceso más cómodo a documentos confidenciales. Pero, por ser hombre prudente y espía curtido, nunca habría sacado ni la ilusión de un documento, contentándose con memorizarlos o tomar unos pocos apuntes.

Ese hombre, ¡seguro es uno de aquellos seres extraordinarios capaces de memorizar con una sola mirada los planes de la nave Columbia (si por casualidad hubieran figurado en un expediente olvidado en un despacho) y reproducirlos más tarde sin vacilar ! ¡Ojala fuera yo capaz de las mismas hazañas !

¡He de confesarlo, estoy pasmada! ¿Cómo pudo una superpotencia como Estados Unidos contratar en plena guerra fría, y en un sector sensible a un Fulano cualquiera que acababa de pasar sus vacaciones en ese nido comunista que constituía la isla caribeña?

¿Cómo unos servicios tan competentes como lo son, dicen, los de la CIA, han podido dejarse engañar durante treinta años por un espía « no profesional »? ¿Cómo no se interesaron a las actividades de ese tío que volvió de turismo a La Habana en ... 1995, es decir en pleno Período Especial?

Y que, ademàs, habría sido recibido por el mismo Fidel Castro? ¡Y eso sin hablar de las numerosas medallas que el Gobierno cubano le habría otorgado!

El Comandante no lo recuerda. Pero que hubiera escapado de la vigilancia de los servicios de información más eficaces del mundo es algo inquietante.

Es verdad ( ? ) que no habrían sabido de los atentados del 11 de septiembre... También es verdad que si se contrata a cualquiera para cargos « sensibles », no hay para asombrarse.

La pareja lo podría pagar duro : 10 años « por haber sido agentes de un gobierno extranjero », 5 años « por conspiración » y 20 años… « por haber recibido un sueldo del Departamento de Estado ejerciendo una actividad ilegal ».

Sabiendo que lo más grave es lo más se castiga… De paso, ¡permítanme recordarles que Gerardo, Ramón y Tony fueron sentenciados a cadena perpétua por una « conspiración por espiar » totalmente infundada!
¿Qué pensar de este caso ? ¿Realidad o montaje?

« ¿No les parece algo ridícula, esta historia de espionaje cubano » preguntó Fidel Castro en una tribuna que difundió Cubadebate al día siguiente.

No, Comandante, con todo el respeto y el cariño que le tengo, esa historia no me parece « ridícula ».

Porque, si esta historia resulta verdadera, la pareja Myers probablemente nunca más gozará de la libertad. 35 años de cárcel, a más de 70 años…

Y, más que todo – lo admito – porque eso sale a luz a los diez días de la fecha en la cual la Corte Suprema de Estados Unidos ha de decidir si acepta o no de revisar el caso de los 5.

¡Vaya coincidencia! Eso cae de las mil maravillas para los Gusanos de Miami, para mostrar a la Corte que esos malditos Cubanos no merecen que uno se preocupe por ellos.

Sin contar que permite a sus representantes criticar la política de apertura de Obama, cuando promete « una nueva era en las relaciones con América Latina » y que presenciamos un comienzo de deshielo en las relaciones entre Washington y La Habana.

Casualidad también si eso ocurre al dia siguiente de la decision de la OEA de reintegrar a Cuba…

« ¡La Habana sólo piensa en amenazar y destruir los intereses norteamericanos ! » comenta, feliz, Ileana Ros-Lethinen, la mayor responsable republicana de la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara de los Representantes, destacada gusana y amiga de la familia Bush.

Pues no, definitivamente no, Comandante, esta historia no me hace reir.

Annie Arroyo

(mi amiga vasca)
Toto