Moncada 50 a 56 Relata Fidel los objetivos y detalles del asalto Resumen de las conversaciones sostenidas por el Presidente cubano con periodistas suecos que lo acompañaron a recorrer los escenarios de los sucesos del 26 de julio de 1953. (Publicado en Revista Casa de las Américas, 1978) Servicio Especial de la AIN
Periodista: ¿...la estrategia del Moncada era tomar ese campamento para armar luego al pueblo y seguir una guerra? Fidel: Nosotros pensábamos ocupar las armas del campamento en Santiago de Cuba , hacer un llamamiento a la huelga general de todo el pueblo, partiendo de la situación de descontento y de odio hacia Batista y utilizar las estaciones de radio para un llamamiento a la huelga general. Si no se lograba la paralización del país el objetivo nuestro era después ir hacia las montañas para librar una guerra irregular en las montañas. Periodista: ¿...de dónde partieron los vehículos que fueron a atacar el Cuartel? Fidel: Desde aquí...(la granjita Siboney) Esta casa sirvió primero para concentrar las armas, y por último, para concentrar el personal. Esta carretera sale a una avenida, la avenida al Cuartel, y tácticamente era el mejor lugar para esa operación. Aquí se disimulaba esto con el pretexto de que se estaba fundando un granja avícola en este lugar (en las afueras de Santiago de Cuba). Periodista: Pero aquí no se hizo ningún entrenamiento, solo la concentración... Fidel: Aquí no se podía hacer entrenamiento porque era muy arriesgado; el entrenamiento lo hicimos en La Habana... Llegamos a entrenar más de mil hombres... Aquí concentramos al personal que iba a atacar el Moncada. Ciento treinta y cinco hombres se reunieron aquí en la madrugada del día 26 de julio, mientras otro grupo estaba en la zona de Bayamo. Porque militarmente nosotros pensábamos tomar el Moncada y Bayamo (el cuartel), para tener una vanguardia organizada en la dirección principal de contraataque posible de Batista. Periodista: ¿...Aquí se montaron en los carros y en los autos que fueron? Fidel: Por ahí hay un pozo donde guardamos las armas, porque las armas nuestras las conseguimos en las armerías, eran armas de caza... El grueso de nuestras armas eran de este tipo de escopeta, calibre 12, calibre 16 y fusiles de 22 milímetros. La única arma de guerra es un fusil M-1 que se utilizaba de entrenamiento en la Universidad (de La Habana) Otro hecho:... Todos nuestros uniformes eran uniformes del Ejército, que los habíamos adquirido a través de un compañero nuestro que estaba en el Ejército de Batista... El elemento sorpresa era el factor decisivo de la operación... Al Ejército de Batista íbamos a tomarle la segunda fortaleza militar del país, que tenía más de mil hombres. Y se habría podido tomar. Aún hoy pienso que el plan no era un mal plan; era un buen plan. Periodista: El problema fue el desvío de la otra fuerza. Fidel: El problema fundamental es que con motivo de los carnavales, que nosotros habíamos planificado nuestra acción durante el carnaval, para poder movilizar más fácilmente a nuestras fuerzas, en esos días precisamente ellos redoblaron la guardia y establecieron una posta cosaca alrededor del Regimiento...Y lo que complicó la situación definitivamente fue el choque con la guardia cosaca alrededor del cuartel y por la calle principal por donde íbamos nosotros. Y origina un combate fuera del cuartel. De lo contrario, nosotros habríamos podido tomar el cuartel perfectamente bien. Periodista: ¿Cuántos carros eran en total? Fidel: Primero salieron los carros que iban a tomar el Hospital Civil, eran tres. Después, los carros que iban a tomar la Audiencia, eran dos... treinta y cinco hombres. Y después conmigo iban los carros que iban a tomar el Cuartel, que eran alrededor de catorce carros... Yo llevaba alrededor de noventa hombres...(Fidel y los periodistas arriban al Cuartel Moncada, donde prosigue el relato) Entonces le voy a decir dónde se produce la crisis; se produce aquí. ¿Por qué? Porque la posta cosaca venía en esta dirección hacia acá y nos la encontramos aquí; pero un carro había pasado delante de nosotros, que es el que tenía que desarmar la posta, y el carro llegó-llevaba cien metros delante de nosotros-y desarmó la posta. Pero la posta cosaca vio pasar el primer carro y se quedó mirando; y cuando vio que el carro desarmó a la posta allí, se puso en guardia, alerta... El resultado fue que el combate se empieza a desarrollar fuera del cuartel, y el combate tenía que desarrollarse dentro del cuartel. Periodista: Entonces se movilizó el cuartel. Fidel: Se movilizó el Regimiento y organizó la defensa. Eso fue lo que impide...Porque realmente la posta cosaca era una cosa nueva, que la habían puesto con motivo de los carnavales. El plan realmente...Allí tenía que empezar cuando nos franqueara la posta. Pero resulta el encuentro con la posta cosaca... Yo creo que si hubiéramos seguido, sin hacerle caso a la posta los otros carros, habríamos tomado el cuartel. Fue el más grave. Si no llega a ocurrir el incidente de la posta cosaca, nosotros tomamos el Cuartel, porque la sorpresa era total. Era un buen plan. Y si fuera necesario hacer un plan ahora, con la experiencia que ya tenemos, haríamos un plan más o menos igual. El plan era bueno. (AIN)
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