Hará dos horas, entró una mujer desconocida,preguntó por fotocopias,
dije que eran las mejores del Mercosur. Ahí se entusiasmó, pasó y al
rato volvió del fondo con papeles en la mano.
Me extendió una copia de esto que escribió para las Madres de la Plaza
de Mayo. Ella estará marchando alrededor de la Pirámide o participará
emocionada en el homenaje posterior. Ustedes están leyéndola……
Jueves - Madres -
Y así fue durante 30 años…
Abrió los ojos, era otoño y era jueves
Abandonó la cama sin apuro
Hizo sus cosas/de a poco/lentamente
Alimentó a su perra
Lavó y planchó su ropa/se peinó
Se preparó para el viaje de siempre
Alcanzó al colectivo
contando las monedas
Sacó el boleto/nadie le dio el asiento
miró por la pequeña ventanilla:
Nubes oscuras – cierto frío
en el otoño algunas ráfagas de viento
Bajó
Llegó al andén
Traspuso el molinete
un gendarme cuidaba el patrimonio
Entonces subió al tren y esta vez pudo sentarse
se quedó pensativa
En fin: descansó un poco….
Hizo el breve trayecto
y llegó como en una manada
A Plaza Once.
Había nubarrones en la tarde.
Con un cierto tufillo a pochoclo y frituras
quizás garrapiñadas…
Tantos pibes correteando en las veredas
personas apuradas.
Miró adelante/cruzó Mitre/bajó las escaleras
y se internó en el subte más antiguo
de fierros y maderas centenarias
Llegó la formación/subió de prisa
Se acomodó como pudo
el corazón entre pecho y espalda
Entre tanto silencio entre la gente
porque a veces
hay muy pocas palabras…
Cruzó las estaciones –una a una –
del Once hasta la Plaza
y allí bajó y salió presurosa del túnel
Un rayito de sol partía en dos el cielo
Las vió girando y supo que era tarde
Se fue atando sin paciencia el pañuelo….
Silvia Spitalnik