miércoles, 6 de junio de 2007

Derechos Humanos Estados Unidos condenado por Amnesty Tortura Secuestro ilegalidad














Amnistía Internacional condenó a Washington por derechos humanos

Londres - Estados Unidos trata a todo el planeta como un enorme campo de batalla para su guerra contra el terrorismo y erosiona los derechos en el mundo entero, denunció ayer Amnistía Internacional.

La secretaria general de la organización defensora de los derechos humanos, Irene Khan, dijo que el comportamiento de Estados Unidos y sus aliados sentaba un precedente destructivo para otras naciones, y que varios países estaban usando la guerra contra el terrorismo como una excusa para violar los derechos humanos y aplastar las disensiones.

Tortura

“Uno de los mayores golpes a los derechos humanos ha sido el intento de estados democráticos occidentales por revertir algunos principios fundamentales de los derechos humanos, como la prohibición de la tortura”, indicó Khan, antes de la difusión del informe anual de la organización sobre el estado mundial de los derechos humanos.

El informe condenó la respuesta de Washington al terrorismo internacional diciendo que había hecho poco para reducir la amenaza, profundizando a la vez la desconfianza entre musulmanes y no musulmanes y socavando el imperio del derecho. La política del Gobierno de George W. Bush de llevar a sospechosos de terrorismo a países donde pudieran ser torturados fue particularmente condenada.

“El discurso ambiguo del Gobierno de Estados Unidos ha sido vergonzoso”, dice el informe. “No se arrepiente de la red mundial de abusos que ha suscitado en nombre del contraterrorismo”.

La posición singular de Estados Unidos en el escenario mundial justifica la crítica, dijo Khan.

“Si nos concentramos en Estados Unidos es porque creemos que es un país cuya enorme influencia y poderío deben ser utilizados de manera constructiva”, afirmó. “Cuando países como Estados Unidos parecen socavar o ignorar los derechos humanos, envían un mensaje muy poderoso a los demás”.

El informe censura a países europeos por no oponerse al plan estadounidense de traslado de detenidos, mientras que aliados de Estados Unidos como Gran Bretaña, Australia y Japón son criticados por aprobar duras leyes antiterroristas o antiinmigratorias.

La represión rusa a los periodistas también es objeto de censura de Amnistía Internacional, al igual que la situación de los derechos humanos en Zimbabue y, sobre todo, la continua violencia en Darfur, que Khan calificó de “herida sangrante en la conciencia mundial”.