
CENSURA DE TEATRO EN LOS ESTADOS UNIDOS
No se pudo levantar el telón del teatrito del prestigioso Colegio Wilton de Connecticut, en el que 16 estudiantes de teatro iban a representar “Voces en conflicto”, una obra sobre Irak.
La pieza consiste en una serie de monólogos que recogen la palabra de soldados que allí combaten y “describen gráficamente la violencia y una ambigüedad moral que parecía cuestionar la ecuanimidad de la guerra” (The Christian Science Monitor, 12-6-07).
El decano del colegio, Timothy Canty, canceló en marzo la representación porque podía herir los sentimientos de deudos de los caídos y de familiares de los efectivos en Irak.
El hecho motivó que Edward Albee y una treintena más de conocidos dramaturgos firmaran una carta de protesta y que varios teatros de Nueva York ofrecieran sus instalaciones para que la obra llegue al público.
Los actores tal vez pronuncien frases como la del soldado Donald Hudson Jr.: “¿Por qué seguimos todavía en este país que no nos quiere?”. O ésta, del capitán Jeff Leonard, que atiende a efectivos traumatizados por la guerra: “Estoy cansado de ver llorar a jóvenes en la plenitud de su vigor” (www.vaiw.org, 12-6-07).
Se sabe: una contienda bélica produce mutilaciones de todo tipo.