lunes, 6 de agosto de 2007
San Isidro en Buenos Aires zona residencial alto poder adquisitivo que posee una villa de emergencia La Cava desnutrición mala vida
INDIGNANTE: UNO DE CUATRO CHICOS SUFRE DESNUTRICION
22/07/2007 00:07
Contrastes que duelen de la Argentina. San Isidro, una zona residencial donde gran parte de la población posee un muy alto poder adquisitivo, presenta otra realidad en el barrio de emergencia La Cava, que con sus profundas Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI), ubican a este partido del conurbano bonaerense entre los tres primeros con mayores diferencias sociales de todo el país.
La imagen del comedor barrial que cada dia se hace más comun
Un relevamiento nutricional de los pibes de La Cava, a cargo de Carlos Seglín, responsable del área de pediatría del Hospital Municipal Carolina Tobar García, arrojó resultados escalofriantes: un 67 por ciento de chicos presenta peso y talla por debajo de los parámetros normales que fija la Organización Mundial de la Salud (OMS) para cada edad.
La despensa del comedor "La casita de la Virgen" fue utilizada como consultorio, con sólo un par de sillas, un metro, una balanza y una planilla. Con el infaltable estetoscopio colgando del cuello, el doctor Seglín llevó adelante la revisación general, mientras los chicos comenzaban a llegar a su merienda-cena, único turno que actualmente puede sostener el comedor que es apadrinado por Manos por hermanos.
"Del total de la población asistida, tenemos un 15% de chicos con desnutrición grado 1 y un 11% con desnutrición grado 2 (más severa)", lo que representa que uno de cada cuatro nenes padece algún grado de desnutrición, señala el informe que se realizó en base a 80 pibes que concurren al comedor. "No existe, a nivel municipal, ninguna dependencia o programa de asistencia al niño desnutrido. Este hecho, de por sí solo, configura una situación de desprotección intolerable y que debe ser solucionada con urgencia", reclama Sandro Tesar, presidente de Manos por hermanos.
La desnutrición que "convive con nuestros pibes es una verdad indiscutible, incontrastable, médica y científicamente comprobable con los parámetros de salud vigentes". Pero, sobre todas las cosas, olvidados por quienes tienen la obligación de recordarlos. "También creo que le va a doler a ellos, que descansan sus traseros en cómodas butacas de calefaccionados despachos, que se encuentran a tan sólo unas 15 cuadras de donde todo esto pasa", sostiene Tesar.
La Cava ocupa unas 25 hectáreas, con una población aproximada actual que oscila entre 10.000 y 12.000 personas, de las cuales alrededor del 65% son menores de 16 años, agrupados en más de 2.000 familias con un promedio de 5 chicos cada una. Durante la recorrida que realizamos por La Cava, pudimos constatar los terribles problemas que existen, además de la desnutrición de los más pequeños.
Un altísimo porcentaje de los hombres de las familias está incluido en la categoría de desocupados o sub ocupados durante gran parte del año. "Cuando esta realidad se extiende a la mujer, la situación se torna caótica. Los ocupantes de la zona más crítica se dedican en general al cirujeo, a la recolección de cartón y botellas", explica. Y agrega: "Los hombres esporádicamente hacen changas en construcción. El trabajo de los niños es frecuente y por lo general comienzan desde temprana edad con tareas de venta ambulante, recolección de cartones, botellas y changas en supermercados".
Las deficiencias y las condiciones de precariedad, en cuanto a la atención y cuidado de la salud, se encuentran directamente relacionadas con la falta de higiene y una alimentación entre inadecuada e insuficiente: "Son pocas las familias que conservan una estructura organizada y estable. Los nuevos modelos vigentes en la sociedad se ven reiterados con crudeza. Los vínculos conyugales y parentales se diluyen, la conformación familiar está fracturada". Son frecuentes los casos de mujeres jefas de hogar, ya que "la figura de padre se encuentra muchas veces ausente. Los abuelos asumen la responsabilidad del cuidado y atención de los nietos y bisnietos. La maternidad precoz seguida de actitudes abandónicas es otro factor predominante", que lleva a los más pequeños a un estado de desprotección.
La recorrida de Crónica continúa: en algunos sectores observamos basurales donde proliferan roedores, mientras los chicos juegan a pocos metros de allí. Postales que duelen de la Argentina de hoy...
MATIAS KAPLAN