LA TIERRA ESTA SENTENCIADA A MUERTE Mumía Abu-Jamal 07/O1/07
Cuando salí al patio hace unos días, (Bueno... cuando salí a la jaula!), no lo pude evitar, pero me pasmé.
Todavía estaba oscuro, porque el sol aún no había salido, no eran ni las 7 de la mañana. Y ya estaba a cerca de 60 grados. Quedé absolutamente sorprendido con lo caluroso que se sentía.
El césped aún estaba verde, y parecía como una mañana húmeda de primavera.
Sin poderlo evitar, pensé en el calentamiento global -- en las miles de toneladas de gases de invernadero que se tiran a la atmósfera y atrapan el calor en la superficie de la tierra, como frazada sobre una cama.
Esa fué la experiencia más clara que he vivido en mis más de 50 años.
Pensé entonces que en verdad fué una bendición que Al Gore no fué electo en el 2000, porque si lo hubiera sido, es muy probable que no fuera tan franco como él lo es hoy sobre las causas del calentamiento global y sobre las consecuencias para las poderosas compañías petroleras.
El robo de las elecciones lo liberó para dedicar su tiempo y sus energías a un asunto de su más alto interés; y a la conferencia que se filmó (y al libro), "Una Verdad Inconveniente: La Emergencia Planetaria del Calentamiento Global y Qué Podemos Hacer Sobre Eso" (An Inconvenient Truth: The Planetary Emergency of Global Warming and What We Can Do About It*, Melcher Media/Rodale), que han llegado a más gente, y en grados más profundos, que ninguna conferencia de prensa presidencial.
Aún cuando siempre son ridiculizados como, "abraza-árboles", y como ecologistas que quieren destruir los negocios norteamericanos por los sabelotodo que pagan las corporaciones y por los conservadores (¿Porqué llamar "conservadores" a gente que les importa un pepino conservar el planeta?), hay algunos que piensan, que se atreven a discutir las señales obvias del calentamiento global. ¿Los árboles de cereza de Washington, DC, florecen en diciembre y en enero?* Flores y bichos reaccionan al calor como si se tratara de una temprana primavera.
En la frígida zona polar, los osos polares se están ahogando --ahogando!-- por la creciente distancia entre los témpanos de hielo.
La habitación humana, por lo menos en las ciudades, ahora está en peligro en este nuevo mundo formado por la falta de previsión humana.
¿Qué serio es el calentamiento global? Jim Hanson, Director del Instituto Goddard para Estudios del Espacio, de la NASA, recientemente escribió en, "La Amenaza al Planeta" (The Threat to the Planet), artículo en The New York Review of Books, (7/13/06), lo que significa la diferencia de 5 grados de calientamiento para el nivel de los mares de todo el mundo:
"Aquí también, nuestra mejor información viene de la historia de la Tierra. La última vez que la Tierra estuvo cinco grados más caliente fué hace tres millones de años, cuando los niveles del mar estaban como unos ochenta piés más altos.
"Ochenta pies! En ése caso, Estados Unidos perdería la mayoría de las ciudades de la costa este: Boston, Nueva York, Filadelfia, Washington y Miami; en verdad, todo el estado de Florida estaría prácticamente bajo el agua. Cincuenta millones de personas viven bajo el nivel del mar en los Estados Unidos. Otros países la pasarían peor.
China tendría 250 millones de desplazados. Bangaladesh produciría 120 millones de refugiados, prácticamente la nación entera. India perdería la tierra en la que viven 150 millones de personas." [p. 13]
Esto quiere decir que la Tierra y el espacio vital de más de 570 millones alrededor del mundo, se irían bajo las aguas: "sólo 5 grados!"
Jamás en la historia de la humanidad la gente ha causado devastación en tal escala.
¿Es ésto, "civilización"?
Este es uno de lo costos del "estilo de vida norteamericano".
No cree Usted que la catástrofe que amenaza debido a esta crisis ecológica como que pone la idea del "terrorismo" en otro plano de preocupación?
Han habido guerras y rumores de guerras por el petróleo que contribuyen a la inundación de las ciudades y a la destrucción de la Tierra.
Los políticos no han hecho absolutamente nada para resolver esta verdaderamente ominosa crisis. Eso porque los políticos son, por su misma naturaleza, secuaces de corporaciones cuyo único interés son las ganancias.
Este sistema no es la solución. En verdad, este sistema es el problema.
Sólo el pueblo, repudiando el sistema, puede empezar a cambiar esta tragedia que nos está amenazando, trabajando juntos para construír un mundo nuevo.
*Los renombrados árboles de cereza de Washington, DC, usualmente florecen en la primavera, en marzo-abril. Diciembre y enero? Invierno. (Nota de traducción.)
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