Eduardo de la Serna <edlserna03@uolsinectis.com.ar > escribió:
Breves comentarios al presente:
1.- Días pasados, ante la importante derrota en las elecciones, el Jefe electo de la Ciudad Autónoma, Maurizio Macri, repitiendo las mismas palabras que De la Rúa, afirmó que él no perdió, ya que no se presentaba. Es el mismo, que con las mismas palabras que Carlos Saúl reconoció que "leyó" alguna novela de Borges (que escribió tantas novelas como tantos son los escritos de Sócrates). Ante el asesinato del docente Carlos Fuentealba por la represión, su viejo e histórico aliado, Sobisch, se encontró súbitamente, sin aliado; Macri se había evaporado. Luego vino el 100% preparado Blumberg, que se preparó en todo menos en ingeniería (parece) y cuando se hizo público que el susodicho era tan ingeniero como Macri lector, el que sí es ingeniero (obviamente pagando... me refiero a las cuotas de la Universidad) pro-yectó un puente para escapar del salvavidas de "plomo" que le presentaba el "empresario". Más tarde, ante la derrota electoral -que no lo comprometió- el presidente de Boca desapareció tanto de los "bunker" de López Murphy como de De Narváez-Macri. Esto mereció que el humorista de Página 12 lo llamara "anoxer", al revés de "rexona" porque siempre te abandona. ¿Qué pasará cuando haya conflictos en el Gobierno de la ciudad?, ¿qué hará el fugitivo? Siendo que no se refugiará en la lectura, ¿qué pasará con los "isleños" porteños ante los primeros problemas? Realmente es una incógnita que sería interesante resolver... ¿Será la "remake" del Fugitivo? ¿Tendrá helipuerto el "palacio" de Gobierno porteño?
2.- Siempre recuerdo con desprecio aquel momento en el Juicio a las Juntas genocidas cuando los jueces les preguntaron a Triacca y Baldassini sobre sindicalistas desaparecidos. No les constaba, no recordaban... no recordaban Luz y Fuerza, Mercedes Benz, Saiar... no recordaban que en el '76 "desapareció" también otro sindicalismo. Más tarde vino un nuevo genocidio, este "planificado", que algunos llamaron menemismo. Siempre recuerdo con desprecio que los dirigentes de los gremios que más desocupación "aportaron" a la Argentina (Ferrocarriles, YPF, por ejemplo) eran los que más "relaciones carnales" tenían con el ex-presidente. Quizás jugaran al golf. Desde hace unos años, el transporte de pasajeros está en el centro de cierta escena: decenas y decenas de camioneros provocan accidentes y muertes (muchos de ellos por conducir alcoholizados), colectiveros y choferes de larga distancia que conducen sin descanso, sin licencia, "en negro"... la tragedia de los chicos del colegio ECOS es un signo de ambos casos. Y nada dicen los dirigentes sindicales. Yo me preguntaba antes, con desprecio, si acaso Moyano, Palacios y otros estaban de acuerdo con que los conductores conduzcan sin control, "en negro", portanto un arma... pero ahora, viendo la reacción contra el puntaje en la licencia de conducir me queda claro: quieren conservar la impunidad. Para que si un conductor maneja alcoholizado, si un chofer no ha descansado suficientemente, si un taxista o colectivero ponen en riesgo vidas por la velocidad o cruzar semáforos en rojo, no sean sancionados. No sólo países del "Primer Mundo" tienen registros con puntaje (Holanda, Italia, España) sino otros como Panamá. Pero Viviani dice "estamos en Argentina", como si no lo supiéramos. Estamos en la Argentina, record de muertes por accidente, y tantos de esos provocados por camioneros, colectiveros, choferes como para que justifique que se haga algo. Y no sólo en la ciudad autónoma sino en todo el país. Pero un chofer de un chofer (sic) puede disparar un arma y quedar en libertad. ¡Madonna santa! ¿Quién conduce el volante de la justicia?
3.- Un incontinente verbal, Chavez y un rey que quiere mandar a la cama sin postre a un presidente de un "país bananero", fueron tapa de los diarios. Obvio que en sus países, el Zapatero remendón de los errores/horrores del menemista ibérico José María y su "Majestad" el Rey JC aumentaron la popularidad. Es que los sudacas deberían haber aprendido del error histórico de haberse independizado y reconocer que la nueva colonización hispana los devuelve a la dignidad de cola de león. Ya ese egregio socialista Felipe lo demostró cuando vino a calmar la eterna duda y despertar de la eterna siesta al que se "preparó toda la vida para esto" (como Sobisch) De la Rúa... Felipe explicó las bondades del 1 a 1 y las tarifas, y sus incontables ventajas (para ellos, obviamente). Claro que nunca se aclaró la legitimidad o no de la venta de YPF, ni de la deuda externa, las "diputruchadas" privatizaciones y el ahora monopolio de Telefónica, ese mismo que mediocres periodistas y envisonadas polifuncionarias defendieron. Curioso: nos habían dicho que el monopolio del Estado era malo, y que la competencia permitiría elegir y haría bajar los precios. Pero resulta que el teléfono sube, los combustibles también (ah! Claro! Ahora la culpa la tienen las commodities!), nunca se abrió el mercado telefónico y somos rehenes de una empresa que cada vez anda peor. Los que hace 10 días no tenemos teléfono, mi vecino Ignacio, que hace 4 meses no lo tiene, o Mercedes que tambalea en su negocio y no puede hacer ventas porque el "postnet" no funciona (A. Smith, Keynes, Marx y todos los que dijeron algo de economía, ¿cómo no tuvieron en cuenta el postnet? ¡qué ignorantes!). Obvio que el rey es jefe del estado español, y no de América Latina, pero no estaría mal que cuando viene a nuestra casa se calle la boca también él y pida permiso para hablar. Al fin y al cabo, algunos no queremos escucharlo.
4.- Como habitualmente, en muchos ambientes eclesiales se sigue hablando o insinuando una suerte de "persecución". Claro que esta parece haber bajado de tono: la presidenta electa habló críticamente del aborto y con eso la "persecución" parece haberse calmado. Mientras tanto pasan cosas: el genocida y torturador von Wernich sigue con licencias ministeriales y la sanción eclesiástica se sigue haciendo esperar (que quede claro que él sí puede celebrar y comulgar, pero los divorciados y homosexuales ¡jamás! ¿la misericordia? ¡Bien, gracias!); Napoleón Sasso, y otros, son condenados (cárcel, probation, prisión preventiva) o están en proceso porque un cura pederasta simplemente es trasladado de lugar, lo que equivale a barrer bajo la alfombra. Por no mencionar un obispo depuesto (o dos) que siguen haciendo su vida "normal" (y cobrando sueldos del Estado). Entre tanto, se beatifica a Ceferino. Y aunque –menos mal- se reconozca que su cultura e historia indígena le aportó el humus para su fe, y aunque haya dicho que "quiero estudiar y ser sacerdote misionero... porque me duelen los infortunios y sufrimientos de mi raza" (hoy decimos "etnia") en la Iglesia se siguen canonizando y beatificando "estampitas" (¿para cuando la estampita de Ceferino rubio?). Mientras siguen esperando Angelelli, Romero, y grandes defensores de indígenas como Proaño o Girardi (para nombrar sólo obispos). Y mientras, el arzobispo del Salvador afirma que si no se investigara quiénes son los asesinos de Romero, la causa de beatificación avanzaría más rápidamente (eso porque no lo mató la República Española, obviamente, porque en ese caso hasta tendría algún ascenso cardenalicio post mortem). Quizá haya muchos que están dolidos o sean críticos de la Iglesia; y mientras no busquemos mirar y convertirnos diariamente al Reino de Dios, ser fieles a "la Iglesia que Jesús quería", ciertamente muchos creeremos que esa "persecución" realmente existe: existe entre los que barren bajo la alfombra, los Sasso, los von Wernich, los Baseotto y tantos otros que solo buscan impunidad (como Telefónica y su rey, como Moyano y sus conductores, como Macri y sus empresas).
Eduardo de la Serna
14 de noviembre de 2007