lunes, 10 de mayo de 2010

Homenaje a Bolivia tinku caporal taquirari urina quinua zampoña Adys Cupull y Froilán González

 

HOMENAJE  A   BOLIVIA   EN   CUBA    

 

 

                  La  Wiphala:    ARMONIA   Y    EQUILIBRIO

 

Por   Adys  Cupull   y   Froilán González

 

Con mucha armonía, equilibrio y alegría, se desarrolló en La Habana un  acto de homenaje al presidente Evo Morales y a su digno pueblo, estuvo organizado por los estudiantes universitarios bolivianos ,  la Embajada de la República Plurinacional de Bolivia y la Federación de Asociaciones Culinarias.  El acto  se desarrolló en  La Casa del Cheef en Xifré número 57,  en  el  capitalino municipio de Centro Habana.

 

 

La tarjeta de  invitación tenía la simbólica Wiphala de fondo,  una  bandera que despertó interrogantes en Beatriz, nuestra nieta mayor, a quien le   explicamos que es rrepresentación de la unidad, y  le comentamos sobre un folleto escrito por el sacerdote belga Pablo Franssems quien  en 1992  nos lo regaló  y   declaró su  pasión por Bolivia y narró de como   fue  hasta  ese país, para   evangelizar a los aymaras, pero,   resultó que junto a ellos   él fue  evangelizado para su noble y justa  causa. Aprendió  de su cultura, tradiciones,  principios morales, razonamientos y conceptos  estrechamente relacionados con la naturaleza y en defensa  de la justicia.

 

Franssems nos obsequió una Whiphala, que  aún  conservamos con verdadero afecto. Es una bandera  cuadrada  con 49 cuadritos iguales,  siete por cada lado. Cuenta con una diagonal blanca central, que significa, dice, camino rico y poderoso. Los cuatro lados  son de la misma longitud, iguales.  Los colores distribuidos  de manera equitativa en cada parte dan la idea de   equidad, armonía y equilibrio. Expresa que es  símbolo  de las relaciones socioeconómicas, culturales y políticas de forma igualitaria, dentro de la vida colectivista de los Andes.

 

Pablo explicó que según estudios de un reconocido aymara, arquitecto, pintor, e investigador, la bandera tiene relación con el sol y la luna y  llegó a las conclusiones siguientes:

 

Que su raíz es precolombina,  concentra la sabiduría andina y en forma simple y visual, patentiza la savia del mundo andino, hecho de  ARMONÍA Y EQUILIBRIO,  

Que sobrevivió en la clandestinidad más de quinientos años, igual que el pueblo que la creó y a pesar de  la prohibición no pudo  ser abolida,  como tampoco el pueblo que  representa.

 

Que alzar la Wiphala,  significa  hundir con orgullo, raíces en su pasado histórico, glorioso, propio, libre, sabio, para afirmarse como pueblo y  recorrer el camino liberador hacia  la autodeterminación.

Así, con orgullo, se alzó la  Wiphala en esa mañana de fiesta y homenaje, junto a las banderas de  Bolivia  y Cuba. Hubo saludos en las lenguas originarias. Estaban presentes  las  culturas  quechua, guaraní,  chiriguana  y  otras .

 

Se exhibieron danzas, artesanías, trajes autóctonos, música y   platos de la cocina típicos de los diferentes departamentos: La Paz , Sucre, Santa Cruz, Tarija, Beni, Oruro, Pando, Cochabamba y  Potosí. Las identidades del altiplano,  los llanos y  las selvas, se fundieron en un  apretado abrazo y aplausos  de los presentes.

 

Las palabras de inauguración las expusieron  los estudiantes,  un miembro de la  Comisión Organizadora del acto, y Josué Mamani de la Federación de Estudiantes Universitarios, quienes se  refirieron  a la  firmeza con que  el pueblo boliviano  ha enfrentado todas las amenazas  internas y externas; a los logros crecientes en la cultura, la salud, la educación,  el deporte, la economía;  y la fidelidad a los ideales de los grandes Héroes de  América,  cuyos  principios de independencia  se vuelven realidad.

 

 En la intervención, los estudiantes bolivianos  leyeron  un  comunicado  para dar   a conocer al mundo,  su condena a la campaña mediática del imperialismo norteamericano y la Unión Europea contra Cuba.

 

Los asistentes agradecieron a los  jóvenes  las danzas del tinku, la cueca, la chacarera, y el caporal,  el taquirari, entre otros,  que  interpretaron con destreza y majestuosidad; también  el   documental "La grandeza del silencio", basado en la vida de la comunista  boliviana Josefina Farfán, asimismo la presentación del  libro  "De Ñacahuasú a La Higuera";   y  que  con nuestras manos tocaramos la hoja de  coca,   apreciar el  api, el  tereré, los cuñapés, el locro, charqui, chairo, la quinua, el chuño y  la tunta. Agradecidos   escuchamos las notas de la quena, el charango, la tarka, el pinkillo y la zampoña.

 

¡Bolivia!, en este resumen va el elogio a tu  historia, al  hermoso paisaje  donde están presentes  la  llama, la alpaca, la vicuña, el guanaco, la urina, el anta, el quirquincho,  entre otros animales de  tu rica fauna.  Los caudalosos ríos y cumbres nevados. Va el saludo a la Kantuta, tu flor nacional.

Se agradeció  a la Embajada de Bolivia en Cuba  por la presencia de la compañera traductora en quechua y aymara, Matilde Lara, viuda de Inti Peredo e hija del eminente escritor  Jesús Lara  y  por  el  recuerdo a todas  las  mujeres bolivianas que en vida fueron solidarias  con Cuba, como  la promotora social Magda Cornejo, la poetisa y periodista Silvia Ávila, la traductora en quechua Mireya Echazú, viuda de Roberto Peredo, la cineasta Beatriz Palacios, y una cubana, profesora de las Artes Culinarias, Mirtha Proenza, quien apreciaba estos encuentros. 

 

Admirados escuchamos  las palabras de Patricia Jiménez y Lucrecia Valenzuela, del Comité Internacional por la Libertad de los cinco héroes:

 

Antonio Guerrero,

Fernando González,

Gerardo Hernández,

Ramón Labañino, y

René gonzález,  de quienes hablaron  enfatizando en la necesidad de continuar la Campaña de Reclamo por su  libertad. 

 

Se entregaron Reconocimientos  a los colaboradores del acto, entre ellos al Presidente de la Federación de las Asociaciones Culinarias de la República de Cuba Edy Fernández, que recibió un Diploma con la Wiphala , firmado por el señor Hugo del Río Puente, Agregado de Defensa de la Embajada de  la República plurinacional de Bolivia en Cuba, y por  Hilda Tito Vera y Ernesto Monrroy,   del Comité Organizador de este Homenaje.

 

 Fotos:

  1.- La Wiphala  

  2.Elisabeth, Adys, Libertad,

  3. Ernesto Monrroy  en la Danza del Caporal

  4. Danza del Oriente boliviano, interpretan estudiantes universitarios

  5. Grupo de estudiantes universitarios, intérpretes de música típica  

  6. Sala con  las Exposiciones de artesanías y platos  de la cocina boliviana