DECLARACION POR LOS CINCO PATRIOTAS CUBANOS AL CUMPLIRSE TRECE AÑOS DE SU INJUSTO ENCARCELAMIENTO.
Desde el mismo momento en que la Revolución derrocara a la dictadura de Fulgencio Batista, Cuba ha sido víctima de bloqueo económico, comercial y financiero, de continuidad de la ocupación colonial de Guantánamo, de invasiones a su territorio, de actos de piratería y de terrorismo, realizados, impulsados, tolerados o financiados por distintos gobiernos imperialistas de los Estados Unidos.
Basta señalar que:
· En los años 60, el presidente Dwight D. Eisenhower aprobó un plan desestabilizador de la CIA para entrenar en la realización de acciones terroristas contra Cuba, tales como, incendios, bombardeos o sabotajes, o la realización de los más de 600 intentos de asesinar al lider Fidel Castro.
· La guerra biológica desarrollada por los EEUU contra Cuba causó estragos, particularmente en 1981, en que las cepas de dengue hemorrágico plantadas provocaron el homicidio de más de un centenar de humanos.
· La oleada de actos terroristas contra el turismo en Cuba en los años 90 produjo víctimas fatales.
· Los gobiernos de los EEUU no se han limitado a organizar ejecutar o consentir estos actos. Sus jueces y presidentes han garantizado la impunidad de los homicidas, entre otros la de Luis Posada Carriles responsable de varios actos terroristas y prófugo de la justicia de Venezuela por el derribo del vuelo civil 455 de Cubana de Aviación el 15 de octubre de 1976 que produjo el asesinato de 73 atletas, estudiantes y tripulantes.
En estos días se cumplen 13 años de la prisión que sufren en EEUU los cinco patriotas cubanos Gerardo Hernández Nordelo, Antonio Guerrero Rodríguez, René González Schwerert, Fernando González Llort y Ramón Labañino Salazar.
Los 5 fueron tomados como rehenes cuando el Gobierno Cubano investigaba los reiterados ataques terroristas a la Isla y la red de impunidad tejida en torno a las organizaciones criminales que los organizaban. En base a esta investigación el gobierno cubano alertó y advirtió al gobierno estadounidense sobre las actividades concretas de diversos grupos de Miami –que individualizó-, que se dedican a diseñar actos terroristas en Cuba y otros países, incluso en los mismos EEUU. Al hacerse público el informe sobre terrorismo, el gobierno de EEUU, en represalia, encarceló a los cinco patriotas y los sometió a un proceso arbitrario en el cual se violaron las más elementales garantías en pos del objetivo político de dar escarmiento a quienes desenmascararan parte de la metodología terrorista que diseñaban las bandas instaladas en Florida con el patrocinio del gobierno estadounidense. La prueba de la intromisión del departamento de estado en las decisiones del poder judicial saltan a la vista al realizarse el frondoso inventario de violaciones a la propia Constitución de los EEUU cometida por sus jueces, contrariando precedentes judiciales y el Derecho Internacional, en especial:
1. realización del juicio en un ambiente evidentemente hostil, carente de jurado y juez imparcial;
2. numerosas violaciones al debido proceso;
3. falta total de adecuación de la conducta al tipo penal imputado;
4. reclusión cruel e inhumana, alojamiento de los presos en lugares extremadamente distantes para impedir su comunicación, su aislamiento total de familiares, incluyendo esposas e hijos y amigos, con el deliberado propósito de debilitar la moral, propiciar una traición a sus convicciones y anular el ejercicio de una defensa eficaz;
5. ocultamiento a la defensa y al Jurado de prueba “secreta” que luego fue validada por la jueza interviniente;
6. sentencia que contraría diversos precedentes en forma arbitraria al no desarrollar una justificación.
Las condenas –de inusitado rigor- no sólo cobran víctimas inocentes sino que constituyen un ataque a la libre determinación y a la dignidad de la decisión soberana del pueblo cubano de no someterse al dominio imperial.
El grupo de trabajo del Consejo de Derechos Humanos de la ONU sobre Detenciones Arbitrarias, consideró ilegales tanto la detención y los largos periodos de aislamiento de los acusados, como que el juicio se haya celebrado en Miami y con intervención de jurados escogidos allí.
En este momento se tramita un hábeas corpus, encabezado por Gerardo Hernández, en el que se plantea la nulidad del proceso por ocultamiento de las pruebas esenciales en que se basaran la fiscalía y el tribunal sin dar oportunidad a la defensa de desvirtuarlas. Sigue interviniendo el tribunal que responde a las organizaciones anticubanas de Miami.
También es en Miami el lugar cínicamente asignado a René Gonzalez para que allí haga ejercicio de la libertad condicional que en breve ha de corresponderle, lo que constituye un grave e inminente riesgo para su vida e integridad física, exponiéndolo a las represalias de las organizaciones terroristas y mafiosas que él mismo investigó y denunció o a la pérdida del beneficio ante el más ligero incidente.
Por la gravedad de las razones expuestas, la Rama Argentina de la AAJ:
exhorta al Presidente Barack Obama a que, haciendo uso de las prerrogativas que le concede la Ley, haga un gesto diferenciador de las
organizaciones terroristas, disponiendo la libertad de los cinco patriotas cubanos;
llama a todas las organizaciones de abogados, jueces, funcionarios, y empleados de la justicia nacional y provinciales, a pronunciarse
en el mismo sentido.
