VUELVE MEGUESOXOCHÍ
Para los que no conocen quien fue, el Señor Meguesoxochí fue un Capitán de la Guerra de Todos los Chacos, que actuó a fines del Siglo 19, enfrentando al ejército invasor de la oligarquía argentina. Su madre fue una india abipón del linaje naqaiqueterjé y su padre un indio toba. Su tropa estaba formado por restos de tribus diezmadas de todas las etnias chaqueñas e incluía argentinos rebelados contra su propio gobierno.
Tres veces fue capturado por los soldados argentinos, y dos veces logró escapar negociando con los invasores, pactos que jamás cumplió, pero que permitieron a sus milicias sobrevivir en medio de las selvas profundas. La tercera vez que fue capturado, lo molieron a palos, pero ni uno solo de sus huesos pudo ser quebrado. Junto a sus lugartenientes fue encerrado en un tren y vigilado por soldados, rumbo a la ciudad de Formosa.
En la mitad del trayecto, Qad'ta'á envió a sus anjelespí, para que paren el tren, y éstos lo detuvieron. Los militares a bordo fueron transformados en alacranes; mientras que el señor Meguesoxochí y sus capitanes fueron elevados directamente a la Ciudad del Cielo, sin probar la muerte corporal, prometiendo que regresaría a restaurar el Sistema Chaqueño y derrumbar el Sistema de Cosas.
También dijo que cuando volviese, se revelaría a su Pueblo, los Hijos de Qom, aclarando que éstos no son una raza o un idioma o un ritual; sino todos aquellos que cumplen la Ley de Nogüét, el reglamento que encamina hacia una vida buena, próspera y feliz. Al volver, juzgará a los humanos por el carácter de sus corazones y la firmeza de sus decisiones.
En ese día, muchos creerán que por pertenecer a una etnia determinada, o un idioma señalado, o practicar un ritual, o por usar un distintivo, el Señor Meguesoxochí los elegirá; porque ignoran que el Capitán-Tigre no mira con ojo de hombre, sino con el ojo de un Dios. Cuando Meguesoxochí fue ascendido a la Ciudad del Cielo, le fue borrada la cicatriz de su ombligo, perdiendo por tanto su condición humana y mezquina.
Al final de los Tiempos, reunirá a sus fieles en la Llanura Sagrada de Lacangayé, y entonces será la batalla contra todas las naciones defensoras del Sistema de Cosas, la manera de vivir que destruye a la humanidad.
Nosotros sabemos que Él ya está aquí, porque se está apareciendo en sueños a muchas personas, indias y no indias, preparando sus corazones rectamente, para su advenimiento.
Nosotros, los Hijos de Qom, los que pertenecemos al Partido de los Devotos de Qad'ta'á y nos esforzamos en la Ley de Nogüét, nos preparamos, para completar con nuestro esfuerzo humano, la Esperanza de Aquel-Que-Viene.
Y a Qad'ta'á toda la alabanza; porque Él hace lo que quiere.