viernes, 28 de mayo de 2010

Petroleo derramado en el Golfo de México tragedia ecológica disimulada por EEUU

PETROLEO EN EL GOLFO

Ayer lunes 24 de Mayo del 2010 durante horas en C-SPAN TV y después de 34 días consecutivos del ‘reportado’ descubrimiento del derrame, varios líderes-jefes burócratas de EEUU se vieron hablando sobre el derrame incontenible de petróleo en uno de los pozos de la compañía British Petróleo = BP al sur de las costas del estado norteamericano de Luisiana.

La gran mayoría del pueblo que los escucharon parece quedó tranquilo y quizás hasta satisfechos con las decenas de miles de palabras muy políticas, vagas y evasivas usadas por sus bien asalariados jefes. En las pantallas aparecieron portavoces de la Casa Blanca, el Comandante de los guarda costas, el secretario del interior, la secretaria de seguridad patria, senadores, etc.

Todo lo dicho posiblemente sonó bien en el oído del americano común acostumbrado a aceptar la dulzura, credibilidad y autoridad de sus altos y tan democráticos líderes. Y las varias preguntas de la gran prensa fueron superficiales y obviamente ya preparadas. Elementalmente los reporteros  seleccionados para hacer preguntas eran bien conocidos por los jefes pues fueron llamados por sus primeros nombres. Ninguno ni siquiera insinuó no solo la incompetencia y obvia negligencia operacional de BP, sino también la incompetencia demostrada por la inercia de los jefes en Baton Rouge y en Washington. Una nerviosa senadora del estado de Luisiana prontamente corrigió el abismal fallo de su lengua después de declarar que BP ‘a su más pronta conveniencia’ resolvería este problema.

Aunque se usaron muchas diferentes palabras, todos los jefes desarrollaron más o menos la misma idea y tema: ‘BP es responsable y Washington hace todo lo posible para asegurar que BP resuelva el problema y page por el costo del derrame; BP está cooperando; se hacen muchos planes, estudios, coordinaciones, investigaciones y preparaciones para acciones que se esperan den resultados positivos en un futuro no muy lejano; 22,000 cerebros, expertos, e ingenieros trabajan para solucionar el continuo derrame a una milla de profundidad en el fondo del mar Caribe; más de 100 de los mejores cerebros científicos trabajan por soluciones y para calcular con más precisión cuanto crudo se ha en realidad derramado’. Algunos piensan que la cantidad del derrame reportada por BP es convenientemente demasiado baja. Con mucho menos cerebros, expertos e ingenieros en sus filas, Latinos sin Fronteras se atreven a estimar que se derraman unas tres veces más de lo reportado por la transnacional petrolera.

El consumo y desperdicio descomunal de petróleo en el país norteño ciertamente continuará.  Los permisos para perforar en el fondo de los mares siguen, y la catástrofe ecológica se borrará de las mentes del dócil y maniatado pueblo estadounidense.

A todo esto ciertamente hubo más de un televidente que, conociendo muy bien la credibilidad y sabiendo muy bien la maestría del engaño poseída por los líderes en la pantalla, no pudieron dejar escapar una incontenible risa amarga.

Latinos sin Fronteras, Los Ángeles.